La revolución bolivariana ha mostrado de forma sostenida una política de protección del ingreso integral de las y los trabajadores y en especial del salario base y el ticket de alimentación.
Recientemente el Presidente Nicolás Maduro, ha decretado un nuevo aumento salarial para seguir esa política de defensa del salario y ganar terreno a la especulación atroz que lo devora.
Ya salieron propios y extraños a descalificar esa medida con el falso argumento, de que genera más inflación; en lugar de admitir que es la grosera usura y la especulación de empresarios y comerciantes la que atenta contra el salario.
El cuento de que el aumento salarial genera inflación ya no lo cree nadie y debemos desmontarlo. Nuestro gobierno junto al pueblo organizado debe arreciar la lucha contra el acaparamiento, la usura y la especulación que son los elementos que atentan contra el poder adquisitivo de las y los venezolanos.
Olvidan comerciantes y empresarios que ya ajustaron todos los precios de los productos de la cesta básica y que no hay razón para generar impacto en ellos. Amén de las siderales ganancias acumuladas por vía del acaparamiento y la especulación.
Los sabios analistas saltan a compararnos con otras economías y sobre todo manipulando indicadores macroeconómicos, olvidando las distancias que hay entre esas economías y la venezolana.
Todos saben que este semestre se encamina a mostrar signos de recuperación. Todos; incluso la MUD sabe que, los más conspicuos opinadores internacionales ven una recuperación de la economía venezolana y por ello apelan a la demagogia electorera para descalificar una justa medida en favor del pueblo trabajador.
Lo que no dice la MUD y sus aliados de Fedecamaras, Consecomercio y Venancham, es que estas cámaras patronales NUNCA en 17 años han decretado aumentos por su propia cuenta, pues ellos cuando ajustan sus estructuras de costo, lo último que toman en cuenta hasta olvidan es el justo incremento salarial, lo que nunca olvidan es su grosera ganancia.
La revolución bolivariana seguirá el rumbo de la recuperación económica y en esta fase someterá a quienes por vía de la especulación induce a la inflación como mecanismo de destrucción del salario, para después salir a culpar al gobierno.
Este pueblo ya sabe quien destruye su salario y quien es el que lo defiende.