Acogiéndome en todo momento y ocasión a la máxima bíblica: "El que tenga ojos que vea, y el que tenga oídos que oiga"
Para empezar, estoy segura, y bien segura de
que los Compatriotas Fernando Soto Rojas y Vladimir Acosta firmes en el
principio revolucionario de la disciplina a la que obedecen desde el
primer momento que aceptaron la postulación a formar parte del PSUV, no
emitirán juicios ante el no favorecimiento de sus candidaturas en la
elección de marras. Pero ello, no es óbice para que cercenemos nuestra
iniciativa de hacer observaciones ante los resultados de la misma, pues
gozamos en nuestro Proceso y gozaremos por siempre de libertad para
soñar y para vivir.
Los que en esta historia, Nuestra Historia, comprendemos la urgente necesidad de la formación de cuadros, definidos
por el Ché Guevara como los dirigentes de alta estatura capaces de
intervenir de manera esclarecida en el desarrollo político de las masas
desde su puesto de dirección, en este caso desde los puestos que habrían de ocupar dentro del PSUV, nos preocupa en debido grado las virtudes demostradas y sostenidas en el tiempo por las personas, y
especialmente aquellas que se montan en este Proyecto de Justicia Social.
Vladimir Acosta y Fernando Soto Rojas
son considerados, por muchos venezolanos y venezolanas,
camaradas expertos en marxismo, pensadores, analistas con pericia
política, capaces de hablar con propiedad, sin ambages sobre Socialismo
y mil asuntos más, reconocedores sin circunloquios del liderazgo indiscutible de Hugo Chávez, y de su trascendencia a otras latitudes;
sin detrimento o menoscabo de sus enormes capacidades para analizar
tesis político-sociales, entuertos políticos, y mejor aún plantear
soluciones viables e inteligentes.
Tanto
Acosta como Soto Rojas son recursos humanos revolucionarios competentes
y urgentes, que deben estar muy pero muy cerca del Presidente
Chávez, hombro a hombro, para seguir en la tarea difícil de esclarecer
el mundo y despertar consciencias que intuyan las dificultades
actuales del planeta y de las dificultades que están por venir,
prontamente, debido a la escasez de petróleo que sobrevendrá, a la no
aparición de fuentes alternativas de energía, y si aparecieren, ¿cuál
es la probabilidad de que todos los pueblos puedan acceder a ellas?, y
a la dificultad que tendrán las pueblos pertenecientes a las potencias
del primer mundo para obtener agua limpia.
Esta tarea eminentemente educativa, la del ascenso ideológico del pueblo,
sólo la realizan con éxito los seres humanos virtuosos capaces de
potenciar en las masas las mismas virtudes, y que sin duda son
desarrollables en nuestro Pueblo Glorioso, en millones de venezolanos y
venezolanas dispuestos a ser verdaderamente útiles para felicidad de la
Patria. ¿O alguien pone en duda la necesidad del virtuosismo en la titánica tarea de formar cuadros?
Y
esto, Compatriotas, Camaradas, como bien enfatizó el Che, trasciende
más allá de una directiva de partido político electa por simples
simpatías porque los cuadros han de ser las piezas o ejes maestros del "motor ideológico que es el Partido Unido de la Revolución."
Motor inmenso del tamaño de toda la masa revolucionaria que se alimenta
de virtudes con sus propios ejemplos. Como sucede en Cuba, hijo de
revolucionarios ha tenido desde la cuna y desde la escuela el motor de
la Revolución donde se aprenden los valores morales de la vida
verdadera y la valía de los sacrificios por la lucha emancipatoria, y
por la sobrevivencia en dignidad.
Este texto explicativo lo ofrezco primero, para aclarar que mis juicios iniciales emitidos en el artículo: "Vladimir Acosta y Fernando Soto Rojas: Cuadros continentales para una verdadera Revolución", no derivan de ningún "test de inteligencia" que se les hubiera aplicado a los camaradas Acosta y Soto, derivan,
eso sí, del respeto a sus inteligencias socialistas y humanistas, a sus
entregas pedagógicas en pos de sembrar ideales de vida bella a lo largo
y ancho de sus trayectorias, con el ejemplo de sus propias vidas, que lamentablemente son desconocidas por algunas
compatriotas.
En el caso de Soto Rojas
fue el mismo presidente Chávez quien lo designó como miembro de la
comisión presidencial preparatoria del PSUV, por el respeto y la
admiración que Soto le inspira por su acumulado historial de lucha
desde los años 60, por su entereza revolucionaria y por su vasta
cultura política. Este camarada fue llamado por Fidel Castro en
momentos difíciles para la revolución cubana para coordinar acciones en
Cuba en trabajos de inteligencia con el propósito de combatir focos
contrarrevolucionarios; segundo, porque la vida es una sola, y a veces el tren de la oportunidad no pasa dos veces y
ésta que ha representado un momento histórico importante ve
frustrada la presencia en la directiva del PSUV de dos hombres con
invectiva revolucionaria preparados para el magno compromiso que
significa cohesionar las masas en la dirección correcta para la
consecución del Socialismo; tercero,
en función de contribuir al mayor y mejor conocimiento de nosotros
mismos, y en consecuencia lograr una justa valoración; pues en nuestro
seno existen camaradas potenciados y potenciables, que comprendemos que
es inaplazable la formación de cuadros en cada ámbito de la vida
social: en el militar, el educativo, el sanitario, el económico, el laboral, el sindical..., etc.
Sólo
basta entrar en una tienda venezolana donde la trabajadora y el
trabajador aún siguen arrodillados ante el patrono, quien abusando de
sus fuerzas los obligan a hacer trabajos más allá de lo pautado por
ambas partes, como trabajar más de 8 horas y no poder irse hasta no
limpiarle el local, so pena de ser despedidos, y éstos en permanente y casi "natural" entrega, soslayan sus dignidades permitiendo día tras día su sobre explotación,
sin entender el porqué de su situación, ni qué hacer para salir de
ella. Sólo saben que deben sobrevivir, él, ella y sus familias.
Sin querer entrar en muchos otros ejemplos; sólo basta esta "simple y normal" experiencia
cotidiana para entender la urgentísima necesidad de formación de
cuadros; y en consecuencia la importancia de posicionar a hombres y
mujeres como Soto y Acosta dentro del PSUV. El Pueblo necesita
comprender que la Revolución Bolivariana es un imperativo de
libertad para vivir en dignidad, en consecuencia, urge el Ejemplo Revolucionario.
Para
finalizar, para aquellos Compatriotas que quieran conocer un poco
más de Vladimir Acosta y de Fernando Soto Rojas, les recomiendo las
siguientes direcciones.
"Hasta la Victoria Siempre"
Zulay Farías M.-
...que la reseca muerte no me encuentre vacío y solo sin haber hecho lo suficiente.
" Sólo le pido a Dios" León Gieco
miunicorniosiempreazul@yahoo.es