Leímos con detenimiento el dilatado y prolongado artículo: “Hoy 27 de junio 2020 día de la Periodista y del Periodista Venezolano: ¿Tenemos algo que celebrar?; del Maestro de la televisión venezolana Walter Martínez; a quien no conozco ni de vista, ni de trato, ni de comunicación, lo hago como venezolano y porque considero que a una personalidad pública de su estatura se le ha vulnerado sus derechos, luego de haber prestado sus invalorables servicios a la patria, hoy pretenden lanzarlo por un despeñadero. Este articulo escrito en un lenguaje amplio, ajustado y diáfano narra los ataques y agresiones expresadas en “censuras previas y posteriores”, como lo ha manifestado en su artículo; que dejan mucho que desear si proviene de un organismo como es la televisora del Estado, que fue satanizada y cerrada durante la dictadura de Carmona en el 2002 y que pretenden reeditar unos dictadorzuelos de nueva estirpe. Hoy al parecer por lo que nos cuenta el Maestro Walter Martínez, le han desatado los demonios en su contra, poniendo en práctica una persecución implacable, quien funge como su presidente un tal Freddy Ñañez, que lo conocerán en su casa, contra una personalidad que en el campo de la comunicación ha escrito su nombre con letras de molde. Walter Martínez y no sería mucho que pedir reclama un desagravio, donde explique los motivos que privaron para que fuera su programa Dossier sacado del aire, que por cierto, dentro de este tipo de programa, que llega a todos los rincones del mundo y no solo eso, este tipo de espacio es motivo de estudio y de análisis en muchas universidades. Son décadas que con perseverancia, dedicación y constancia se ha convertido en un patrimonio cultural de esa especialidad en nuestro país. En una oportunidad tuvo diferencias con la Sra. Blanca Eekhout, en ese momento era presidenta del canal ocho, tuvo diferencia, pero luego limaron sus asperezas a instancias el presidente Chávez
Walter Martínez escogió a este país como su patria, a la que ha servido símil al de un apostolado, a la que ha sabido defender y representar en los escenarios internacionales. Como revolucionario cabal, ha defendido este proceso de sueños y esperanzas. Cuantos agazapados, de esos mismos que le están tirando sus peñonazos, están a punto de tirar la toalla y marcar distancia con el proceso revolucionario; menos mal que esta canalla no aplaude, sino zape gato.
Nos narraba Walter Martínez en su dilatado artículo, que en un oportunidad invito al Camarada Freddy Bernal, quien está haciendo una extraordinaria labor venezolanista por allá en el Táchira, en momentos aquellos de los apagones, en un ínterin cuando ya estaba a punto de salir al aire, el presidente del canal se lo suspendió. Martínez termina con esta interrogante: ¿Qué significa eso?
Estos no son momentos para retaliaciones gratuitos y menos contra personalidades que le han dado luz, brillo y muestras de lealtad a nuestro gentilicio en momentos que nuestro país supera uno de sus más brutales y criminales sanciones por parte del imperialismo gringo. Si el gobierno dialogo en Oslo y Republica Dominicana, con esos grupos terroristas de Voluntad Popular y Primero Justicia, y que le han hecho lo indecible por invadirnos y asesinar a Maduro y otras personalidades; que le cuesta hacerlo con Walter Martínez y aclarar lo sucedido.
Independientemente los motivos que ocasionaron este enfrentamiento, no se puede tapar el sol con un dedo, lo que ha aportado a VTV desde el 2013 a la fecha con sus servicios. El peor motivo que ha podido suceder es que haya brincado la talanquera y no lo ha hecho. En estos momentos que afrontamos una crisis existencial, se debería sumar y no restar. No es la hora de división, sino de unión.
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