Uno se imagina que todos los ministros de Chávez son como él, sin sangre de horchata. Y más tratándose de la recién nombrada ministra Aloha Núñez del Poder Popular para los Pueblos Indígenas, ante el hecho detestable de un enfrentamiento armado, donde dos mujeres de su misma raza son heridas en una lucha desigual con ganaderos apoyados por el ejército. Parafraseando a Bolívar habría que gritar con un coño por delante ¡ 520 años de resistencia indígena no bastan!
Aloha es mujer e indígena igual a las dos que resultaron heridas y en sus declaraciones recogidas por AVN no hay ni un soplo de
dolor, de sentimiento, de condena y de hacer justicia con los
responsables de la agresión. Hay una neutralidad y una imparcialidad
inaceptable en su aséptico pronunciamiento como si no fuera su deber
ético y político ponerse de parte del más débil jurídico, del humilde,
del indefenso, del ancestralmente perseguido. Además de mujeres
indígenas, una de ellas fue abaleada por la espalda cuando la apuntaron
cobardemente a los pulmones.
Estas fueron las muy frías declaraciones de la Ministra Aloha Núñez según AVN:
Comisión
de diálogo en Sierra de Perijá
La ministra de Pueblos Indígenas informó
que una comisión interministerial está en la Sierra de Perijá para
presenciar el diálogo entre la comunidad indígena yukpa y los ganaderos
de la zona. "Vamos a estar evaluando los proyectos socioproductivos que
ya se están desarrollando en la Sierra de Perijá. A los pueblos yukpa se
le entregaron títulos de tierra y se está trabajando con ellos",
explicó Núñez. Informó que todo el proceso de diálogo entre la comunidad
indígena y los ganaderos se dio tras un enfrentamiento en el cual
resultaron heridas dos mujeres indígenas, que ya fueron atendidas, y la
situación se solventó a través del diálogo. "Se llegó a un acuerdo de no
agresión y de compromiso para concretar los compromisos asumidos con
cada
sector", puntualizó.
No basta con lo dicho por la
ministra, ella está obligada a dar detalles que satisfagan a una
sociedad nacional cada vez con más formación política y sensibilidad
social, gracias al Presidente Chávez. No es suficiente decir que la
situación se solventó a través del diálogo y a un acuerdo de no
agresión. Hay que hacer una investigación que permita sancionar a los
responsables de la agresión a las mujeres indígenas. Eso es cruel e intolerable.
Que
me perdone la señora ministra, a quien le deseo sinceramente suerte en
su gestión, pero hay que ponerle más corazón, identidad y compromiso con
sus hermanos indígenas.
*Profesor Jubilado de la UPEL