No hay peor sordo que el que no quiere oír, Ni peor ciego que el que no quiere ver. Así dice el sabio refranero popular al referirse a quien no quiere reconocer sus errores y aceptar de manera coherente las ideas contrarias a su pensamiento.
Observando con detenimiento como se han venido desarrollando las mesas de diálogos CONVOCADAS POR EL GOBIERNO NACIONAL y con el Presidente Maduro como el más interesado y activo en ellos, determino que la MUD NO QUIERE DIALOGO y mucho menos que esa locura terrorista que llaman guarimba se termine.
Si en un primer momento se sentaron a dialogar, fue producto de la presión del ciudadano común que rechazó hasta en un 90% esa conducta miserable que ha costado 42 muertes de venezolanos útiles a la patria.
El otro motivo por el cual aceptan las conversaciones con el gobierno, es por las consecutivas derrotas de sus posturas tanto en la calle como en las ideas. No pudieron lograr que el caos se apoderara de la vida de los venezolanos y no tuvieron otra alternativa que sentarse a conversar. Pero conversar no para llegar a acuerdos o soluciones dentro del marco democrático de nuestra constitución, sino conversar para ganar tiempo y reorientar su locura de la “SALIDA”.
Lo más triste de esta historia es la postura antipatriota de toda la oposición venezolana, digo toda porque en ninguno de ellos ha privado el sentido común de condenar estos hechos, que solo esperan los direccionamientos de los GUSANOS MAYAMEROS o del pentágono, para seguir en sus pretensiones de derrocar al camarada Maduro y acabar con la Revolución Bolivariana.
Luego entonces, como sus posiciones no son sus posiciones realmente, si no de quienes los financian y alientan a la destrucción del país, la MUD no llegará a ningún acuerdo. Su principal propuesta al país es: Maduro vete ya.
No habrá ofrecimiento, ni complacencia que llene sus expectativas. Si por error el gobierno propendiera los medios de ponerle en libertad a su asesino, que tanto claman, al igual que los adictos a una droga buscaran una petición mayor que hacer para que el gobierno no pueda cumplir, y si la llegara a cumplir se destruya el pensamiento de Hugo Chávez y así tratar de acabar con la revolución socialista.
De allí el titulo, cada vez pedirán más. Pedirán que Maduro se quite el Bigote, que se separe de la primera combatiente y cualquier otra locura que se les ocurra. EL OBJETIVO ES NO LLEGAR A NINGUN ACUERDO, NO ACEPTAR QUE EL PUEBLO DE VENEZUELA, EN SU MAYORIA, DECIDIO POR LA REVOLUCION BOLIVARIANA.
Por eso y más, no es tiempo de claudicar ni de bajar la cabeza. Es tiempo de JUSTICIA Y DE PROFUNDIZAR LA REVOLUCION. A Nicolás Maduro lo sostiene y respalda el pueblo de Chavez.
VIVA CHAVEZ, VIVA MADURO, VENEZUELA PARA LOS TRABAJADORES.
