Resulta ahora, que todo el que defiende al Presidente es un jalabolas, lo que me llega a concluir que en Venezuela hay millones de jalabolas, cosa que no es nada extraña, dados los antecedentes de apoyo a la Revolución, al Chavismo en general y más aún y hoy día al ciudadano Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, esto no es un decir y mucho menos una exageración, les voy a explicar porque.
Son varios los voceros que han acertado cuando confirman que al Presidente, le han dado más leña que a los bosques hoy convertidos en desierto, nunca jamás la mediática mundial ha estado acordando casi al unísono ataques desde todos los flancos posibles, lo curioso es que cada campaña desnuda el mismo guión y recibido las mismas ordenes lo que hace que afirmemos que al Presidente Eterno, por supuesto, a quien atacaron vilmente,tuvo espacios de tiempo en calma, entre otras cosas, por las derrotas que produjo su accionar y lo acertado de sus llamados al diálogo nunca respondidos por una oposición embarcada siempre en el proceso desestabilizador.
Al Presidente Maduro, desde el mismo día de su triunfo, ha recibido ataques despiadados y sin tregua alguna, solo a su triunfo, se soltó la jauría opositora con más de diez muertos y centenares de heridos, bueno lo que ha venido luego de este acontecimiento no lo vamos a repetir, todos lo conocen, lo cierto es que desde intentos de magnicidio, muerte de compañeros cercanos, Otaiza, Serra por vía de sicarios y terroristas, desaparición física de connotados emblemas de la Revolución como Carlos Escarrá, General Muller Rojas y otros. Todo atado a una feroz campaña de la burguesía criolla en alianza con factores bien identificados en el exterior, un año 2014, donde se intentó incendiar al país promoviendo la Salida del Presidente.
Ahora desde finales del año 2009 y principios del año 2010, el presidente Eterno, venía denunciando la aparición de la llamada "guerra económica", manifestándose con fuerza a partir del año 2015 hasta nuestros días, es decir no ha habido tregua en ningún momento, acompañada de guerra sicológica, y mediática que ha logrado digamos, paralizar momentáneamente parte del apoyo recibido por el chavismo en los últimos dieciseis años, que aunado a la falta de respuestas políticas adecuadas y en consonancia con la acción defensiva ausente, han logrado horadar la voluntad de muchos venezolanos y venezolanas.
No obstante, todo ello, el Presidente ha demostrado una paciencia inmune a todo ataque y no ha dejado un solo día de gobernar, haciendo lo que ha hecho, construyendo la vivienda un millón, aumentando los salarios, la Misión Venezuela Tricolor, convenios internacionales con países aliados, una Política Exterior digna de estudiarse, enfrentando al gobierno norteamericano y al pentágono que bajo ataques arteros como declarar a Venezuela "Una amenaza inusual y extraordinaria", lo que logró movilizar el pueblo con la recogida de más de diez millones de firmas, en fin todo un andamiaje desestabilizador que no ha logrado a pesar de los bajos precios del petróleo, originados igualmente por el Imperio, impedir la marcha del proceso bolivariano y desde esta tribuna escrita, apostamos a que los tiempos venideros serán de recuperación de los espacios perdidos y el renacimiento de la ideología chavista, humanista y revolucionaria.
Y si por señalar y describir esta situación, lo consideran un jalabolismo, entonces el pueblo venezolano con justificación y causa noble igualmente lo es. Adelante, después y quién será Maduro.