El pueblo opositor se encuentra desconcertado por la voluntad sistémica de sus representantes ante la mesa de dialogo, por la llamada MUD. Ante, la esquela de trabajo, poco se tomó en cuenta el Referendo Revocatorio y, a su vez, no fueron tomados en cuenta otros bloques políticos que hacen vida activa en el país.
Para muchos, existe una suma de violaciones a nuestra Constitución Bolivariana y representantes partidistas permanecen callados, como aprueban cualquier actitud del gobierno ante cualquier asunto de interés. Lo cierto, hay disonancia en el discurso político e ideológico ya establecido. Mientras, la historia se mueve por sí sola.
Se debe luchar por eliminar la desigualdad social y plantear las oportunidades que nos ofrece la unión de las ideas en un solo pensamiento y, romper con los oportunistas que fijan su mirada en Dólar Today y Cúcuta. Dos símbolos malandros que hoy recorren el mundo sureño.
Tenemos que enfrentar al futuro y aplicar una mejor política exterior, con un buen equipo diplomático preparado para tal fin en Escuelas Universitarias de Diplomacia Internacional.
Nadie, entiende a la MUD. No se rige por lo establecido en sus reuniones internas y lo expresado en foros pasa por omisión, lo que constituye un olvido y desprecio a una parte del pueblo.
Las organizaciones de comando político, deben respetar al pueblo y reflejar un solo criterio en el planteamiento de lo reflejado con anterioridad en los consejos comunales y, manifestado luego en la mesa de negociaciones.
No deseo, puntos muertos en el dialogo. Los venezolanos llevamos quince años en lo mismo, mientras el aparato productivo se desencadena en el fracaso por la carencia de semillas autóctonas y poca voluntad en el cumplimiento de los programas de gobierno. No podemos seguir en desaciertos.
De allí, observamos una dejadez imaginativa y los observadores internacionales, no pueden a cada instante ejecutar sus análisis de perspectiva ideológica. Es menester, tratar de lograr una relativa normalidad democrática para cumplir con la nueva realidad política y brindarle al presidente, Nicolás Maduro Moros, una estabilidad que culmine en el año 2018. Mientras, el respaldo del Vaticano y Washington es notoria y prácticamente se encuentra desarticulada la indignación ciudadana en el movimiento opositor, que, busca en cualquier dirección fragmentar la disyuntiva de olvidar la historia o presionar para llegar con un candidato propio al Palacio de Miraflores. La MUD, ha asumido el liderazgo de una estructura partidista que, solo les pertenece a los movimientos que siempre han representado la vieja democracia.
Necesitamos con urgencia un acuerdo de gobernabilidad. La crisis que se vive en el país es de orden financiero y no económica. La banca refleja en sus haberes un carácter cibernético y constituye un espectro económico que validamos hasta los momentos, por el manejo que le dan un grupo de ignorantes del mundo financiero nacional que, no intuyeron que las burbujas del Capitalismo financiero se encuentran globalizadas y dependen de un solo Estado tutor y es los Estados Unidos de Norteamérica, cuyos asesores fundamentales son los mormones y sionistas protestantes.
Venezuela, debe simplificar mucho su planta burocrática, porque éste lado del hemisferio es direccionado por Donald Trump- nuevo presidente de USA- y su labor es globalizar las burbujas capitalistas en un solo orden financiero, para asegurar las empresas de exportación estadounidense, de allí la importancia de los liderazgos que deben ser constantes y evolucionar en el tiempo.
Estados Unidos y el Vaticano, reflejan junto a los protestantes, los mismos intereses. Es muy fácil darse cuenta y no necesitamos ser proféticos para coincidir en los intereses de rescate e intereses de determinados partidos políticos ante los conceptos de libertad y los derechos en Venezuela.
Es de alta preocupación, la situación actual de Venezuela por los intereses religiosos que se concentran en su seno central y el aprovisionamiento de sus riquezas por parte de las transnacionales, sin importarles el hambre y miseria del pueblo.
Solo, el repunte de un líder como Fidel Castro puede arropar las simpatías de los desorientados y deprimidos y en una sola voz, con un espíritu democrático hacer un viraje económico del país, derrotando el mundo financiero local que viene acumulando defensas desde el caso Banco Latino.
Estamos en un nido de corrupción e impotencia por los convenios internos de cooperación entre La MUD y los representantes del gobierno bolivariano que buscan implantar el Liberalismo en el mercado del Sur y acoplarse a las sugerencias que puede dictar Trump desde la Casa Blanca.
Fidel Castro Ruz y el Che, como Chávez Frías tenían una sola razón para ello, muy explicadas en sus teorías económicas y por ello, Cuba pudo soportar el período especial, hombres blindados ideológicamente interpretaron la historia y buscaron en el Sur la defensa de un escudo financiero para soportar el mundo tecnológico y cibernético de hoy.
Los temas tratados en la mesa de diálogo son secundarios, pero en el fondo revela una Venezuela amansada por dos segmentos como puntos de aplique social, los bachaqueros y paramilitares, indicándonos que un Estado Delictivo nos envuelve y busca derrotar el verdadero proceso democrático que exige la República Bolivariana de Venezuela.
Los movimientos migratorios internos y externos deben analizarse y no nacionalizar más transeúntes y revisar los expedientes en el SAIME de aquellos que trafican con el dinero venezolano de frontera a frontera, un problema que viene suscitándose desde que los españoles preñaron a nuestras mujeres en la época colonial y asesinaron a nuestras etnias indígenas y ahora desean agotar su reserva y dejar correr el tiempo para que los diputados por Amazonas se debiliten.
Entramos a una nueva fase política, donde habrá opiniones chambuqueadas de algunos indolentes que dicen ser patriotas.
