Más allá de las proyecciones de los analistas en el plano financiero, lo que preocupa sobremanera en los diferentes niveles de gobierno es que el futuro no pinta mucho mejor.
La tregua política entre el Gobierno nacional y el Frente de Trabajadores pende de un hilo por irrespetar las contrataciones colectivas, y cualquier roce podría volver a movilizar el delicado frente cambiario. Por ahora, tras el control de cambios lanzado y las devaluaciones ejecutadas, el dólar sube y baja, peo, parece calmo y eso ayudará a bajar la incertidumbre. Aunque nuestro sueldo de profesional con el de una persona que nunca a laborado llega a 1.65 dólares Si esto se mantuviera, y el país retomara cierta estabilidad, los estados provinciales y los municipios podrían reencauzar sus previsiones, en particular, para los presupuestos del año que viene. Una tarea complicada, por los corralitos y el default no declarado que padecemos.
Los principales organismos de ciencia y tecnología del país, están hundidos por la crisis que vive el país. A los ajustes presupuestarios que recibe el sector científico en los últimos años se suma el "efecto dólar", pues la mayoría de los insumos y equipamientos para la investigación son importados
El 85 por ciento del presupuesto de los ministerios se destina hoy al pago de sueldos. Los laboratorios en nuestro país necesitan importantes cambios y, debe ser respetados sus directores, donde ellos puedan fijar su posición. El organismo debe cumplir otro rol, como motor de innovación en el país. No puede limitarse a ofrecer ciencia básica universalmente disponible en artículos científicos. Los recursos, deben ser distribuidos de una manera equitativa junto a los departamentos en áreas del conocimiento.
Necesitamos investigadores que sea direccionados al verdadero sentir del Estado y aprovechar las oportunidades que ofrecen las universidades para formar investigadores. Divididos por tercios: uno para temas abiertos, otro para temas estratégicos y el restante para fortalecimiento institucional.
Venezuela, debe revertir su historia y desarrollar sus actividades con libertad y que debe controlar que los investigadores sociales y científicos publiquen en revistas de prestigio, la oferta del conocimiento siempre estará presente y nos empujaría a la innovación, es cuestión de cultura y de legitimidad en que pueden convivir dichas fundaciones, teniendo presente el abanico político.
Quizás, sea el primer paso para promover cambios en medio de la tormenta.
Resulta obvio advertir que en el futuro se generalizará el uso de drones, cualquiera sea la dimensión o peso de las respectivas cargas, incluso el transporte de personas, hasta lograr trasladar todo sin intervención humana. Por ello, los Estados deberán contribuir a su generalización, aunque en muchos casos seguramente lo hagan asociados a capitales privados de importancia a fin de incorporar sin demora las innovaciones e inventos que mejoren los distintos procesos en todas las áreas de la producción y la medicina genética.
Indudablemente, estamos en plena época de cambio y ello acentúa la influencia de la cuarta revolución industrial que, a su vez, impone resolver múltiples interrogantes, hasta ahora sin respuestas. Lo obvio es que el futuro está llamando insistentemente a las puertas de los despachos públicos y de las empresas, que deben redoblar sus esfuerzos. Uno de los interrogantes más inquietantes es identificar si estas transformaciones que vienen ejecutándose, profundizarán las actuales desigualdades entre los países desarrollados y los que no han podido alcanzar ese nivel en un tiempo razonable.
Resulta obvio que las modificaciones que ya se asoman de manera inevitable y definitiva, iluminen al mundo del futuro y ofrezcan chances para ingresar al mismo. El dilema incluye a nuestro país y parece que nuestros actuales gobernantes no tienen la menor idea de lo que se está jugando puerta afuera. Por lo tanto, las elecciones a la Asamblea Nacional, serán decisivas para conocer con cierto grado de certeza cuál será nuestro futuro, el de nuestros hijos y nietos. Porque la Asamblea Nacional Constituyente puede considerarse como represiva.
Estos procesos incluyen la eliminación de enfoques considerados superados y la promoción del trabajo armonizado incluso a distancia, mediante la recomposición de los equipos de trabajo y una eficaz arquitectura que incluya las más modernas herramientas computacionales, para asegurar que sea en todos los casos una exitosa gestión. Además, se aconseja coordinar las etapas bajo la dirección de un asesoramiento especializado pues de otra manera se corre el riesgo de desaparecer. Los investigadores y científicos son fundamentales para un Estado nacionalista.
El revelador documental "Nada es privado", que Netflix estrenó tiempo atrás, discurre entre los procesos que ponen en evidencia el accionar de la empresa británica Cambridge Analytica, consultora en decenas de elecciones en el mundo. El film advierte cómo el ciudadano común, seducido por los "beneficios" de la conectividad libre, ignorando sus "términos y condiciones", expone sus datos personales a situaciones de alta vulnerabilidad.
Gigantes como Facebook, Google y Cambridge Analytica (CA), líder mundial en comunicaciones basadas en datos, pueden manipular a millones de usuarios "persuasibles" para profundizar las grietas sociales, detonando conductas que van desde alentar el muro en la frontera mexicana hasta desacreditar a Hillary Clinton como "la corrupta mentirosa" desde el Proyecto Alamo en la campaña digital de Trump
El poder de la Inteligencia Artificial detonó la secuencia: personalidad, conducta, voto. La "Social Big Data" llega a cada votante en forma personalizada. Basada en la doctrina del norteamericano Andrew Breitbart, "si quieres hacer cambios profundos en la sociedad, primero hay que dividirla, sólo cuando la divides puedes volver a moldear esos pedazos para darle forma a una sociedad nueva", nos remite a la lógica con la que se instaló la grieta en Argentina. CA alcanzó éxito en muchas otras campañas, además de las presidenciales en EE.UU. y el Brexit inglés. El film y posteriores declaraciones de Alexander Nix (CEO de CA), dan cuenta de una campaña antikirchnerista en Argentina durante 2015. Como dijo Albert Einstein, "dos cosas son infinitas: la estupidez humana y el universo, y no estoy seguro de lo segundo", el documental encierra una grieta más profunda: nuestra postura frente a la Inteligencia Artificial. ¿De qué lado estamos?, ¿es un facilitador del bien común?, ¿es un arma de los poderosos?
De allí, la importancia del Estado en invertir en laboratorios de toda índole.
Algunas cuestiones merecen el debate: ¿Han cambiado la lógica del poder político o la ética de la política a partir de la incorporación de estas tecnologías? No, sólo se ha perfeccionado la herramienta. El voto cantado, el fraude patriótico y el voto en cadena, nada conocían de tecnologías digitales. Claro, antes la torpeza en el fraude era una evidencia ostensible, hoy se perfora la conducta de las personas determinando sus decisiones. Es necesario replantearse el problema para dar luz al verdadero enemigo del bien común, que no son precisamente las nuevas tecnologías sino los mecanismos atávicamente arraigados y diseminados en las sociedades. Como señala el "Manifiesto por una política aceleracionista" actualizada a la era digital de Williams Srnicek, nos aturdimos frente a los resultados de la "Social Big Data", en lugar de apropiarnos y empoderarla hacia el bien común.
Abrimos nuestras puertas a las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en cada pequeño acto cotidiano, sin tomar conciencia de la vulnerabilidad de nuestros datos. No somos usuarios responsables. Estamos siendo colonizados por el capitalismo informático, trabajando aun cuando usamos estas tecnologías con fines de esparcimiento, para que industrias como Facebook, Google y Amazon tomen, con nuestro consentimiento, los datos que compartimos en sus plataformas y con ello capitalicen información, como lo define la experta italiana Tiziana Terranova en el "Encuentro entre el algoritmo y el capital": es necesario que asumamos nuestra responsabilidad.
Somos testigos del mayor cambio tecnológico acontecido en la historia, que exige un marco legal global para la protección de los datos del individuo y del bien común, transitando entre la transparencia y la confidencialidad. El reto no es menor. De cualquier modo, en Venezuela debe acelerarse el tratamiento de la ley de protección de datos. En este escenario, emerge la necesidad de capitalizar el poder político para los movimientos sociales y en particular, en los procesos eleccionarios, esencia de la democracia. Debemos comprender que nuestro enemigo es un gigante, que el éxito del inefable Donald Trump es lo que verdaderamente sorprende. ¿Y si hubiese sido el de Hilary, con Cambridge Analytica, como herramienta altamente eficiente dirigida a la población "persuasible"? Esto, en lo sociopolítico y en la medicina, seria bueno analizar este performance.
Cotidianamente vemos como los medios de comunicación de los poderes concentrados intentan persuadirnos o disuadirnos en su propio beneficio; amigarnos con estas tecnologías disruptivas, apropiándonos críticamente, ofrece una nueva oportunidad de empoderarnos. Negarlas es una trampa que favorece sólo a los poderosos y deja indefensas a las sociedades. Por eso no deja de sorprender como el documental tiene algo de paradojal; su mensaje final no se enfoca en la construcción de un nuevo orden global transparente, sino al éxito de la periodista Carole Cadwalladr, de "The Guardian". Como el "vuelve a empezar" de la Oca, tal vez sin pretenderlo, vuelva a la caza en la grieta social de la Inteligencia Artificial.
Necesitamos avanzar en el campo científico y tecnológico para producir conocimientos.
Esto para evitar que el tsunami de bolívares soberanos se dolarice más, el Gobierno no toma la extrema y muy grave determinación de reprogramar los pagos de las Letras en dólares, yuanes o rublos. Una superemisión que fuera directo al dólar y a los precios. Y la necesidad de que se mantengan depósitos en bolívares y no se dolaricen Estamos ante una bola de nieve que aún no ha sido desactivada, y que sigue amenazando la estabilidad del sistema. Ya han desaparecido los depositantes y los fondos que guardan los bancos apenas alcanza para el otro día.
Todo en medio de una transición política muy compleja y llena de incertidumbres, con visibles dificultades para llegar a lograr acuerdos mínimos en el manejo económico. Complica el pasado, por las enormes inconsistencias monetarias y fiscales acumuladas que complica el presente porque el Gobierno en funciones ya no tiene poder político para recomponer confianza; y complica el futuro, Hay un evidente sobre castigo a los bonos y acciones bursátiles en el exterior, con oportunidades que siempre se abren para los cazadores de oportunidades
Simplemente, tengamos aliento. Es muy difícil calificar de dictadura a un gobierno elegido", dijo Alberto Fernández de Argentina en una entrevista el 25 de agosto en el programa de televisión La cornisa, refiriéndose a Venezuela. Agregó que Venezuela puede haberse convertido en un país "autoritario", pero dijo que "las instituciones están trabajando allá.
El tiempo pasa muy lento, pero con muchos sobresaltos, nos levantamos y antes de decir "buenos días" nos fijamos cómo está el dólar, aunque no tengamos ni uno, porque ya consiguieron que nos hagamos a la idea de que nuestro presente y futuro depende del precio que la moneda norteamericana.
Así, se encuentra la ciencia en mi país. Nicolás Maduro Moros, como nuestro presidente, debe recordar que tenemos dos satélites en el espacio y las fundaciones médicas, deben recibir sus aportes. En todos los sectores del espectro artificial y genético.