En política lo que hay son intereses

EEUU nos visita

Quisiera interpretar varias cosas de la visita de Estados Unidos a Venezuela. La primera de ellas: en política no hay ni buenos ni malos, lo que hay son intereses. Los intereses norteamericanos dan para reunirse con quién sea, para señalar lo que les interesa sin ningún tipo de escrúpulos. En eso son pragmáticos y no encuentran enemigos, obstáculos ni ataques a la hora de reunirse con Irán y Venezuela.

Venezuela no es menos enemiga de EE.UU. al compararla con Irán. Recordemos el bombardeo iraní sobre sus bases militares en Irak en el primer trimestre del 2020 cuando el asesinato al General Qasem Soleiman, luego de haber hecho reuniones, acuerdos de actividades, cuando habían cumplido una agenda. Aprovecharon su visita, le espiaron y planificaron su asesinato.

Igual como utilizan a los de Al-Qaeda, los crean, entrenan, y cuando tienen que asesinar a sus altos jefes militares no tienen escrúpulos en llevárselo por delante. Esa es la política internacional que impera sobre el planeta, el estilo de Norteamérica.

Ahora, ¿qué podemos interpretar con Venezuela? Estados Unidos quiere imponer su agenda, debemos ser cuidadosos, pues nos presentan un escenario distinto al practicado en las dos últimas décadas y el cual se radicalizo en los últimos cinco años.

Frente a lo que se nos presenta no podemos salir con cuatro piedras en las manos pues cómo quedamos frente a la comunidad internacional, van a decir que se intentó un acercamiento pero que Venezuela no quiere, y esto puede proporcionar ataques más duros y peligrosos. No es que con la nueva agenda no lo hagan aun cuando no han dicho claramente cuáles son sus puntos los mismos ya se intuyen en las reiteradas declaraciones, pedimentos y reclamos los cuales han venido de parte de ambos — EE.UU. y Venezuela —.

Al menos las exigencias se han dejado entrever. Ya se declara que, con cuatro Empresas Mixtas de capital norteamericano y venezolano, incluso con una de Italia — ENI lo más seguro —van a trabajar aquí en extracción de petróleo en la Faja petrolífera del Orinoco ubicada en la sudamericana nación.

Esto indica que hay una relación entre Europa y Estados Unidos y en la cual estos últimos han asumido toda la vocería lo cual los lleva a trabajar en conjunto para haber desarrollado los actuales inconvenientes de suministro creados por la guerra entre Ucrania — Federación Rusa la cual todo indica que va a ser ampliada.

En la misma agenda ya lo ha dicho Estados Unidos, desean regresar a su embajada en Caracas. Este ha sido uno de los golpes más duros asestados por el gobierno venezolano. Norteamérica atiende consularmente a Venezuela desde Bogotá y por eso su área de influencia geopolítica se les ha quebrado.

Con el gobierno interino no creo que a la administración Biden le agrade mucho la situación con Guaidó, recuerden que él ha reconocido públicamente desde antes de las elecciones a Donald Trump, poniéndolo este como presidente interino, cargo sin forma alguna dentro de la política exterior, pero al cual EE.UU. le ha dado vida y mucho poder para cometer otra fase de daños más profundos hacia Venezuela.

Pero la heroicidad del interino se ha agotado primeramente por sus imprecisiones y torpezas cosa que igual ha desgastado la propuesta norteamericana. Puesto como un héroe ahora le cuesta quitárselo de encima a Estados Unidos quien está en busca de otro interlocutor y el cual espera conseguir con la reactivación de la Mesa de dialogo en México.

Guaidó ya no es sagrado, solo que la oposición venezolana esta tan dividida y sus candidatos que les van a sustituirme se encuentran auto—exiliados y la cosa se les pone cuesta arriba, pues con los que están ahora entre ellos mantienen exageradas divisiones. Para la opinión de muchos cuando Estados Unidos pueda lanzarlo al abismo no le va a temblar su pulso.

Mientras en Venezuela el Gobierno habla de una nueva agenda más amplia con la oposición, ya se dejan escuchar términos como inclusiva y amplia. Igual quieren ir a la Mesa de dialogo en México, muy importante en estos momentos, lo cual indica que ya hay acuerdos, cosa que guarda una imagen renovada para el país frente al mundo.

"Afortunadamente" lo que está pasando en Europa del Este le está beneficiando a Venezuela. La tensión internacional del planeta repujada desde Estados Unidos alude que detrás de ellos está la presencia de Donald Trump para las elecciones del 2024. Esté que no es un enemigo pequeño también los advierte sobre la presencia de Vladimir Putin lo cual en las relaciones internacionales opaca la presencia de Estados Unidos.

Ambos saben — Putin y Biden — que con esto están originando una III Guerra Mundial. El gran nivel de confrontación busca extender el conflicto, pero si esto se soluciona mañana, vendría con la Federación Rusa un enfriamiento en sus relaciones comerciales tras el desproporcionado récord de más de cinco mil sanciones conseguidas en apenas unos días.

Las relaciones políticas y comerciales de Rusia las van a poner dentro de un congelador. Después de la guerra vendrá un nuevo tiempo el cual será de enfriamiento para Rusia, por lo menos esto se va a extender en toda la gestión de Joe Biden, vienen graves problemas.

Putin aprovecha y golpea el precio del galón de combustible en Norteamérica pues en apenas días ha subido al doble, la situación es muy delicada, hay bastantes problemas. Pero mientras esto pasa Norteamérica no deja de lado la agenda con Venezuela más bien la activa, para esto cuenta con equipos, logística, dinero y con sus especialistas activa diversos escenarios.

A Venezuela le beneficia el entierro del Grupo de Lima, por lo tanto, ahora después de EE.UU. haber dado tantas vueltas para evitar sentarse a conversar con Venezuela ya no le ha quedado más opción. Se acabaron "amigos" presidentes suramericanos, y como perciben los triunfos electorales de Gustavo Petro y Lula da Silva, por ejemplo, pues la región quien va a hablar por si sola, incluso la situación que se presenta con El Salvador, quienes no están con Venezuela, pero tampoco con EE.UU. y todo esto suma.

Para América Latina casi toda Centroamérica a excepción de Nicaragua y México no guardan un peso en política internacional como si lo guarda toda Sudamérica. La política latinoamericana y caribeña la produce, genera e impulsa Suramérica. Solo estos países evidencian agendas y propuestas.

Incluso, Panamá puede decir mañana cualquier cosa, y pasará desapercibido. El Salvador ni se notaría, puede decir lo que sea eso no tiene ningún peso para nosotros. Como excepción tenemos a Ecuador, puede hablar, opinar, pero ya está comprobado que sus palabras igual no importarían.

Salimos de nuestras latitudes y vamos a ver el comportamiento con China y Rusia frente a la visita de Norteamérica a Venezuela. El problema que ven muchos analistas es si Rusia continuará con Venezuela al ver un nuevo dialogo con los estados Unidos de Norteamérica.

Como entenderlo. La tormenta más fuerte ya pasó, el país bisagra para que entraran los rusos y chinos — estos últimos ya estaban en lo comercial —desde el punto de vista político y militar fue Venezuela. Son los pasos por un mundo pluripolar, quiérase o no, aunque comience a retazos, pero vamos por un mundo donde después de esta guerra — Ucrania y Rusia — que, por supuesto Estados Unidos propició, sin embargo no van a ganar muchas cosas al contrario van a perder. Después de esta guerra muchos países van a salir detrás de la Federación Rusa.

Rusia nunca está ocupada, ni apartada ni alejada, ocupa un escenario de los más importantes, tras el pasar de los años adopta más vida. Está liderando una guerra en la cual no tuvo más opción y tiene de cabeza a los Estados Unidos.

Ahora, el escenario de beligerancia con Venezuela existe, pero también hay una agenda entre las partes desde hace décadas que se agravó con las sanciones, por eso hay que sentarse, hablar, discutir puntos, eso lo hizo hasta los ingleses con Irlanda, eso es parte de la diplomacia, política internacional y la cual no debe ser un mito para Venezuela, mientras exista diálogo el tema petrolero resurgirá con Venezuela pues esa es la discusión o la discordia.

Es mejor ir a una agenda antes que seguir anarquizando al país y la región. Venezuela debe cerrarles todas las vidas a los enemigos políticos de Brasil, Argentina y a los que tuvimos en la época del macrismo con Argentina.

Todos estos enemigos activados con Estados Unidos, y seguir con su misma opción va a anarquizar al país, y el tema petrolero se va a hacer más difícil. No podemos levantar toda la atención de los enemigos del mundo hacia acá, sin embargo, viendo la situación de Estados Unidos este no dudará en salir y a golpear a un país más pequeño, es lo más seguro cuando se vea perdido en esta guerra y antes de que eso pase Venezuela debe blindarse para prevenir ese objetivo.

Uno de esos golpes de Norteamérica está en Taiwán con China al cual también mantienen en su objetivo, ya el tema con Irán está controlado por los mismos persas. Han hablado con Irán y con Venezuela, sus archienemigos.

Y qué más enemigo que Irán para Norteamérica a quienes si les han dado muy duro. Venezuela les ha enviado ni una bala por correo, pero esto no significa que no nos vayan a dejar de lado.

¿Van a venir los gringos a darnos un golpe de Estado y a quienes van a montar en Miraflores? ¿Van a poner al subsecretario de Estado norteamericano de presidente? ¿Quién va a asumir? ¿Dónde están los líderes para asumir el estupor de la oposición? Dividida, fraccionada.

En la lucha política no hay ni buenos ni malos, pero si el gobierno le destruye todos los caminos a la oposición está cerrando el diálogo y eso no sería una política seria. Pero la política tampoco es un reservorio de monjes en una sacristanía dándonos la paz y pasando las ostias. Eso no es político, en ninguna parte del mundo y menos aquí en América Latina.

La situación preocupa de cómo lo van a ver los rusos después que Estados Unidos estuvo en el Palacio de Miraflores y liberaron a dos de sus pedimentos, pero al día siguiente la Vice presidenta Delcy Rodríguez estaba reunida con Serguéi Lavrov en Turquía, estableciendo acuerdos, agenda, en pocas palabras aquí cabemos todos.

Esto tampoco es una revolución en el sentido de que hoy se monta un grupo porque ganó Rusia aquí y sacamos a los otros, no. La política es compartir, al menos esa es la lección que nos están dando desde Miraflores, avanzamos, quizás no como queríamos, pero las estrategias llevan tiempo y en política lograr lo que queremos lleva tiempo.

En la política hay sectores que debemos reconocer. Venezuela no tiene ni la fuerza ni la astucia para cerrarse a todos los sectores y echarnos los doscientos países del globo encima. Aquí hay cosas que negociar teniendo la base de nuestro concepto de Estado—Nación.

De esta reunión con Estados Unidos hemos salido muy bien. Las fuerzas reaccionarias suramericana tendrán que esperar, las hemos desarmado. Por eso periodistas, opositores con sus líderes han saltado, hay un reconocimiento presidencial a Nicolas Maduro, ¿y, reconocen a Guaidó? ¡no! Ya no lo llaman ni lo nombran. Si Guaidó hubiese sido su hombre fuerte ya estuviese allí, y no lo está.

Veamos las declaraciones de Marco Rubio, están derrotados, se fatigaron, seguro tendrá que venir otro nuevo nivel de agresiones, pero el actual, al menos el que mantuvo Trump se acabó. Si los voceros de Estados Unidos declaran en contra de Venezuela, lamentablemente eso tiene importancia, pues es una orden lo que están dando y de seguro Canadá con Europa lo van a tomar así, porque es una orden, y parte de América Latina y el Caribe van a tener prudencia con nosotros pues somos una nación sancionada.

Por el interés con el petróleo hay un acercamiento, posiblemente el levantamiento y ablandamiento de sanciones, ya la etapa del endurecimiento queda en la heladera como dicen los sureños. Ahora quieren comprar petróleo o al menos despiertan ese objetivo.

Debemos recordar los antecedentes. En todos los conflictos del mundo desde la I y II Guerras Mundiales, y las guerras que intercedieron a ambas y las posteriores como la del Yom Kippur hasta la llegada de la Madre de todas las guerras a partir de 1990, en todos esos eventos, en esos episodios ha estado presente Venezuela como país proveedor de petróleo, y esta vez no va a ser la excepción.

Estados Unidos necesita petróleo y no va a llegar a cualquier país productor a pedir sus dos o tres millones faltantes, no puede, así los tenga Arabía Saudita, quienes han fijado una posición más a favor de Rusia que de los Estados Unidos, no tienen infraestructura ingenieril petrolera para dárselos.

No pueden pedir más a otro país productos pues en cuanto tiempo van a planificar los nuevos medios ingenieriles para su extracción, dónde están los cien mil profesionales para montar refinerías, torres, poliductos, puertos, terminales, dónde van a conseguir las navieras para transportarlo hacia Norteamérica.

¿Y el dinero?, las refinerías comenzarían a funcionar por suerte en tres años, es ahora que se requiere, quién tiene el cupo es Venezuela porque tiene la capacidad instada para más de más de tres millones de barriles, hoy, a pesar del embargo, de la situación en el deterioro del sistema refinador está produciendo un millón y tanto de barriles al día.

Ya la OPEP certifica que la producción diaria para el mercado internacional está sobre 877.000 barriles al día. Ya lo está aceptando la OPEP, ya hay buques, hay mercado. La extracción está funcionando.

Hasta hace poco, buques que venían hacia Venezuela eran robados por Estados Unidos a la salida del Mediterráneo, Canal de Panamá, pero la política ha cambiado, así como va cambiando el escenario para nosotros también hay cambios para el escenario norteamericano.

El nuevo escenario internacional nos pone en un momento donde hay que ser más audaz, también tolerantes, exigirnos más, establecer agendas. Norteamérica lo ha dicho al gobierno venezolano, quieren que nosotros liberemos a los seis venezolanos—norteamericanos de CITGO, ya se liberó uno junto a un cubano—norteamericano. Quieren la liberación de los dos mercenarios de la operación Gedeón condenados a veintiún años.

Y Venezuela ya ha hecho su agenda: la entrega inmediata de Alex Saab, punto de honor del gobierno. Así lo está demostrando, así lo han dicho, si le dieron nacionalidad venezolana, esta como diplomático para la reactivación la Mesa de Negociaciones en México, entonces Venezuela está diciendo a Estados Unidos y al mundo que Saab es importante, entréguenme a Saab.

El tema de CITGO es otra piedra gigantesca en el zapato. El enmarañamiento es grande pues Estados Unidos la intervinieron y vendieron sus activos, agarraron sus acciones, Guaidó y su grupete la han saqueado, éste fue muy habilidoso y han hecho con CITGO lo que se les ha antojado, ahora cómo la regresan después que fue saqueada, vendida, empeñada, ahí va a estar el grave problema.

No debemos olvidar que los Estados Unidos con sus recursos, infraestructura, equipos y repuestos tienen la mayoría de las cosas que se requieren en nuestro parque de refinerías a las cuales debemos adecuar, hacer mantenimiento y los necesitamos para llegar a tener producción. Solos nos va a costar muchísimo pues necesitamos inmensas cantidades de dinero. Incluso Venezuela ha solicitado entre los nuevos puntos un ablandamiento hasta con los Bonos PDVSA.

En el mismo seno de la política estadounidense ya hay opiniones a favor, hay puntos de la agenda que salen poco a poco, hay que leer entre líneas. Hay que seguir las noticias diarias, nacionales, internacionales, y ver los puntos que van sacando a cuenta gotas, van cayendo como un lento gotero, esos son los puntos y ya hay acuerdos.

Si Venezuela le entregó al gobierno norteamericanos a dos ciudadanos es porque ya tienen visto un acuerdo, es porque hay un entendimiento, eso forma parte de las relaciones internacionales, nada de que sorprendernos o alterarnos. Si algún día a Francia con premura está necesitada de petróleo y viene a negociarlo seguro que en el avión que llegue su comitiva nos traen al Chacal.

Así como el Tribunal de Nuremberg liberó en 1955 al contralmirante Karl Donit Almirante—comandante de la marina alemana desde 1943 a 1945. Como Jefe de Estado le correspondió firmar la capitulación de Alemania. Creador de la operación Neuland, dirigió la Guerra del Pacífico. Operación que trasladó al Caribe noventa y seis submarinos de los cuales veintinueve operaron en aguas internacionales bombardeando sesenta y nueve buques en estas aguas y hundiendo un total de cuatrocientos buques con petróleo a lo largo y ancho del Caribe. La base de operaciones se llamó Simón Bolívar y estaba instalada en Argentina. Como ven no es la primera vez que desde Buenos Aires se conspira militarmente en contra de Venezuela.

Por tanto, en política no hay buenos ni malos, en política lo que hay es intereses. Y hay presión para que el otro sector conceda y entregue algo, esa es la política. Y cuando los cubanos con los Estados Unidos aceptaron que hubiera embajada en la Habana. Obama junto a su vicepresidente Jhon Kerry fueron a La Habana, y todos saben los enfrentamientos entre Cuba y Estados Unidos, pero hay una mesa de negociaciones, hay una agenda, nunca se acaba el diálogo ni cuando con la Crisis de los misiles.

Ese es el arte de la política y el entendimiento, hay una agenda, un camino por recorrer, llegar a unos resultados. Después que como Estado —Venezuela— caminé, subí, bajé, cuando me llega la agenda para obtener esos resultados que como país que he querido, ¿lo voy a echar para atrás? No es una cosa particular, es la política, estamos hablando del país. En Washington la situación política no va a cambiar como nosotros queremos, no va a llegar una izquierda, ningún grupo progresista, ni van a tomar el poder, el mundo está muy comprometido en muchos sectores y grupos.

Tendrá que haber una convivencia política o entre todos desarrollaremos una III Guerra Mundial. O nos matamos o nos entendemos. ¿Cuánto puede durar eso? Muy poco, quizás de este al otro año porque si se activa la III Guerra Mundial todos estaremos en el campo de batalla.

Pero si hay una salida y soluciones seguiremos dando la batalla política. Nada de qué asustarnos o que van a decir los rusos o lo que van a decir los gringos, el viejo adagio, proverbio o la vieja fórmula política: divide y vencerás y nosotros en Venezuela también lo sabemos. No hay nada sagrado, no hay nada único, hay cambios, hay movimientos, principios, puntos, algunos de honor, otros de convivencia, pero así va el entramado, en la política lo que hay es intereses.

Hasta más pronto…

Marzo 2022



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Miguel Jaimes

Politólogo. Magister scientiae en ciencias políticas. Doctor en ciencias gerenciales. Posdoctor ontoepistemología en geopolítica de las energías. Cursando doctorado en letras. Cursando Posdoctorado en literatura del petróleo en Venezuela. Libros: El oculto poder petrolero, apertura petrolera, poder de PDVSA vs. poder del estado. Petrocaribe la geogerencia petrolera. Primera edición. Petrocaribe la geogerencia petrolera. Segunda edición. Director del diplomado internacional en geopolítica del petróleo, gas, petroquímica y energías – Venezuela. Director de la web https://www.geopoliticapetrolera.com

 venezuela01@gmail.com      @migueljaimes2

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