El miércoles 17 de Junio del 2015, aproximadamente a las 8:20 de la noche, nos encontrábamos en un Farmatodo de la región del País, por cosas del destino llegó el camión que surte la tienda y inician la descarga al depósito de la tienda. Veníamos de otro red de la misma cadena de tiendas de comprar pasta dental, y como no tenia jabón para lavar la ropa nos pasaron el dato y llegamos a la odisea. En realidad que debo felicitar a nuestras mujeres venezolanas que tienen una mega paciencia, de pana que sí! Todas unas triunfadoras. Ya adentro del establecimiento nos conseguimos varios clientes, pero noto con mucha malicia que la cola se mueve muy poco, pasaban unos y otros no, le pregunte a una señora el motivo, ella me dice que por la llegada del camión posiblemente bajen los productos regulados, ya que a ella -me sigue contando la doñita- yo pague, y cuando salgo de la caja señor ya habían sacado los productos regulados. Al yo escuchar muy atentamente a la señora, le comento a la persona que me acompañaba que mejor era esperar y así compramos hoy y salimos de eso una buena vez; total que nos quedamos. La gente entraba y entraba, hacia la cola y nadie pasaba a las cajas a pagar porque estábamos esperando el jabón y algún otro producto que el pueblo que allí se encontraba necesitare.
A partir de ese momento, se le pregunta a una chica, empleada de Farmatodo, de nombre Jennifer (no sé si es su nombre real ya que tenía el carnet de una manera que el nombre no se le podía ver) que si iban a sacar los productos ya que los que estábamos en allí somos personas que trabajan y nos da chance de resolver es en la noche, pues la joven de una manera muy altanera no dijo que “ellos no iban a sacar los productos regulados hoy que esos productos eran para mañana (jueves 19 de Junio 2015)”. Los clientes todos un poco furiosos, empezamos a exigir nuestro derecho, que nos hicieran el favor de vendernos, la mayoría necesitaba jabón para lavar la ropa, jabón de baño, shampoo entre otras cosas. La joven insiste de nuevo y nos dice “señores miren la hora, en bajar la mercancía tarda aproximadamente dos horas, después de allí viene el otro grupo y solo quedará una sola persona en caja y será imposible atenderlos”. Nuevamente nos arrechamos, y insistimos en la venta, a unos escasos minutos aparece en la escena otro trabajador de Farmatodo, que presumiblemente estaba recibiendo la guardia, este señor nos vio a todos los que estábamos en la cola la cara de bolsas.
Cuando llega a su área de trabajo, nos dice a todos los siguiente “Señores les informo, solo se está descargando medicinas no hay nada de productos regulados” allí nos molestamos todos y observamos la burla interna que mantenían los mismos trabajadores en contra de nosotros los clientes, y esto lo digo porque la primera joven nos dice que si hay producto pero por la hora no la iban a vender y este último no se puso de acuerdo con su compañera y como para lucirse nos lanza ese balde de agua fría pero bien chimba. Luego de que este empleado dijera ese comentario los ánimos se caldearon, los gritos, la impotencia, la indignación se apodero del local de ver de cómo unas personas se burlan de ti en tu propia cara, hubo una empleada de ese Farmatodo de pelo color rubio amarillo “¿bueno señores que quieren ustedes que nosotros hagamos?” “nosotros no somos gobierno” por Dios, ahora digo yo ¿Qué coño tiene que ver Maduro con Farmatodo? Ojo, si hay fallas ARRECHISIMAS QUE EL GOBIERNO TIENE ALTA RESPONSABILIDAD pero Farmatodo es una cadena de tiendas nacional y privada, la responsabilidad recaería en la gerencia y la presidencia de dicha red que debe poner orden aguas abajo.
Pero lo más colosal de todo estimados amigos y amigas, después de haber vivido todas esas humillaciones, jalarles bolas a estos eruditos de la manipulación para que nos vendieran una BOLSA DE JABÓN ARIEL DE 2,7 kg entre otras cosas. Llamaron a la Policía del Estado, lea bien; la Policía que es pueblo como lo soy yo y usted que esta en este momento leyendo mi artículo, llegaron a custodiar el local de la red de farmacia FARMATODO porque el pueblo que estaba allí pidiendo le fueran despachado los productos que tiene bajo regulación el gobierno, PRESUMIBLENTE ERAMOS DELINCUENTES ¡coño no joda! Que indignación me dio esa vaina carajo, y de paso llegaron de una manera atorrantes como que si ellos no sufren lo mismo que sufrimos nosotros los de a pie. Yo me dirigí a unos de los funcionarios y le dije “Hermano todos los que estamos aquí somos trabajadores, venimos de nuestra jornada laboral, no andamos en cosas raras como nos vas a decir tú que es parte de la mala suerte que hoy no nos vendan los productos, eso es una falta de respeto” mi pareja, como toda una gran mujer guerrera indignada de haber visto y vivido todo la odisea, se molesto y hablo duro, reclamo y todas las personas apoyaron la acción de que nos vendieran, fue tanta la presión que salió un gerente o doctor de guardia y nos pidió el favor de ir hasta los depósitos (a los cuales nunca entramos porque no nos dejaron pasar) solo nos dijeron que llegó Jabón en polvo, y mantequilla.
Total que logramos que nos vendieran los productos, custodiados por más de 10 funcionarios policiales de la brigada motorizada y nosotros “FELICES” nos sentíamos seguros en FARMATODO. ¿Hasta cuándo nos van seguir humillando? ¿Dónde están los funcionarios a tiempo completos? ¿Acaso solo nos hacemos llamar somos como Chávez y soy como Chávez de la boca pa fuera? ¿O todo se queda en puro discurso? ¡Caramba! yo quiero para concluir hacerle una llamado de atención a la gerencia general o nacional de FARMATODO, no pueden unos empleados prestarse también al estrés colectivo y zozobra que día a día vivimos los venezolanos por la situación económica del país. Que metan en cintura a sus trabajadores y trabajadoras, que no sean tan despectivos y burlistas con nosotros los clientes que día a día hacemos vida para adquirir los productos que requerimos para cubrir nuestras necesidades. Y el otro llamado es para los funcionarios de mi gobierno revolucionario, camaradas inspectores directos e inspectores populares, ustedes están en el sagrado deber de cumplir sus funciones a carta cabal, a tiempo completo, no puede ser posible que algunos camaradas que tienen estos cargos también patean al pueblo y lo humillan, yo los he visto, o nos ponemos serios en las responsabilidades adquiridas o de lo contrario toditos están siendo HIPOCRITAS CON EL LEGADO DEL COMANDANTE CHÁVEZ que tanto hablamos y decimos pero en la práctica pareciera que se va como bruma en el mar.
Nota: Es la segunda vez que ocurre esta situación en la red FARMATODO que yo he presenciado.