No entiendo, para nada, los pasos que se están dando en la reinstauración del hilo constitucional en nuestro hermano país centroamericano de Honduras; no se puede aceptar condiciones en la restauración de la democracia de este hermano país; da la impresión que quien dio el golpe de estado fue el legitimo presidente Manuel Zelaya; en esta negociación, manipulada por el imperio norteamericano, se acepta todo tipo de barbaridades condicionados por los goriletti, ya lo dije camaradas, en anteriores artículos “la independencia de los pueblos no se negocia…” y para mi parecer, esto es lo que está sucediendo en esta mal llamada negociación, es esto lo que se siente; es bueno recordarle al presidente constitucional de Honduras, que este golpe de estado, fue propiciado por las oligarquías latinoamericanas, siendo el gran cerebro de esta barbarie el propio poder norteamericano; y este golpe delata el carácter de lacayos, de pitiyanquis de estos golpistas, dado en contra de un gobierno legitimo y del propio pueblo.
Presidente Zelaya, no puede usted aceptar, la propuesta de siete puntos, presentada por el lacayo más grande del imperio norteamericano, como lo es el presidente de Costa Rica Oscar Arias Sánchez, esta propuesta supuestamente solventara la crisis que produjo el Golpe de Estado en Honduras, en uno de los puntos que conforma esta propuesta, podemos encontrar: La renuncia expresa del mandatario depuesto a instalar una cuarta urna en las elecciones del próximo noviembre, así como a cualquier consulta popular no autorizada por la Constitución. Si usted presidente Zelaya, acepta esta propuesta, esta botando a la basura sus principios; no se entiende, que usted, vaya aceptar la renuncia expresa de lo que propicio el golpe de estado, como fue el agregado de una cuarta urna, para una constituyente. Presidente Zelaya usted, al aceptar esta propuesta, estás traicionando al pueblo hondureño.
Presidente Zelaya, si usted acepta esta “negociación” presidida por el lacayo más arrastrado del imperio norteamericano, que no es otro, que el presidente de Costa Rica Oscar Arias; usted automáticamente esta legitimando este golpe de estado. El objetivo que persigue el imperio norteamericano, con este golpe de estado en Honduras, es el de tratar de debilitar la posible consolidación centroamericana del ALBA, mediante amenazas de golpes de estado en la región; pero, estas amenazas consisten también en registrar el calibre de respuesta que tenga el bloque que conforman el ALBA, Latinoamérica o los pueblos del sur; así mismo, estas amenazas también persiguen aislar a nuestro comandante presidente Hugo Rafael Chávez Frías, para que el apoyo que se le está brindando a países como Honduras se vea débil; el imperio norteamericano tiene miedo, al avance de proyectos colectivos de los pueblos del mundo; y no proyectos mezquinos, ligados siempre a la sobrevivencia del moribundo imperio norteamericano.
Presidente Zelaya, el pueblo hondureño ha dado la verdadera respuesta, a usted, a los goriletti, al imperio norteamericano y al mundo; se ha mantenido en movilización popular por espacio de 21 días; el único propósito que persigue el pueblo hondureño es devolverle a su país, la restauración del hilo constitucional, que no es otra cosa, que la restauración de la democracia; usted presidente Zelaya, al parecer quiere seguir jugando el jueguito de la derecha hondureña de ir a negociar; ¿Negociar qué? Por sus actos presidente Zelaya, pareciera que quien dio el golpe en Honduras fue usted. Mientras el pueblo arriesga sus vidas por obtener de una vez por toda su anhelada independencia, usted presidente Zelaya, negocia con los lacayos del imperio norteamericano la independencia de su pueblo que se encuentra en pie de lucha en Honduras. Presidente Zelaya, usted también le sigue el jueguito a los grandes medios de la derecha, que intentan ocultar el repudio del pueblo hondureño al golpe dado en Honduras, que no fue sólo militar, sino congresal, judicial y electoral, esta negociación mediática trata de legitimar a los golpistas, y así lavar su imagen frente al mundo; y usted al aceptar esta “negociación” automáticamente se convierte en cómplice de estos golpistas; es por esto que el imperio norteamericano patrocina un desenlace “legal” porque sabe que el orden constituido en Honduras es débil; y apuesta por la impunidad y la injerencia.
Presidente Manuel Zelaya, en vez de estar negociando principios y traicionando a su pueblo, le hubiese quedado mil veces mejor, regresar a propia cuenta, y como sea a su país, e incorporarse hombro a hombro a la lucha, que mantiene su pueblo en contra de la dictadura impuesta por el imperio norteamericano, a través de los goriletti.
Patria Socialismo o Muerte Venceremos.
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