De verdad que apenas estamos en la fase de que cada uno de los 450.000 registrado aquí en el Zulia estamos en la condición de simples aspirantes a militantes; pero apenas comienza este proceso, y con él se están dando los primeros fogonazos de las viejas prácticas del partidismo agudo. De nada le ha valido a la comandante Lina Ron, el esmero de revisar uno a uno los nombres y apellidos de los propulsores aprobados y juramentados por Chávez en el poliedro.
Ya sin haber llegado a la primera reunión de los batallones, las manos gordas y peludas en conchupancia con algunos miembros de la comisión de apoyo, se han dado a la tarea de birlar el proceso natural de promoción y propulsión del PSUV, borrando de las listas de propulsores, a todo activista que no le guarde fidelidad a sus oscuros intereses. Muchos hablan de que este registro mata lista Tascón, y a decir verdad, no solo la mata, sino que la sepulta por su condición incluyente; pero el borrador que cargan estos antiguos “dirigentes y jefes” tendenciales, dejan en pañales estas prácticas y también las peores de los partidos de la cuarta republica.
Esto que estamos denunciando y que esta sucediendo aquí en el Zulia, aparentemente tiene escasa importancia, dado el números de zulianos dispuestos a marchar al lado del Presidente, en su propósito unitario; pero precisamente por la dimensión del proceso, no es un simple rocío, mucho agua hay debajo de las hojas, y es preferible despejar el camino y no repetir viejos escenarios.
La operación planificada por estos filibusteros partidistas es muy sencilla: usted se emocionó con el discurso del comandante, rompe con su vieja militancia, da un paso al frente, sale electo propulsor del partido del futuro, va al Poliedro pasando mas susto que burro en canoa por esas carreteras del país, llega a su región: convicto, confeso y juramentado, realiza los talleres de formación política y de apoyo a las jornadas de inscripción; pero a la hora del té, nadie lo llama, no aparece ni en las lista de espera; pero como todo se sabe, terminas por confirmar que los cogollos de siempre te han puesto un propulsor paralelo.
Esa es su lógica, así trataran de aplicarla para cuando nos toque escoger los delegados; por ese camino, los batallones designarán y ellos decidirán, los delegados escogerán y ellos conspirarán.
Así las cosas, no queda otro camino, sino el que decía el camarada Argimiro: “el camino es largo pero es el camino”. Ellos intentan torcer la voluntad de la mayoría y nosotros la enderezamos, ellos engañan al Presidente y nosotros los denunciamos, y así hasta la victoria o hasta que nos expulsen, de un proyecto que si termina dirigidos por ellos, hasta el propio camarada Chávez seria el primer expulsado.
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