Seguimos usando la constitución para sostener la puerta de la impunidad, ayer el líder indígena yukpa Sabino Romero, cacique de la comunidad de Chaktapa, ha sido imputado por la Fiscalía como un bandolero, criminal y abigeo. La Vice-Presidencia de la República, el Ministerio de Interior y Justicia, el Ministerio de Obras Públicas, Ambiente y de Pueblos Indígenas, han aplaudido y apoyado a los hacendados que ha logrado su cometido, de librarse de quien era una piedra en el zapato, muchas posiciones han sido establecidas la ultima del rector de la Universidad del Zulia, diciendo la ciencia está al lado del “progreso”. Llegaron al final de su plan exitosamente: Sabino Romero está preso y el profesor Lusbi Portillo, profesor de LUZ, defensor de la Sierra y su biocosmo y miembro de la ecologista Sociedad Homo et Natura, aliada de las comunidades, está siendo solicitado por los cuerpos policiales cual delincuente común, igual o peor a los tiempos de la colonia, porque en aquella oscura época de terror para nuestros pueblos originarios, no existía el nivel de conciencia humana, ciudadana y socialista que tenemos hoy, esto simplemente nos sumerge en las profundidades neocoloniales del latinfudismo, la opresión e inclusive la esclavitud a la que esos mismos hacendados que cual “amos” de las tierras productivas del Zulia, obligan a trabajar en condiciones infrahumanas a indígenas y campesinos desplazados indocumentados colombianos en sus propiedades, quienes en la peor de sus suertes terminan en fosas comunes, sin dolor y sin dolientes.
¿Qué se oculta detrás de todas estas manipulaciones, abusos y atropellos?, indiscutiblemente que tres cosas importan, el carbón, las tierras productivas agropecuarias y las riquezas minerales de la sierra. La suerte de la comunidad Chaktapa, estaba escrita hace tiempo cuando todo esto comenzó, la idea fue clara, “quiten a los Romero del medio, ya estorban”, así hace mas de un año, asesinaron vilmente a patadas y golpes al padre del cacique Sabino Romero, José Manuel Romero de 109 años de edad. En julio pasado, el padre de Sabino Romero murió a consecuencia de los golpes causados por el ganadero terrófago Alejandro Chávez Vargas, presunto dueño de la hacienda Kusare. Las investigaciones al respecto de este asesinato no han arrojado todavía resultados, mientras las agresiones continúan. Las comunidades yukpa de la zona también han sido víctimas de agresiones por parte de la Guardia Nacional, por lo que no confían en su presencia como órgano de protección.
Celebramos el Día de la Resistencia Indígena y a la semana los reprimen como animales, aun hoy no se le ha dicho la verdad al Presidente Chávez, aun no le han dicho que los títulos entregados son sobre tierras que no están en conflicto, que la dichosa comisión no ha hecho nada, que no se ha expropiado al primer ganadero de la región, que aun así las comunidades que recibieron títulos aceptaron convivir con hacendados, ganaderos y concesionarias mineras que explotan la sierra a diestra y siniestra, sin control y se han convertido el los garimpeiros del occidente, que bajo ese mismo esquema, sacan hoy en día el uranio de Perú escondido en lingotes de cobre, que les entregaron tierras inservibles para cultivar, ¿Qué sacan de la sierra?.
Hablamos de emancipación y somos invasores, emancipamos nuestra conveniencia, somos unos simples opresores capitalistas al servicio del imperio, desde esta aquí hacemos un llamado urgente al Presidente Constitucional, Bolivariano y Socialista de la Republica, Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, no para que investigue, aquí no hay nada que investigar, la necesidad es de DESTITUIR a la Comisión de Demarcación, a todos lo entes y funcionarios involucrados, a la Ministra Dilcia Maldonado dentro de su compromiso de defender sus derechos que muestre un acto de arrepentimiento y dignidad hacia sus hermanos indígenas y renuncie al cargo y el llamado a la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, en la integridad profesional, neutral y humana que la ha caracterizado a investigar los procedimientos bajo los cuales actuaron la Fiscalía del Zulia y los cuerpos policiales en la detención arbitraria y en los procedimientos viciados a todas luces que conllevaron a la imputación del Cacique Sabino Romero Izarra y del Profesor Sociólogo y ecologista, defensor de la Sierra Lusbi Portillo.