En lo que va de este año he oído varias veces y en diferentes radios aquella ¿popular? canción que nos sembraron en el imaginario en los años 80: "Ron pa’to el mundo"
En esa misma época mi amigo Gerardo León, cada vez que compartíamos, me decía su consigna: "Camarada entre la caña, la sana diversión y la revolución, no hay contradicción", hoy sigo compartiéndola 100%.
Despejado cualquier atisbo de mojigatería, una cosa es la consigna y otra es que los medios en Venezuela no colaboren con el esfuerzo que el Gobierno hace para erradicar la violencia.
Durante la IV República, las corporaciones del licor y el cigarrillo siempre tuvieron guardianes en los medios y en el Gobierno; y las agencias de publicidad trabajaban al máximo -conjugando imágenes, música, sexo y juventud con sus productos- para seducir a niñas, niños y jóvenes.
El presidente Luis Herrera Campins prohibió la publicidad de licores y cigarrillos por radio y televisión y los dueños de los medios lo "borraron", lo hicieron invisible y cómo olvidar la campaña golpista (2001-2002) en las vallas de un famoso güisqui escocés.
El presidente Hugo Chávez, después de reflexionar sobre la recuperación de los precios del petróleo, decía: "...nosotros no podemos estar gastando las reservas internacionales para importar güisqui", y se preguntaba: "¿Qué revolución es esta? ¿La revolución del güisqui?" (Anexo video)
Me ha sorprendido saber que se les han dado casi 14 millones de dólares al güisqui y otros licores a ¡Bs. 11!, (fuente: CENCOEX adjudicación No 20-2014) cuando lo vienen vendiendo –el whisky- a dólar de guerra (80 Bs. paralelo) desde el año 2013. ¿premio a la usura?
¡Aquí sí hay una profunda y peligrosa contradicción!
LO QUE DIJO Chávez SOBRE LA REVOLUCIÓN DEL WHISKY Y LOS DÓLARES