Dice Dante Alighieri en "La Divina Comedia" que los traidores están en el noveno círculo del Infierno:
Círculo noveno
El último círculo está rodeado por los gigantes que forman una muralla humana que sobresale hasta la altura del círculo octavo. En él se castiga a los traidores, sumergidos en hielo. Se divide en cuatro zonas, en las que se castiga, respectivamente, a los traidores a su propia familia, a los traidores políticos, a quienes traicionaron a sus amigos y, ya en el mismo centro de la Tierra, donde está Lucifer, se encuentran quienes traicionaron a sus benefactores, entre ellos Judas y los asesinos de César: Bruto y Casio
Y en estos tiempos cuantos traiciones hemos visto, aquí en nuestro país, la traición se ha “profesionalizado” ,el receptor por excelencia es el presidente Chávez, quien ha sido traicionado una y otra vez, y quien probablemente volverá a ser traicionado en el futuro.
Honduras es hoy el mejor escenario para estudiar la traición.
Pero hay ecos lejanos, porque los que se venden no solo están aquí y ahora, un ejemplo:
Un “topo” llamado Gac
La Nación Domingo
El ex miembro de la opositora Coordinadora Nacional Sindical bajo Pinochet, Víctor Hugo Gac, confesó judicialmente que en 1981 se convirtió en agente informante del régimen opresor. Recuperada la democracia, fue agregado laboral en Buenos Aires.
El presidente de la CUT, Arturo Martínez, se le
humedecieron los ojos. Luis Fuentealba, actual vicepresidente del Departamento
Sindical del Partido Socialista, se indignó. La periodista Miriam Verdugo,
esposa del fallecido líder sindical Manuel Bustos, no podía creer lo que se le
relataba. Martínez dijo, "mira, si no me muestras este documento, jamás
habría creído lo que me cuentas". Otros sindicalistas a los que ellos les
comentaron el asunto, tampoco daban crédito a la información.
Pero el documento era a prueba de cualquier duda o desmentido. El ex integrante del comité ejecutivo de la combativa Coordinadora Nacional Sindical (CNS), que presidía Manuel Bustos en tiempos duros del régimen opresor, Víctor Hugo Gac, confesaba judicialmente, bajo su firma, que a partir de 1981 se convirtió en informante de la Central Nacional de Informaciones (CNI).
Si queremos ser más locales solo tenemos que ver y oír (aguantando las nauseas), a Teodoro Petkoff, a Gabriel Puerta, a Raúl Baduel, a Ismael García, solo para mencionar a los más gritones y los más llorones, pero son muchos más, con traiciones recientes, antiguas y continuas (Petkoff),.
Ante lo que sucede en Honduras, como no preguntarse; ¿Cómo reconocer a un traidor?, ¿Cómo evitar la traición?, ¿Cómo evitar una “caza de brujas”?.
Necesitamos un marco referencial sólido, aplicable, defendible y extendible de ética y valores, de comportamientos, que señale los no aceptables y que debemos combatir y erradicar, y los premiables, que debemos emular y promocionar, una “vacuna”, que como ellas no necesariamente elimine la “enfermedad” de la traición (entre humanos es imposible), pero que nos prepare en defensas para controlarla y combatirla.
¿Es posible?, ¿o solo es una Utopía?
nadezca@gmail.com