Quiero a través de este artículo, y luego del discurso del pasado
sábado del ciudadano Presidente de la República Bolivariana de
Venezuela, Comandante Hugo Chávez Frías, retomar el debate ideológico,
la batalla de las ideas. Considero que es uno de mis aportes a este
proceso revolucionario, y en especial a la región que tanto quiero, que
tanto amo, en donde me crié, como lo es Guayana, en donde creo que una
de las falencias que tiene nuestro proceso en esa región sumamente
estratégica de nuestro país es esa.
Esto por supuesto, no quiere decir que no denunciemos y no hagamos
las críticas que tengamos que hacer en su momento, basado más en ideas
y en propuestas, que en descalificaciones de carácter personal. Tenemos
que hacer política con la cabeza y no con las vísceras. Esto debemos
entenderlo los que pretendemos ser revolucionarios y revolucionarias,
sin que ello implique arriar las banderas de nuestros principios y de
nuestra dignidad.
Pero de lo que se trata en esto momentos es coadyuvar para que el
proceso revolucionario y su organización revolucionaria se fortalezca y
avance. Por eso este artículo lleva el título que muchos pudieron
observar.
La sociedad capitalista se caracteriza por la anarquía que se
sustenta en el egoísmo, es una guerra de todos contra todos, esa es su
esencia. Las organizaciones están impregnadas de esta contradicción: el
egoísmo y la necesidad de vivir en colectivo.
A la sociedad y sobre todo a los humildes se les impide, se les
sabotea de mil maneras las organizaciones integradoras nacionales. Las
pocas que surgen son agrupaciones de egoísmo. Egoísmos colectivos de
defensa ante otras organizaciones similares, nunca son formaciones que
le dan organicidad a la sociedad.
Así encontramos asociaciones comunales aisladas del resto de la
sociedad, asociaciones de vecinos aisladas, colegios profesionales que
defienden los egoísmos colectivos, sindicatos de resistencia y puja
frente a los patrones.
Los partidos políticos siguen el mismo modelo, son asociaciones
casi mercantiles que medran El Estado oligarca, contribuyen a esparcir
la ética capitalista y garantizar la desorganización social.
En contraste, el partido, la organización revolucionaria, tiene
características opuestas, es una agrupación más consciente que prefigura
la sociedad socialista del futuro.
Dirige la reintegración social de la sociedad, el establecimiento
de la conciencia del deber social, el restablecimiento de las
relaciones amorosas entre los seres humanos y de estos con su entorno,
restitución de la condición humana del hombre mercancía. En resumen,
dirige la construcción del Socialismo.
Es una organización política que dirige la disputa del poder
político a las clases hegemónicas, lo captura para hacer de las ideas
de la nueva sociedad anhelo nacional.
El partido, la organización revolucionaria debe tener una nueva
ética, entre sus miembros deben prevalecer las relaciones fraternas,
debe ser prefiguración de la sociedad que se quiere y que se debe
construir, la sociedad que promete al pueblo, demostración de las
bondades de la sociedad prometida, debe educar con el ejemplo.
En el camino de la construcción de la organización se presentarán
siempre obstáculos, la lucha contra la cultura egoísta es el principal
de estos escollos, es una batalla contra nosotros mismos, que sólo
tendrá éxito en la vida en colectivo.
No es concebible una Revolución sin una organización política,
porque no es posible la lucha contra la cultura egoísta capitalista sin
la agrupación de los más conscientes, los más lúcidos, sin organizar
para potenciar la acción de los que van adelante en la toma de la
conciencia, en entrega, en desprendimiento, sin la vanguardia de la
sociedad. El aislamiento de los mejores debilita el combate por la
redención, al contrario, la unión de los mejores es potencia exitosa.
No es posible una Revolución sin una organización nacional de los
revolucionarios y revolucionarias que le dé sentido al combate contra
las organizaciones nacionales de las clases hegemónicas.
Por eso es que esta batalla, dentro del PSUV, no ha terminado con
el proceso electoral interno del pasado 01 de junio de 2008, ni con la
selección de candidatos y candidatas para los venideros comicios
regionales del 23 de noviembre de 2008. Y con todo ese remolino de
declaraciones y descalificaciones a los candidatos y candidatas que
resultaron vencedores y vencedoras de este proceso. La batalla real es
ésta, y es mucho más importante, y este humilde servidor se pone a la
orden para ayudar en lo que pueda para colaborar al fortalecimiento y
organización de una verdadera fuerza en nuestra revolución que vaya en
el sentido expresado en este artículo.
Patria Socialista o Muerte!!!!
Estamos Venciendo!!!!
*Abogado y Analista Político. www.juanmartorano.blogspot.com , http://www.juanmartorano.tk/ . jmartoranoster@gmail.com ,j_martorano@hotmail.com , juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar