Confieso que duré horas de la noche leyendo el cuerpo A. Me recordaba de eso que decía el camarada Trotsky, de que saber leer un periódico es un arte y de arte no conozco absolutamente nada. Por eso leía y volvía a releer para enterarme bien de su contenido. Que es un periódico que tiene una linea editorial y de contenido general adverso al gobierno del camarada Chávez y al socialismo, no existe duda alguna. Y entre las obligaciones o deberes de los camaradas, está el de leer, con la mayor atención posible, las ideas que se publican en contra del pensamiento y la acción del proyecto o programa que pregone el socialismo a favor del pueblo. De lo contrario, resulta dificilísimo combatir, en el campo de la batalla de las ideas, los argumentos que utilizan los adversarios para criticar, cuestionar o deformar al proceso revolucionario en busca de audiencia que les crea y se aferren a lo que los camaradas consideren son mentiras de sus enemigos.
Sobre la edición de “6to Poder”, por ejemplo, que corresponde del 25 de septiembre al 2 de octubre del presente año hay dos cosas, entre otras, dignas de destacar por el elevado nivel de mentiras que encierran. La primera se refiere a una encuesta para valorar la gestión antidroga de Tareck El Aissami como Ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores. ¡Extraña!, ¡super extraña!, encuesta, por lo demás terriblemente inclinada hacia le negación por la simple manifestación de la negación. Cierto es que ninguna encuesta en este mundo, ni siquiera siendo Dios el personaje a valorarse, tendría como resultado un 100% de aceptación pero tampoco de negación. De los 23 consultados, todos calificaron de horrorosamente negativa la gestión del camarada El Aissami. Pareciera como si la consulta hubiese sido realizada en una reunión de un grupo político furiosamente arraigado a ser enemigo del gobierno por una sinrazón que jamás podría ser enderazada para que llegue a ser razón. Que no se hayan ocupado, los encuestadores de “6to Poder” de verificar esa desproporción tan abultada de 23 en contra y cero a favor de Tareck, demuestra indiferencia por la búsqueda de la verdad. Si gente del gobierno publicara una encuesta, valorando a los precandidatos del MUD y diera como resultado 100% negativo de los consultados, la opiión pública creería que fue realizada sólo en la bancada parlamentaria del PSUV en la Asamblea Nacional. Ese error, pueden estar seguros los venezolanos y las venezolanas, no lo cometerían los del gobierno porque es demasiado infantil y malintencionado. Pero eso es lo menos importante, lo que más llama la atención a un lector de “6to Poder” es la enorme facultad o capacidad de mentir, con descaro y con cinismo, del colonel (coronel) Roland Lavoie, vocero de la OTAN para la invasión a Libia. Incluso, se podría escribir un catálogo completo para desmentir las grotescas mentiras del criminal de lesa humanidad Roland Lavoie, pero nos vamos a limitar a las más escandalosas y que demuestran, de manera irrefutable, el carácter mediático de la mentira para justificar la ejecución del terrorismo de la OTAN y el cometimiento de genocidios bajo la bandera de la impunidad establecida por los Estados imperialistas alegando sacrificio por la paz y la democracia para Libia.
Por supuesto, es necesario aclararlo, que no es responsabilidad de “6to Poder” las mentiras dichas por el colonel Roland Lavoie. Este sí está consciente de ellas y ojalá también lo estén los directivos de “6to Poder”.
Vamos, pues, por las mentiras y debemos combatirlas con verdades. Lo primero que debemos decir es que el colonel Roland Lavoie, militarmente, no tiene ni un solo mérito para que mañana nos vengan con el cuento de premiarlo con el titulo de “Mariscal de campo” alegándose su papel en el derrocamiento de Gaddafi. El se encuentra en Nápoles (Italia), sede de la operación militar que invadió a Libia para que los rebeldes pudieran derrocar a Gaddafi. Está garantizado que ni siquiera su traje militar será afectado por una partícula de arena. ¡Qué papaya dirigir, desde lejos, una guerra por el aire contra una nación indefensa sin correr ningún peligro de combate cuerpo a cuerpo! Bueno, seguro, dirán que para eso está la alta tecnología militar y la verdad es que de ésta depende la táctica.
Mentira I.- El colonel Lavoie dice que no han intensificado las operaciones y que solo sobrevuelan la región costera como una forma de repeler las amenazas que pudiera haber sobre la población civil. ¡Embustero el carajo! Gracias a Dossier, el programa televisivo que conduce Walter Martínez, y TELESUR no se requiere una vista perfecta o de águila para conocer la verdad. La única amenaza en Libia son, precisamente, las operaciones militares del OTAN que bombardean indiscriminadamente para poder garantizar, sin reacciones de los partidarios de Gaddafi, el avance y ocupación de ciudades por parte de los rebeldes y los mercenarios de la OTAN que actúan disfrazados de libios.
Mentira II.- El colonel Lavoie dice que los militares de la OTAN fueron puestos en Libia por países con valores de paz y democracia, los cuales ordenaron detener un baño de sanngre. ¡Embustero el carajo! Decir que Estados Unidos, Francia e Inglaterra son Estados con vocación de paz y democracia es como decir que el Diablo es un gobernante respetuoso de los derechos humanos de las almas que mantiene eternamente en las pailas de agua hirviendo o en los pozos de azufre o amoníaco. ¿Por qué esos Estados no dejan que las demás sociedades resuelvan sus contradicciones por sus propios medios y voluntades? ¿Por qué no respetan el derecho a la autodeterminación de los pueblos? Y si en verdad son Estados con profundos valores de paz y democracia: ¿por qué en la ONU ellos tres más los de China y Rusia son los únicos que tienen derecho a veto? ¿Es eso democracía cuando casi doscientos Estados carecen de ese derecho? ¡Bellísima democracia política imperialista!
Mentira III.- El colonel Lavoie dice que nunca han atacado un objetivo sin tener la certeza de que se trata de un blanco militar. ¡Embustero el carajo! Luego, en la misma entrevista, reconoce que en una oportunidad bombardearon una casa de familia, lo cual cataloga como un error técnico y no un crimen de lesa humanidad.
Mentira IV.- El colonel Lavoie dice que en todo conflicto la primera víctima es la verdad. Tiene razón en ese sentido, pero no reconoce que es la OTAN quien convierte a la verdad como su primera víctima. De todas formas es ¡embustero el carajo! Dice que la intervención de la OTAN fue la respuesta al llamado de la ONU para proteger a los libios. ¡Muy embustero el carajo! Basta con saber que muchos de los Estados coformantes en la ONU no estuvieron de acuerdo con la intervención militar de la OTAN e incluso Estados imperialistas como el alemán se opuso a ello mientras que los Estados de China y Rusia, luego, protestaron porque lo que está haciendo la OTAN en Libia no fue lo acordado en la ONU. ¿No es una vulgar mentira del colonel Lavoie meter a todos los Estados que conforman la ONU en un mismo saco?
Mentira V.- El colonel Lavoie dice que no tienen ningún contacto directo con las fuerzas que se oponen a Gaddafi. ¡Embustero el carajo! Todo el mundo sabe que no sólo tienen contacto verbal sino, especialmente, le han entregado armamentos, facilitan mercenarios para las operaciones terrestres, les informan dónde atacar, qué lugares deben ser ocupados y destruídos, a quiénes deben eliminar de los capturados para que no queden vivos, bombardean zonas habitacionales consideradas de apoyo a Gaddafi. Mejor dicho: intervienen directamente en el conflicto armado entre libios. ¿Cómo se justifica que son los bombardeos de la OTAN los que han producido la mayor cantidad de muertes de personas?
Mentira VI.- El colonel Lavoie dice que la manera en que la comunidad internacional desea resolver el conflicto en Libia no es mediante un llamado al combate sino un llamado a la paz. ¡Una verdad con una escolta imperialista de mentiras! Si la comunidad internacional hace el llamado a la paz: ¿qué justifica la guerra que le ha hecho la OTAN a Libia? ¿Acaso esa infinidad de operaciones de bombardeos a regiones libias no motivan respuestas violentas de los que quieren que se les respete su derecho a la autodeterminación? ¿Qué haría el colonel Lavoie si un Estado invade su país de oriegn con el cuento de que su misión es de paz y democracia?
Mentira VII.- El colonel Lavoie dice que en Libia la OTAN no está haciendo guerra sino protegiendo a la población civil. Descubran los lectores una mentira más cínica que esa. ¡Muy embustero el carajo! ¿Cómo es eso de que no es una guerra si a diario realizan decenas de bombardeos que lanzan bombas que matan gente y destruyen infraestructura? ¿Cómo es eso que protegen a la población civil si arman a los rebeldes y bombardean primero para que luego aquellos penetren en las zonas arrasadas casi sin resistencia de los partidarios de Gaddafi? Si bombardear un país y tener una fuerza que ocupa lugares a plomo limpio matando gente no es una guerra: ¿Entonces, Santo Dios, qué es la guerra y qué es la paz?
Mentira VIII.- El colonel Lavoie dice que la atención de la OTAN en Libia está claramente enfocada para salvar vidas. ¡Demasiado embustero el carajo! La mayoría de los muertos han sido fruto de los bombardeos conscientes de la OTAN aunque Lavoie no lo reconozca. Imaginémonos si tuvieran la orden de matar indiscriminadamente, la cantidad de muertos pasaría el millón de personas. ¿Acaso a los imperialistas les tiembla el pulso para lanzar bombas de un gran poder destructivo cuando ven que la resistencia a su intervención se hace cada día más fuerte? No olvidemos que el Estado estadounidense lanzó dos bombas atómicas en ciudades japonesas cuando el imperialismo japonés estaba completamente vencido y rendido.
Mentira IX.- El colonel Lavoie dice que él ha observado que en Trípoli o en Beni Walid se ha reflejado una voluntad de resolver las diferencias mediante la discusión y la negociación. ¡Super embustero el carajo! Si se acusa al gobierno de Gaddafi de cometer masacres, genocidios y crímenes de lesa humanidad, los rebeldes han hecho lo mismo o peor, porque tienen el aval de la OTAN con sus criminales bombardeos bajo el cuento de que están protegiendo a la población civil. Pero, además, si existe la voluntad de discusión y de negociación para resolver las diferencias entre los libios: ¿por qué la OTAN continúa bombardeando, entregándole armas a los rebeldes y haciendo participar mercenarios en el conflicto libio?
Mentira X.- El colonel Lavoie dice que hay una voluntad real de los libios a evitar un baño de sangre. ¡Dan arrechera los embustes del carajo! Creemos que en Libia los partidarios de Gaddafi como sus adversarios son libios y no franceses, estadounidenses, ingleses u otánicos. Entonces, se supone, que la intervención militar de la OTAN es la que ha buscado o es la verdadera culpable del baño de sangre, porque es quien estimula la violencia, la salida por la vía de las armas y no del diálogo. Mucho se contradice el carajo con sus embustes.
Mentira XI.- El colonel Lavoie dice que el paradero de Gaddafi no es para la OTAN algo que les ayude a cumplir su misión. ¡Descarado el embuste del carajo! Si eso fuese así ¿cómo justifican que ante cualquier dato del paradero de Gaddafi, inmediatamente bombardean el lugar? Ese cuento que la OTAN no iba por Gaddafi es uno de los embustes más cínicos de la historia de las guerras y naciones. Si alguien ha querido, con alevosia y premeditación, asesinar a Gaddafi ha sido el imperialismo en tiempo pasado cuando se le acusaba de ser protrector de terrorismo y ahora cuando es acusado de un dictador detestable y criminal, luego de haberle chupado un porcentaje importante de la riqueza libia.
Verdad única.- El colonel Lavoie se siente muy orgulloso de participar, por supuesto desde lejos o desde Nápoles, en la operación “Protector Unificado”. Lavoie, como guardián de los intereses del imperialismo, tiene que sentirse orgulloso de sus tropelías, de sus crímenes de lesa humanidad en Libia. ¡Unica verdad dicha por el carajo embustero! ¿Pero cuál es la mentira mayúscula del colonel Lavoie? Muy sencilla dicha por su propia boca: “No hay acuerdo político, ideológico o petrolero en nuestras operaciones”. Que alguien exponga con verdades irrefutables ¿cuál guerra hecha por los imperialistas carece de acuerdos cuando la causa principal de su participación es el interés económico pero para ello requieren, además, de un compromiso –fundamentalmete- político con sus aliados o epígonos para acometer su intervencionismo militar en los asuntos internos de otras naciones? El colonel Lavoie es de los que siguen creyendo que todo el tiempo se puede engañar a todo u pueblo. ¡Super embustero el carajo de ojos azules o verdes!