El cinismo conduce a la arrogancia, y ésta a lo grotesco y la insensibilidad completa del alma. Produce indignación observar cómo un cínico, hablando en nombre de la democracia y la libertad, se burla del dolor ajeno, y produce tristeza ver cómo el sufriente se presta y se hace cómplice de su burlador. Bush hizo sentar a unas personas muy cerca de él, y entre las cuales se encontraba una dama que tiene un familiar preso en Cuba, y sin ningún respeto por el sufrimiento sincero de esa dama por su familiar que vive un momento difícil como lo es estar en cautiverio en Cuba o en cualquier parte del mundo, le explotó hasta la saciedad su dolor, y mientras la dama dejaba caer lágrimas por sus mejillas, el cínico se reía de los aplausos que premiaban sus aprovechamientos oportunistas. Sencillamente, es terrorismo ideológico burlarse de otro ser humano aun cuando sea un enemigo en combate o vencido, y más lo es, cuando se trata de un dolor, que en el caso de la dama que estamos mencionando sólo sanará en el momento en que su familiar obtenga su libertad al salir de la cárcel. Ahora, eso es competencia del Estado cubano que es quien sabe con exactitud la causa por la cual está detenido ese familiar de la dama que Bush presentó al mundo como víctima del gobierno de Cuba sin explicar las razones por las cuales se le ha juzgado. Definitivamente: el señor Bush es cínico. Luego hizo levantar de su asiento a otra dama que también dejaba caer lágrimas por sus mejillas por no saber cuándo podrá volver a Cuba. Bush, el cínico, seguramente creyó que estaba matando todo un gobierno de pájaros con dos tiros.
El
señor Bush prometió villas y castillos a los cubanos, garantizó que muy pronto
caerá para siempre
Un
campesino que prácticamente no sabe leer ni escribir, pero sí sabe escuchar y
diferenciar lo malo de lo bueno, nos preguntó: “¿Ese carajo como que tiene cuatro bolas?”. Hubo risas, pero no de
burla sino de sano entendimiento al lenguaje del que tenido por ‘ignorante’, ya sabe en demasía que
Estados Unidos –tal como funciona o actúa hasta este momento- significa guerra,
muerte, desolación, llanto, dolor, tristeza, pobreza, esclavitud para la
mayoría de la humanidad.
Bush,
habló como si fuera dueño del mundo, y los acólitos le aplaudían como si fuera
un Dios. Bush ha sido predestinado por el divino imperialismo capitalista para
plagar de miseria, muerte y dolor no sólo a
En
su perverso discurso prometiendo libertad para el pueblo cubano y no
estabilidad del gobierno revolucionario, el cínico nada dijo del pedazo de Guantánamo
que mantiene invadido y ocupado siendo eso una descarada violación al
patrimonio territorial cubano; nada dijo de los centenares de presos políticos
que mantiene en Guantánamo y que son cotidianamente torturados, lo cual ha sido
denunciado por el expresidente Carter; nada dijo de los miles de miles de
muertos inocentes que las fuerzas mercenarias estadounidenses producen en Irak
alegando que combaten contra el terrorismo; nada dijo de las sucesivas condenas
de la aplastante mayoría de los países miembros de
Lo cierto es que el cínico está tirando brazadas de ahogado y patadas de ahorcado. El mundo entero sabe a ciencia cierta que ni Bush ni otro Presidente que lo sustituya se atreve o tiene el coraje de dar la orden de invadir a Cuba. Si algún mandatario estadounidense, por una razón de degeneración total de neuronas hamburgueseanas o ianas, se le ocurriera ordenarla ya completamente perdido todo síntoma del sentido común, se cumpliría al pie de la letra en menos de veinticuatro horas un estallido internacional aquello que el Che decía: crear uno, dos, tres, diez, muchos Viet-nam, y, sépalo el imperialismo estadounidense, les llegaría ese momento muy temprano de a Dios luz que te apagaste.
¡Ah!,
lo que sí dijo el cínico fue: ¡Viva Cuba
Libre!, pero todo el mundo sabe que es con coca cola y no con agua.