Es difícil por la dinámica de los acontecimientos entender en un momento dado los elementos que juegan un papel importante en un proceso tan complejo como el nuestro. Muchos hoy se preguntan ¿Qué pasó? ¿Por qué una diferencia tan pequeña? ¿Cómo si hace pocos meses ganamos con una ventaja considerable y las manifestaciones eran multitudinarias? Todas estas interrogantes son validas ante un sector de la población que apoya bajo la racionalidad a la revolución bolivariana.
En primer término está el modelo democrático liberal representativo que todavía ejerce su influencia como opuesto al modelo de democracia participativa, pues entendiendo la democracia como mecanismo de mercado, en una sociedad en la que impera el régimen de producción capitalista con unos valores impuestos a la sociedad, en donde somos caracterizados como simples consumidores en un sistema pluralista y de equilibrio en donde las formas elitistas todavía predominan. Es por esto que creo que este punto es importante para el análisis de los resultados del 14-A, ya que nos encontramos en una contradicción entre los dos modelos de democracia como lo plantea Macpherson, al describir la democracia participativa como “modelo futurible”, pues para poder lograr una mayor conciencia y participación es necesario que los electores dejemos de vernos como simples consumidores y avanzar hacia la eliminación de las desigualdades. Lo que puedo observar es que nos hemos esforzado en crear más participación sin un cambio de la desigualdad y la conciencia.
El segundo punto que considero importante al evaluar los resultados electorales, es el factor que interfiere entre las demandas sociales y el gobierno, me refiero a la percepción que las personas o los actores pudieran tener en cuanto a los valores que esperan recibir y los que pueden adquirir. En el marco de la teoría de T.R. Gurr sobre la “Privación Relativa”.
La característica de la sociedad actual, es otro factor que considero intervino en la apatía y migración de votos de una tendencia a otra, la sociedad venezolana como en la mayoría de las sociedades occidentales se están dando fenómenos característicos de una sociedad en constantes cambios producto del proceso de transformación del modelo capitalista, vivimos en una sociedad en la que los valores que predominan son, el individualismo, el miedo, la falta de identidad y cultura por los efectos de la globalización y el culto al consumo. Bauman en su estudio sobre la “Modernidad Liquida y la Fragilidad humana” describe como un tiempo sin certezas en la que se da una precariedad de las relaciones humanas, pues los valores que predominan son el individualismo y el endiosamiento de lo material.
La debilidad que aun tenemos en materia de fortalecimiento de la conciencia o ideología, factor éste que es transversal a los anteriores, pues todavía la derecha juega y utiliza nuestros símbolos para manipular, ejemplo, en la campaña, la derecha se monto en una estrategia de “golpear nuestro marco cognitivo” en base a la diferencia de Maduro con Chávez. No deberíamos concebir que a estas alturas en donde hemos experimentado 18 elecciones en catorce años se estén dando los casos y/o realidades como por ejemplo; Si no hay luz o no consigo harina voto contra Chávez, debemos comenzar a repensar sobre los mecanismos de elección de la democracia liberal de mercado para llevar adelante la construcción de nuestro socialismo.
Por último debemos reflexionar sobre el enemigo real al que nos enfrentamos, que no es otro que al capitalismo y sus formas de dominación que en muchos casos se ocultan tras una maraña de conceptos y la falta de claridad en cuanto al carácter de lucha clase de nuestro proceso.
ablancosequera@gmail.com
