En nuestro anterior artículo (La Expresión de la Conciencia) habíamos afirmado que la formación de la conciencia en el ser humano es un proceso por demás complejo, y que, en definitiva, está nunca deja de estar sometida a variadas circunstancias que permanentemente la están modelando. Dijimos que en correspondencia con lo afirmado por Carlos Marx: EL SER SOCIAL DETERMINA LA CONCIENCIA SOCIAL.
En las recientes elecciones presidenciales realizadas en Venezuela el 28 de Julio próximo pasado, esta sentencia de Marx, quedó absolutamente confirmada. En lo particular, pude constatar que conciencias por mí consideradas de cierta solidez fueron dolorosamente influenciadas por la brutal campaña mediática desarrollada contra Venezuela, antes, durante y después del evento electoral del 28J. Consideración aparte merecen las posiciones asumidas por los presidentes Lula y Petro de Brasil y Colombia, respectivamente. Las mismas fueron analizadas descarnadamente por el periodista uruguayo, radicado en Argentina, Víctor Hugo Morales (https//www.lanacion.com.ar). Les recomiendo a ese enlace, pero como ése muchos otros hablan de lo que realmente sucedió en Venezuela ese día,
En Venezuela se respira y vive un ambiente de absoluta tranquilidad, a partir del 30 de julio, luego de ser sofocados los intentos de la oposición extremista de violentar el país. Un saldo lamentable de 27 muertos fue el resultado de las acciones emprendidos por los llamados “comanditos” de María Corina Machado (MCM) y Edmundo González Urrutia (EGA) durante los días 29 y 30 de julio. Fracasaron en su intento de cumplir el mandato del imperialismo norteamericano. Y tal como lo afirma el dirigente de oposición Enrique Ochoa Antich: “Maduro gana”. El tiempo juega a favor del presidente reelecto. Y no sólo Ochoa Antich, también el dirigente y opositor, José Brito, que además fue uno de los nueve candidatos de la oposición, en su estilo altisonate, afirma que lo de MCM y EGA, era y sigue siendo un guión insurreccional. No son Chavistas, sino reconocidos dirigentes de la oposición los que acusan a los extremistas opositores del Plan Insurreccional.
Decía un apreciado amigo, apelando al refranero popular; “el que canta bingo, debe enseñar el cartón”. Agregaría yo: “el que no la debe, no la teme”. Nicolas Maduro y quienes lo apoyan mostraron las actas que tenían en su poder. El excandidato que reclama para sí la victoria, no sólo no asistió a la citación que le hiciera la Sala Electoral del TSJ, sino que sus seguidores con absoluto desparpajo dijeron que no tenían ninguna acta que mostrar, ni tampoco ninguna lista de testigos.
Han incurrido los dirigentes visibles de la oposición extremista y sus seguidores en evidente violación de la Constitución Nacional y sus leyes. No se trata que se ha desatado en el país “una persecución”, por parte del Fiscal General de la nación, Tareck William Saab, contra los que protestan, Eso no es así. Se trata de que esas “protestas”, no han sido para nada pacíficas, y, no sólo han causado las muertes señaladas, sino que, además, destruyeron instalaciones de salud, educación y alimentarias publicas.
Dijimos y lo reafirmamos que no debe haber impunidad alguna. Deben ser detenidos, como algunos ya lo han sido, los autores materiales de los hechos violentos. Enjuiciados y encarcelados. Pero esa acción debe también dirigirse contra los autores intelectuales de los mismos. Con descarado cinismo algunos de ellos ya lo han admitido. Deben, pues, éstos ser también detenidos, enjuiciados y encarcelados. No puede seguir siendo que la “cabuya reviente, por lo más delgado”. Todos los involucrados, absolutamente todos, deben pagar por la muerte de humildes personas inocentes y los daños causados a instalaciones públicas de uso y bienestar colectivo.
Para Venezuela se abre, a pesar de lo señalado, un porvenir provisorio a mediano y largo plazo. Ya han comenzado a darse manifestaciones en los últimos meses y años transcurridos más cercanamente. Venezuela tuvo un crecimiento económico de 8% en el primer semestre de 2024, el más alto de América Latina. El mes de junio se tuvo una inflación de 1% la más baja de los últimos 30 años. La hiperinflación y desabastecimiento son hechos del pasado.
Hoy la situación que vivimos no es nada fácil, nadie puede negarlo. Es sabido que el salario mínimo sigue siendo irrisorio. El gobierno nacional ha estado emitiendo unos bonos que ha permitido palear en lo que ha sido posible la situación de los más vulnerables. El pueblo venezolano ha sabido resistir y ha acrisolado su conciencia. Entiende que el origen de la situación no puede ser sólo consecuencia, como algunos piensan, de una mala gestión de gobierno. Algunos, interesadamente o no, señalan un único culpable. Entendemos que se han cometido errores y que muchas cosas han podido hacerse mejor. La corrupción, el burocratismo y la desidia continúan siendo un pesado lastre heredado, que no hemos logrado superar. Pero estar conscientes de todo eso, es el primer y necesario paso para corregir lo que se haya de corregir.
Hemos sido y seguimos siendo un país rentista, que depende fundamentalmente de los ingresos que se generan por concepto de la explotación petrolera. Pero hemos afirmado que sólo la recuperación de PDVSA y el aumento de la producción petrolera, nos permitirá más rápidamente superar el rentismo petrolero. Esto pareciera ser contradictorio, pero la contradicción es lo que ha movido y seguirá moviendo la historia de los pueblos. Naturalmente, el que esa contradicción se resuelva satisfactoriamente, no puede ser obra de la espontaneidad. Ello tiene que obedecer a un plan rigurosamente diseñado. Creemos que ese plan existe y muestra de ello son los modestos, pero sostenidos crecimientos que hemos experimentado en el Producto Interno Bruto (P.I.B.)
También hemos afirmado que nuestra recuperación económica no será posible sin el concurso de la empresa privada. También los empresarios se han visto afectados por el bloqueo y las medidas coercitivas unilaterales. No hay crecimiento económico sino se incrementa el poder adquisitivo de la población y con ello la demanda. Algunos gremios empresariales, como Consecomercio y Conindustria han expresado su satisfacción por el crecimiento experimentado en algunos sectores de la economía. Igualmente han alertado sobre el estancamiento en otros.
Encarar con posibilidades de éxito la situación económica, social y política del país requiere actuar con mucha flexibilidad y pragmatismo. Considero que el presidente Maduro lo ha hecho con mucha habilidad, muy lejos de las posiciones dogmáticas que nunca han sido buenas consejeras.
Somos optimistas realistas. No tengo dudas que vamos a ser exitosos con la conducción de nuestro presidente reelecto para el período 2025-2031, Nicolás Maduro Moros.