La Universidad de Los Andes le ha propuesto al gobierno nacional un plan de reforestación para que Venezuela cumpla con el objetivo central del Acuerdo de París: emisiones netas cero de CO2 por consumo de combustibles fósiles para el año 2060.
La propuesta comprende la reforestación de 400.000 hectáreas en 20 años, a una tasa de 20.000 hectáreas por año, para mitigar 180 millones de toneladas de CO2 para el 2060.
La ULA propone además el uso prioritario de mezclas de árboles nativos para optimizar la estabilidad ecológica en la reconstrucción de bosques no comerciales; bajas tasas de crecimiento, período promedio de maduración de 40 años para alcanzar un diámetro promedio de 45 cm y una altura promedio de 24 metros. Propone contabilizar sólo la biomasa aérea y establecer un 50% más árboles por hectárea de los necesarios como factores de seguridad.
Propone además que las plantaciones de mezclas de árboles nativos se establezcan prioritariamente en cuencas hidrográficas degradadas, con el objetivo adicional de proteger las fuentes de agua de generaciones futuras y mitigar los crecientes efectos nocivos de sequias e inundaciones, previstos como consecuencia del calentamiento global.
Para garantizar la mitigación proyectada de emisiones, el proyecto incluye un monitoreo permanente y una doble contabilidad. Cada cinco (5) años se realiza un inventario del CO2 mitigado hasta entonces por la biomasa aérea, y en cada caso el proyecto se somete a una auditoría independiente y a una certificación internacional para verificar los resultados obtenidos.
A través de la fotosíntesis, los árboles absorben CO2 de la atmósfera, retienen el carbono para la formación de tejidos y emiten el oxígeno. Por cada tonelada de carbono retenido se mitigan 3,67 toneladas de CO2 y se emiten 2,7 toneladas de oxígeno.
El costo de reforestar, mantener, proteger, administrar y monitorear cada hectárea plantada en este proyecto es de 8.000 dólares en 40 años, utilizando mezclas de especies nativas. El costo de mitigación se reduce a US$ 18 por tonelada de CO2 a precios actuales.
El precio de los permisos de emisiones en la Unión Europea ronda en la actualidad los US$ 90 por tonelada de CO2. En su más reciente informe sobre el comercio de bonos de carbono, el Banco Mundial afirma que para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y evitar que el aumento de temperatura supere los 2°C para finales de siglo, se debe establecer un precio a las emisiones de CO2 que debe oscilar alrededor de los US$ 100 por tonelada de CO2 para el 2030 a más tardar. Mientras que la Agencia Internacional de Energía estima que el precio debe promediar los $100 para el 2030 y $200 por tonelada de CO2 para el 2050 (IEA 2023).
El proyecto de reforestación presentado al gobierno nacional por la Universidad de Los Andes tiene una duración de 40 años y un costo de 4.000 millones de dólares corrientes. Destaca que se puede desarrollar sin costo para el país debido a la disponibilidad de fondos no reembolsables precisamente para este tipo de iniciativas en el fondo para el clima del Acuerdo de París y en el fondo verde de Banco Mundial.
El Acuerdo de París, suscrito en el seno de la Organización de Naciones Unidas en diciembre 2015, tiene por objetivo principal evitar que el aumento de la temperatura superficial promedio supere los 2°C para finales del siglo 21 con respecto al promedio de la época pre-industrial, haciendo lo posible por limitarlo a 1,5°C.
En la cumbre de jefes de estado y de gobierno celebrada en Glasgow en noviembre 2021 (COP26) se acordó:
Limitar el aumento de temperatura a 1,5°C, lo que implica una reducción de las emisiones netas de gases de efecto invernadero a cero para mediados de siglo.
Cumplir el compromiso de los países industrializados de aportar cien mil millones de dólares anuales (US$ 100.000 millones/año) durante el período 2021-2030 para asistir a los países en desarrollo en el cumplimiento de sus correspondientes objetivos nacionales.
Cumplir con el Compromiso de Bonn de reforestar 350 millones de hectáreas para la mitigación de emisiones de CO2 durante el período 2021-2030.
Es por estos motivos que la ULA le propone al gobierno nacional que el proyecto sea presentado ante el Acuerdo de París como un proyecto de carácter nacional, para cumplir con el compromiso de Venezuela ante esa instancia de alcanzar emisiones netas cero para mediados de siglo, y además cumplir con el Compromiso de Bonn para la mitigación de emisiones de CO2 a través de la reforestación.
Diferentes sitios albergan cantidades diferentes de biomasa. Los bosques de Venezuela promedian unas 300 toneladas por hectárea. Hay sitios en las selvas densas de la Orinoquia con niveles de biomasa de 600 toneladas por hectárea. En otros lugares puede bajar a menos de 200 toneladas.
El proyecto de la ULA estima la mitigación promedio de 440 toneladas de CO2 por hectárea, equivalente al desarrollo de 240 toneladas de biomasa aérea por hectárea. Contabiliza sólo la biomasa aérea, la que se encuentra por encima del suelo. La biomasa de las raíces se mantiene como factor adicional de seguridad. Normalmente promedia el 20% de la biomasa viva de árboles adultos.
El uso prioritario de mezclas de especies nativas de las zonas a reforestar radica en su mayor resiliencia ecológica en comparación con la fragilidad de los monocultivos de especies exóticas. Las especies nativas se encuentran mejor adaptadas pues son sus condiciones naturales. La mezcla de especies arbóreas es también un mecanismo natural de sobrevivencia en regiones tropicales. Es una característica natural de los bosques nativos.
Nuestros árboles autóctonos presentan una gran variedad genética, una de sus fortalezas ecológicas. Venezuela es uno de los países más ricos en especies de árboles del mundo. Mientras en Europa se cuentan por decenas, aquí se miden por miles.
Venezuela es uno de los ocho países de mayor riqueza en biodiversidad del mundo, con una base genética de incomparable valor medicinal, químico, industrial y estratégico, tanto para el país como para el resto del mundo. Aquí se encuentra el 15% de las especies de aves del planeta; más especies de mamíferos de los que se encuentran en toda África al sur del desierto del Sahara; más especies de plantas de las que se encuentran en Estados Unidos y Canadá juntos; más especies de árboles y peces que en toda Europa. Venezuela es el 5° país con mayor número de especies de árboles del mundo, más de 5.000.
El uso de especies exóticas no queda excluido. Una variedad de especies exóticas puede contribuir al alcance de los objetivos trazados: Eucaliptos, Acacias, Melina, pinos de diferentes tipos. En mezclas bajo el dominio estadístico de especies nativas.
En Venezuela se han destruido 12 millones de hectáreas de bosques naturales en los últimos 40 años (Figura 11). Esas tierras son en su mayoría tierras públicas, propiedad de la Nación. https://bit.ly/3J59Uf6
La destrucción de bosques en Venezuela continúa. La tasa promedio de los últimos 10 años (2010-2020) es de 127.000 hectáreas por año (FAO- FRA 2021). De mantenerse esta tendencia, La reforestación de 400.000 hectáreas en 20 años, compensaría apenas 3 años de destrucción. Conviene una política nacional complementaria para detener la deforestación para el 2030 a más tardar, tal y como lo establece la Declaración de Bosques de la COP26.
Según las estadísticas oficiales, se han identificado más de 14 millones de hectáreas aptas para la reforestación en Venezuela. Este proyecto contempla la reforestación de menos de tres por ciento (3%) de esa superficie.
La propuesta de la ULA se resume en este enlace