Los alcances reivindicativos logrados por los trabajadores de la Empresa SIDOR TERNIUM, más que sólo hacer justicia con estos aguerridos venezolanos, ha confirmado y alertado el profundo compromiso de la revolución bolivariana con los principios que le han dado su origen y su relevancia en el tiempo.
Nada más oportuno y conveniente en estos tiempos de revolución que el tomar conciencia de que el rumbo que nos hemos dispuesto a tomar forzosamente nos deparará todo tipo de sacrificios y pruebas que, debemos afrontar con mística y voluntad revolucionaria.
Uno de los principales retos para lograr consolidar nuestra nueva forma de interpretar al hombre frente al Estado y su sociedad, deberá partir de que podamos comportarnos fieles a nuestras propias verdades. Sólo a través de ir abandonando los viejos y supuestos inquebrantables paradigmas del pasado podremos consolidar nuestro proyecto en el tiempo y en el corazón de nuestro pueblo.
En este nuevo aniversario del DÍA DEL TRABAJADOR el caso SIDOR TERNIUM, al igual que las otras luchas reivindicativas que esperan emular sus importantes logros (sobre todo el emprendido por los trabajadores de Coca Cola), se ha tornado de extrema importancia y estímulo para quienes consideran que el capitalismo debe ser combatido precisamente a partir de la eliminación definitiva de la explotación del hombre por el hombre.
Todo lo relacionado con SIDOR TERNIUM debe servir para analizar y vislumbrar la respectiva actuación y carácter revolucionario de los funcionarios de gobierno. La sustitución y previa actuación del ex Ministro del Trabajo en este caso diagnóstica la heterogeneidad ideológica de algunos altos personeros del gobierno.
Hoy más que nunca debemos estar conscientes que aun cuando en materia reivindicativa hemos dado importantes avances, irresponsable sería dejar de alertar que en otros sentidos hemos realmente bajado la guardia. Es evidente que en la actualidad algunos personajes con los mismos propósitos explotadores del otrora, mediante el cooperativismo han encontrado permisibles formas para continuar abusando del trabajador.
El inmediato e ineludible camino que ha de transitar el trabajador venezolano es el de la organización. El fortalecimiento de sus luchas y reivindicaciones sólo serán realizables mediante una fuerza orgánicamente sindical y progresista, orientadas como soporte y aporte fundamental para la construcción del socialismo bolivariano de los nuevos tiempos.
Editorial del Semanario de Opinión Política A Toda Costa
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