Cuando digo que “El Covit 19 es amoral”, me refiero a que es un virus antiético, se revela contra la naturaleza social humana, no sabe de moral puesto que es un organismo molecular no pensante, no racional desde el punto de vista humano, no tiene racionalidad humana pero en sí mismo responde a su propia biología estructural molecular y de funcionamiento como organismo molecular, de allí que pretenda sobrevivir mutando, habitando los cuerpos humanos en más de 160 países hasta donde se tiene conocimiento sirviéndose del aire como de los humanos como vehículo de transportación y propagación hasta llegar a nuestra Casa Común en el Planeta Tierra donde halla su espacio vital, crear su colonia para apoderarse u nutrirse de las sustancias vitales del organismo viviente humano.
Es amoral el virus Covid 19, sobrevivir a éste al parecer por ahora no hay mejor remedio que el preventivo, “el aislamiento social voluntario” de las personas, de las familias humanas de cada país en sus propios hogares, sean casas, apartamentos en urbe o en la rural, el virus no conoce fronteras geográficas, ni clase social, ni sistema o modelos económicos, como tampoco creencias humanas alguna, si eres cristiano o no, musulmán, judío, ateo, etc., por igual ataca sin discriminación social alguna, sin diferenciar sexo, edad, procedencia, posición económica, social, política, status y en general es agresivo, basta enfocarse en el cuerpo humano para colonizarlo, conquistar su espacio, dominarlo hasta sustraer todos sus elementos vitales y fortalecerse hasta aniquilar sus víctimas.
El Convid 19 es una tragedia humana, un “azote de la naturaleza” para convertirse en una tragedia de la humanidad, sus efectos letales ya se conocen, sus síntomas, sus alertas, ya es un virus inconfundible, responsables de miles de muertos, ya ha cobrado su factura y es diaria en todos los países donde las vidas conviven con los muertos, miles de cadáveres son llevados a la tierra, incinerados y pulverizados, sin embargo el continua con su contagio incesante, algo tiene que decirnos este organismo viviente de la naturaleza, es un mensaje insistente, un mensaje que desoímos, es un mensaje excepcional, millones de personas del mundo comienzan a prestarle atención a sus señales provenientes no de un extraterrestre, sino de un organismos terrestre de la naturaleza.
Muchas personas en su vida cotidiana, en su modo de vida capitalista, consumista e irracional ni pendiente de la condición social humana, hasta que un virus, el Covid 19 las ha sacado de su perplejidad, de su ensimismamiento individualista, de su distracción consumista, de su egoísmo agresivo, de su espacio de competencia entre unos con otros, del aprovechamiento del otro, del robo del otro, de la explotación del otro, las ha sacado del desamor, de la soledad, del aislamiento social en que se hallan en una sociedad cuyos valores han sembrado, una sociedad fragmentada, desunida, aislada de unos con otros, incapaces de redescubrirse, de solidaridad, fraternidad, amor, corresponsabilidad social. Ahora; han visto la gran necesidad del Otro, de reconocer al Otro, diría que antes la amenaza real de la muerte, el desamparo, la incertidumbre, se han dado cuenta de la fragilidad y vulnerabilidad humana, de un sentimiento que no han dejado crecer, el amor.
En Europa muchos se asoman por las ventanas, por el balcón de los edificios, cantan, aplauden, agitan las manos con adioses, hacen cacerolazo, se ejercitan dentro de sus hábitats, juegan con los niños, niñas, escuchan clases por TV, otros pegados a sus celulares, leyendo y enviando mensajes, pendientes del big data, del carnet de la Patria en Venezuela, cuando llegará “el bono del Convid 19”, los vecindarios solitarios en los tres turno del día, un silencio total, todos y todas asombrados, incrédulos de un “enemigo invisible”, hay quienes lo desprecian no quieren usar el tapaboca, mientras una oposición sirviéndose del Big Data por internet difunde videos sobre “la dictadura de Maduro”, sin ver como en la aldea de América Latina, en especial Colombia, Chile, Bolivia, Brasil entre otros se sirven de la ocasión en bandeja de plata para por un lado justificar sus Estados de excepción y segundo, diezmar a la población, aniquilar las poblaciones locales, que el virus se encargue de ellas, no la represión, no el Estado, sino su propio enemigo, el Covit 19, los fascistas han descubierto un arma mortal contra la existencia humana, contra los electores, contra las protestas, contra la democracia, Piñeira. Bolsonaro, Duque, Moreno y Trump entre otros.
Covid 19 los ha arrinconado a todos y todas, los tienen presos y presas, “voluntariamente o compulsivamente”, por acción de los gobiernos, sin embargo muchos han desoído el mensaje, prefieren como Trump los negocios, la economía antes que defender la vida humana, optan por no paralizar la producción, no hacer un alto, desacelerar el crecimiento económico, continuar la marcha como si no pasara nada, hasta que de repente, hasta reyes como Carlos de España, ministros del Brasil de Bolsonaro, la primera ministra de Alemania, Merkel entre otros se han dado cuenta que Covit no juega, que es en serio, está dispuesto a arrasar con todo lo humano con todo lo divino, con toda la civilización y la cultura. Pero se trata de algo nuevo, nada igual a los virus anteriores, es inusual, pero por irónico que parezca los gobiernos de Bolsonaro y Piñeira de Brasil y Chile se niegan a suspender las actividades económicas, asumir “la cuarentena social”, no les importa las vidas humanas, la riqueza ante todo, la plusvalía tiene dueño, despreciando las recomendaciones de los organismo mundial de la salud, OMS, en cambio, el Covid 19 no tiene patrón ni dueño, es un bestia que depreda todo lo humano.
Por eso hay mucha “tristeza, rabia, impotencia e incertidumbre”, muchos prefieren no oír las noticias tétricas, las cifras de mortandad humana de todos los países, de los expedientes diario de las muertes, es como si me ocultara para no ver, no oír y callar la conmoción humana que estamos viviendo, le asusta la realidad, algo inusual está ocurriendo, ha sacudido nuestras vidas, ha estremecido al capitalismo engreído de todopoderoso, quien rivaliza y juega a ser Dios en la Tierra, ahora se enfrenta a sus propios misiles microbiológicos del Covid 19, es algo nuevo, extraño y desconocido, no hay por ahora, una vacuna cien por ciento eficaz, solo el interferón cubano aplicado a tiempo, promete aliviar y hasta salvar vidas.
Estamos frente a una “amenaza extraordinaria e inusual” como diría Obama, no en relación a Venezuela, sino respecto del Covit 19, bajo una situación de crisis humanitaria en el Mundo, Europa se desentiende de países como Italia, Alemania prohíbe vender fármacos a otros países, Estados Unidos continua con las sanciones y bloqueos a Irán y Venezuela, Italia pidiéndole un S.O.S. a la comunidad europea que la negado, Guterres el secretario de la ONU pidiendo que cese la guerra, la instalación de misiles Patriot de EE.UU en Irak contra la voluntad nacional de este país, pareciera que los líderes de países capitalista desarrollados desoyen el mensaje excepcional del Covid 19.
Mientras tanto los pueblos no se explican cómo sus gobiernos desoyeron la amenaza del Covid 19, inclusos muchos pueblos haciendo caso omiso de las señales de propagación del virus seguían llevando una vida normal, cotidiana como si nada pasara, en Argentina, Colombia, Brasil, Ecuador, República Dominicana, Costa Rica, Uruguay Paraguay, entre otros, hasta que la muerte tocó sus puertas, la amenaza se hizo real adoptando estos países medidas excepcionales, aplicando la Ley Marcial, toque de queda, muchos acostumbrados a su vida alegre, desoyeron, otros siguieron llevando la vida cotidiana, a muchos multaron en estos países, incluso les hicieron presos y presas, en Argentina y Colombia.
El mensaje extraordinario del virus Covid 19 persiste, no hemos aprendido nada por ahora, ni se imagina el mundo del posible “colapso económico y financiero y sus consecuencias”, por ejemplo señala Earle Herrera se exagerar, “Los océanos sin barcos, los aires sin aviones, las autopistas sin carros, las calles sin transeúntes, (…) trenes sin viajeros, los parques sin parejas, (…), las aulas sin chiquillos, los recreos sin bullicio, las iglesias sin fieles, las playas sin bañistas. Los caminos sin caminantes”. No es exageración, a esta lista podemos agregar mayores cargas como en Venezuela, sin gasolina, con limitado flujo de agua, con cortes eléctricos, hiperinflación, especulación, manipulación del dólar, escasez, guerra económica, sanciones económica, bloqueos comerciales y financiero, confiscación de activos en el exterior, etc. El transporte colapsa, la economía colapsa, el capitalismo cruje bajo sus cimientos.
El estilo de vida se desmorona, está en crisis el modo de vida del capitalismo, sus valores, el individualismo, el egoísmo, la competencia, la explotación del hombre y la mujer, el nivel de vida todo está en crisis, Herrera sigue diciendo: “ “el patrón con su fiebre descubriendo el sudor, el obrero sin martillo, el campesino sin hoz, la plusvalía sin dueño, los estadios vacíos, el teatro sin público, el planeta asustado, el abrazo al vacío, el pánico en un beso, la mano que te esquiva la mano que le tiendes, la rosa sin destino”. Todo por Microbio, un ser insignificante, un ser invisible, un ser despreciable por su tamaño, su apariencia, un ser que ha sido desapercibido, no tomado en cuenta, esas reacciones humanas a la que estamos acostumbrados con nuestro prejuicios, de pretender arrogarnos el derecho de ser superiores, de estar por encima de los demás, sin importar la condición viviente.
El capitalismo comienza a ver sus propias “costuras inhumanas” ante la amenaza real del Covid 19, antes se aislaba del mundo africano, impedía que los emigrantes de la Madre África y del Medio Oriente llegase a sus costas huyendo de las guerras creadas por ellos mismos en sus continente, pagaban miles y millones de euros a Turquía para aislar miles de seres humanos en “campamentos inhumanos”, ahora ellos mismos, los arrogantes gobiernos de Europa, están aislado del mundo, entre ellos mismos, de Italia, de España, Alemania, ni se nombran, están calladitos, el Covid 19 ha hecho que se resguarden que guarden silencio frente a un microbio que parece una bomba atómica con su poder de fuego contra toda criatura humana si excepción real o divina.
Ni que se hable de “crisis humanitaria”, A los Estados Unidos ni a Europa les importó el bloqueo a Cuba, Corea del Norte, Irán, Nicaragua, Rusia, Venezuela….nada de eso, no les importó la crisis humanitaria, apelaban a la hipocresía del palo y la zanahoria, te bloqueo comercial y financieramente, no te quito las sanciones económicas pero si doblegas, te sometes, te reconquisto, te invado y terminan de empoderarse de las fuentes de materias primas, de los commodities, nada de esto importa, la soberanía, la voluntad popular, el mundo a los pies del mercado, de sus corporaciones transnacionales, del imperio de los Estados Unidos y su sistema capitalista mundial. En Venezuela hicieron una campaña falso positiva de solidaridad con Venezuela, por una pretendida crisis humanitaria, artistas, políticos del Grupo de Lima incluso una minoría del pueblo colombiano, acudieron al concierto musical, dizque apoyar a Venezuela, contra la “dictadura”, ahora ellos mismos, están en crisis humanitaria, le llegó su hora.
No veo campaña de artistas, deportistas y empresarios profesionales millonarios, hacer una campaña de solidaridad ante la crisis humanitaria mundial, solidaridad con los pueblos del mundo, agarrados a su fortuna como si ella le protegiera del virus trasfronterizo, hasta el punto que una científica española, alegara por las redes que “mientras a un futbolista le dan 1 millón de euros por mes, aun biocientífico le dan 1.800 euros por mes. Ahora busquen un tratamiento para este virus, entonces busquen a un Cristiano Ronaldo….lo mismo aplica para los beisbolistas, los tenistas, y todos aquellos que se lucran del deporte, del arte, incluso los empresarios farmacéuticos que se lucran de la ciencia y la tecnología para comercializar fármacos costosos al pueblo, es la ciencia al servicio de la grotesca acumulación de ganancia sin importar las vidas humanas que necesiten curar la salud.
Pero les ha tocado también a ellos, el pequeño e insignificante microbio no reconoce muros, ni siquiera el mismísimo “Muro de Trump”, Los Estados Unidos no están protegido del virus, hace gala de ello Californio, New York, tampoco el Muro de Israel hace falta, entonces “El señor –indica Herrera—del imperio con el mismo temor del hombre tras sus muros, la reina en cuarentena, el rey con tapabocas, el patrón con su fiebre descubriendo el sudor…la plusvalía sin dueño”. Esta la misma realidad que compartimos todos, no es una realidad virtual, no es fantasía, ni siquiera aquella que la ideología capitalista neoliberal que nos hace creer a muchos. No hay muros para el Covid 19, no hay poder humano que lo venza por ahora, es como dice Herrera “Prometeo sin el fuego”, no hay poderoso que con su riquezas en dólares o euros pueda protegerse, ni que lo venza, no hay imperio, ejercito, ni siquiera la OTAN y su parafernalia militar puede derrotarlo, ni las armas atómicas, es un organismo molecular “ultra atómico”.
Fuentes:
1.-Herrera, Earle (2020) “Microbio”, Correo del Orinoco, 14 -03-2020.