Guyana Esequiba. Un nuevo acto de piratería imperial se cocina

Nada debe extrañarnos de la conducta inmoral, réproba, hipócrita y cobarde que se manifiesta en plenos tiempos contemporáneos en curso, por parte del capitalismo en su fase imperial decadente junto a sus aliados europeos, fundamentalmente.  Desechemos las ilusiones, preparémonos para los escenarios más complejos en defensa de nuestra integridad territorial, nuestro legado histórico, nuestra soberanía de Patria Bolivariana.  El mundo actual y su institucionalidad, no dista mucho en términos jurídico legales y visión dominante de lo acontecido con la conquista y consiguiente colonización en los siglos precedentes, que obligaron a nuestras generaciones proceras asumir a sangre y fuego la defensa y lucha por nuestra independencia.  Como se evidencia, esto sigue siendo un proceso continuo, permanente de luchas, que no concluyó con las Batallas de Carabobo, Lago de Maracaibo y la expulsión de los despojos de colonialismo del poder imperial español del castillo de Puerto Cabello.  En los escenarios actuales se hace perentorio, reforzar la conciencia patriota, ante una institucionalidad globalizada dominada por los intereses imperiales: nada bueno debemos esperar de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), como instrumento colonial imperial.  Esta institución, entre otras, se constituyen en estamentos controlados para los desmanes e imposición en contra de nuestra soberana y amada Patria Bolivariana.

Nuestros vecinos la República -dizque-, Cooperativa de Guyana, el CARICOM, siguen dando muestras de ser “republiquetas” aún colonizadas, sometidas a los designios de los poderes imperiales de Estados Unidos de Norteamérica y el Reino Unido a través de la COMMONWEALTH. La relación que han mantenido con nuestro país, es abiertamente hipócrita en función de los beneficios directos que han recibido de nuestro siempre bondadoso país durante mucho tiempo. La oligarquía que gobierna Guyana, es conocedora y ya no lo pueden ocultar de los perjuicios que les ocasiona esa asociación parasitaria que mantienen con la EXXON MOBIL, y otras empresas imperiales. Pues solo reciben migajas de la explotación de hidrocarburos, minerales y otros recursos naturales. Poco o casi nada queda para compartir socialmente con los pueblos guyaneses y esequibanos: eso ya no lo pueden ocultar. Cosa distinta sería establecer las buenas relaciones que deben existir entre vecinos como es el caso de establecer relaciones con la Republica Bolivariana de Venezuela en el marco del respeto y beneficio mutuo de ambas naciones establecidos en el Acuerdo de Ginebra, único instrumento civilizado de poner punto final a esta controversia legada por los mismos imperios Británicos y los Estados Unidos de Norteamérica, en fase decadente actualmente, pero con gran poder de infringir daño a nuestra región. Preparémonos para la descolonización progresiva y definitiva imperial ante un nuevo mundo que se empieza a configurar con nuevas instituciones ALBA, CELAC y BRICS (plus). 

Finalmente, en la coyuntura electoral actual que estamos cumpliendo en nuestra amada Patria Bolivariana, debemos tener claro que la burguesía criolla, dígase también oligarquía mantuana colonial de los “apellidos”, representantes dependientes de los intereses imperiales en nuestro país venezolano, no merecen para nada, el apoyo de nuestro humilde y valiente pueblo bolivariano.  Merecen y serán derrotados nuevamente este 28 de julio una vez más, por su conducta antipatriota y entreguista ante los intereses imperiales. Con nuestro presidente Nicolás Maduro Moros, conductor de victorias como buen hijo de Hugo Chávez, volveremos a derrotar a la antipatria. ¡Venceremos compatriotas!

 

Tucupita, Delta Amacuro

Fachada Atlántica de Venezuela

Jueves 19 de junio de 2024



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Aquiles J. Amares P.

Dr.. Docente universitario

 aquilesjap@gmail.com

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