Esa debe ser la idea central de defensa de los resultados de las elecciones del 28, a raíz de los ataques inclementes que sufre Venezuela por aquellos que no aceptan que los trabajadores, son una opción de gobierno. 

En esta defensa debe insistirse igualmente un esfuerzo por explicar en todos países posibles las características de nuestro sistema electoral que se diferencia radicalmente de todo los existentes en cualquier país del orbe. En primer lugar porque es automatizado lo que reduce, como siempre sueñan los técnicos neoliberales, la intervención humana en el manejo de los resultados. 

Esto ha sido resumido en pocos pasos como son: entrega de la cedula y huellas dactilares, desbloqueo de la máquina de votación, pulsar el rostro de su candidato y presionar la tecla votar y se emite un comprobante. El votante deposita el comprobante en la urna electoral, recupera su identificación, firma y sale del recinto. Más fácil ni pelá mandarina. Tiempo 1 minuto o 2 minutos. 

Al final del proceso la maquina emite un acta con el registro de todos los votos y se hace auditoria al 55 % de los centros electorales. 

Donde puede haber fraude en este proceso? En ninguna etapa. No es posible. Por ello la oposición terrorista y oligárquica dejo de gritar fraude para pedir las actas, que según ella misma dice las tiene. ¿Y por qué no las muestra? Porque ella quiere es hacer trampa. Ella quiere es invalidar el proceso y al CNE y declarar ella junto con Elon Musk el Presidente de Venezuela.

Si el CNE mostrara las actas verdaderas gritarán: ¡Son falsas! ¡Son falsas! Para de esa manera continuar con la violencia, porque ellos no respetan la institucionalidad venezolana, ¡los chavistas son unos tierrúo con los pantalones sucios¡ Quien si es honesta y todos mis amigos soy yo! ¡Vivan los gobiernos de derecha¡

Debemos por lo tanto difundir permanentemente el conocimiento sobre el sistema electoral venezolano. Que no es posible hacer fraude. Que es un sistema blindado y que la re elección de Nicolás Maduro se hizo de acuerdo a nuestra legislación y respetando todas las instancias institucionales del país. 

La derecha no quiere reconocer nada de lo dicho antes porque su interés es destruir el estado venezolano y apropiarse de nuestras riquezas para beneficio de los supermillonarios extremos gringos, como Musk que además es la persona más rica del mundo y cuyas empresas son mas ricas que todos los países de America Latina juntos. 

Hay también un conjunto de gobiernos latinoamericanos que le hacen coro a la exclamación de unos resultados transparentes y que además, que sean supervisados por los gobiernos extranjeros, con lo que están dándole aliento a la derecha terrorista venezolana que ya ha incendiados instituciones, hospitales, alcaldías, almacenes de alimentos, etc. y asesinado a funcionarios públicos como son los militares y herido a humildes vecinos.  Estos gobiernos, también de derecha aunque se llamen Petro o Lula, no ven nada de esto, no están pidiendo nada noble sino todo lo contrario, exigen intervenir en las elecciones venezolanas. No podemos respetarlos ni creerles. 

Debemos defender nuestro sistema electoral que ha funcionado perfectamente durante tantas elecciones ya que sobre el descansa nuestro desarrollo institucional y del estado ya que la derecha nacional e internacional nunca va a reconocer sus beneficios ni aun ganando elecciones, ya que su único interés en este sentido es destruirlo junto con todo lo que construya el chavismo y el gobierno popular de Nicolás Maduro.

Por ultimo hay que señalar que al pueblo le gusta un gobierno activo, unido, que esté presente en todas las situaciones, por lo que es necesario mayor presencia de las autoridades de todos los tipos en las vías públicas, en las instituciones, que la población los vea, ordenando, apaciguando aun en estos momentos cuando se ha recuperado la calma. Los funcionarios o amigos del alto gobierno que no quieren una acción más decidida de las autoridades, sea quien sea, debe ser llamado al botón para que siga imperando la paz.