"El modo más fácil de ser engañado

es creerse más listo que los demás

La Rochefoucauld

La oposición se ha venido acostumbrado a querer llegar al poder, a través de las marramuncias y las mentiras, pero cantando por anticipado fraude, que de manera muy notoria y extremadamente peligrosa van creando, porque las veces, que se presentan a un proceso electoral salen con unos candidatos, que en el fondo son unos verdaderos paquetes –hablando en términos del boxeo– y eso viene sucediendo, desde hace rato; porque apenas apareció el comandante Chávez, presentando su candidatura asomó la cara Henrique Salas Römer, el cual se llevó un revolcón dejando totalmente desconcertado a los opositores, como borracho acostumbrado a tirarse en cualquier lugar, cuando pierde el juicio por completo.

Nadie se imaginaba, que la historia se iba a repetir de candidato en candidato sacados de malolientes y mugrientos sacos en depósito. Capriles Radonsky, quien fue gobernador electo por el mismo sistema utilizado en estos momentos, en dos oportunidades salió derrotado al postularse a la presidencia, pero no espero que amaneciera para crear las guarimbas cantando fraude. Pero además un presidente autoproclamado se estrelló ante la muralla de conciencia del pueblo venezolano. Ahora le tocó el turno a un señor pasado de maldad, el cual lo buscaron sin echarle una revisada tanto física, como mental, porque políticamente es casi imposible borrarle su negro pasado, después de haber pertenecido a la CIA, a donde no se llega a tirar besitos, ni a participar en un concurso de modelar de los tantos creados por el país del "sueño americano"

La oposición sigue creyendo en el teléfono, ya que, la mayoría de sus actividades son mediáticas; muchas veces, hasta el acto del amor, aún, cuando el cable para conectarse no se encuentre con la cobertura subliminal del sentimiento que eleva al ser humano a su máxima expresión, como es el amor. No hay un acto político de la derecha venezolana, que no termine en fantasmagóricas concentraciones elevadas a lo máximo por las redes, tan gigantescas, que el menos optimista termina engañado y pensando en el triunfo a la vuelta de la esquina y al explotar la realidad, el cual no se puede ocultar, termina por darle rienda suelta a sus envalentonadas elucubraciones, capaces de incendiar su propia casa, con tal de acusar algún vecino con inclinaciones a favor del presidente Maduro.

Este proceso de este 28, terminó por arrugarle la cara a muchos desesperados, que algo olvidadizos por el impacto mediático del indiscutible cerebro de la oposición, representado en María Corina Machado, quien había centrado su actividad en contra del presidente Maduro, en ofrecer privatizar, hasta la risa de los venezolanos, siempre mirando hacia el norte, termino por explotar en unos resultados, el cual doblega en ventaja del proceso donde salió derrotado Capriles Radonsky, quien en estos momentos se encuentra de bajo perfil, porque sabe lo confiable del sistema de votación, el cual es tan fácil votar, como pelar una mandarria y, los resultados más rápido, que en el propio Estados Unidos.

Ahora, están en la etapa del lloriqueo utilizando un problema, el cual afecta a todos por igual, ya que, se ha convertido en un huracán, el cual atenta contra la salud pública por la cantidad de muertos, como es la proliferación de motos. A donde usted vaya se las consigue, como si estuvieran en exhibición para la venta. De por sí, el sonido de las cornetas de estos vehículos está metiendo miedo en cualquier ciudad, pueblo o caserío por el aviso psicológico para infundir miedo, dando la sensación de ser casi dueños de calles, avenidas, ya que, la corneta casi te paraliza o corres el riesgo de un accidente.

Se pueden imaginar una cantidad incalculable de motocicletas, con conductores eufóricos, movilizados por una orden impartida por los mismos de siempre acostumbrados a ver los toros, desde las barreras y cuando llegan es en potentes motos de alta cilindra marcando la diferencia de clase, el cual significa utilizar a los pobres para sus perversos planes. El propio día del proceso electoral enseñaron de lo que son capaces. En un centro de votación de Acarigua-Araure, llegaron en estos vehículos, como dueños de hacienda metiendo miedo y arremetiendo para después presentarse, como las víctimas y por supuesto se pueden imaginar la tremenda arrechera, cuando el resultado favoreció al presidente Maduro, por algo más de 500 mil votos, para darle el impulso necesario, estimulante y vital al GALLO PINTO, para sacudir las alas, en medio de un canto victorioso, que definitivamente lo va a sembrar en el corazón de todos los venezolanos.

Narciso Torrealba narciso_t_29@hotmail.com