El lunes estaremos ante un nuevo escenario. Intenso ante la presencia del sol agobiante de estos días en que el fenómeno Niño ha dejado sus secuelas. Intenso también por el compromiso de los delegados electos al Congreso Extraordinario del PSUV, que se realizará a partir del 21 de Noviembre.
El día 16 se respirará la resaca por la celebración de quienes se alzaron con la “victoria”. Otro sector, posiblemente la mayoría, sentirán que sus sueños se han dilatado en el tiempo, trasladándose a otro momento, otro instante que no es el que se definió este 15 de Noviembre.
En la refriega política maquillada por lo que la naturaleza humana burguesa ha dotado a las personas, se reprodujeron -no sé si por accidente o por error- las acostumbradas zancadillas, las maquinarias, el jefismo, el cuida tu cargo, el cuánto vale, el descenso en las listas, los multifuncionales, los socialistas puros (especie de maná de donde brota el socialismo). Todas estas prácticas fueron algunos de los obstáculos que debimos afrontar quienes bajo la vocación y espíritu socialista nos atrevimos a superar para votar por quienes en lo adelante tenían el colosal cometido de construir la Patria Socialista, bajo la dirección de nuestro comandante Hugo Chávez Frías y de la mano de un verdadero partido revolucionario. Sin embargo, ésta mal ávida naturaleza humana burguesa de la cual no hemos podido despojarnos, dispuso una vez más de nuestros sueños, ya que impuso en nuestro camino hacia la revolución socialista a los “multifuncionales” y “socialistas puros” que han copado todos la escena política, por aquello de considerarse los iluminados para hacer el socialismo.
Este 15-N será calibrado en la historia como el momento en que se bifurcó el camino al Socialismo entre quienes creemos que esta es la opción para la vida y entre los que ven en el socialismo una oportunidad para vivir… A pesar de lo ocurrido se nos ha puesto en la palestra un nuevo reto: hacer la revolución dentro de la revolución para liberarla de los ropajes reformistas que pretenden convertir al partido en un cartel de élites y cúpulas.
Depende de toda la militancia participar con valor y sin ceguera; escoger a los mejores hombres y mujeres del partido; y repito: a los mejores, ya que en ello estará el futuro de nuestra revolución. Y como lo dije alguna vez ¡el partido entra al quirófano y sólo algunos (los mejores) deben operar!
Patria, socialismo o muerte, ¡Venceremos¡
TODOS A VOTAR ESTE 15 DE NOVIEMBRE
(*) Prof. UBV. Responsable de patrulla. Abogado/Trabajador Social
Correo: martinjpadrino@gmail.com
