Los años pasan, el pueblo mayoritario da lecciones, pero nada que aprende la oposición y menos Henrique Capriles Radonski, un hombre que siempre apuesta a la violencia como mecanismo para ganar notoriedad y escalar posiciones en la política.
El domingo día las elecciones de una manera irresponsable, se plantó ante el país y desconoció los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), sin importarle las repercusiones que sus declaraciones tienen en grupos de personas que lamentablemente les creen sus mentiras.
Capriles actualmente juega con fuego y lleva a los venezolanos por el camino de la violencia, así como él personalmente procedió poniendo en peligro la vida del ex ministro Rodríguez Chacín durante el Golpe del 11 y 12 de Abril de 2002, cuando lo esposó y lo sacó entre una multitud enardecida. Ya quemaron sedes del PSUV, casas, CDI y lo más deplorable: se han producido muertos, mientras él y su combo conducen las acciones encerrados en aires acondicionados enviando mensajitos por Twitter, tal como lo hizo en su momento Carlos Ortega. Es que sufrimos el mismo formato de esas acciones desestabilizadoras.
No olviden nunca en la vida que Capriles es un violento redomado y un mentiroso compulsivo. Recuerden que durante ese mismo Golpe también participó en el asalto a la embajada de Cuba, un hecho repudiado por la población nacional e internacional.
Después de su derrota, igualmente se pusieron en evidencia sus mentiras de campaña. Casi se abraza a los médicos cubanos y transcurrida unas horas de las elecciones los persigue. Hablaba de mantener las misiones y quema los CDI. Pregonaba paz, amor, tolerancia y llama a la destrucción del país. Es un falso que como siempre engañó a sus seguidores.
Desde ese mismo día de las elecciones envió un tuit diciendo que el Consejo Nacional Electoral le pretendía cambiar los resultados, intentando caldear los ánimos de la población y buscar que personas salieran a la calle a fomentar disturbios. Todo estaba preparado como lo advirtió el presidente Nicolás Maduro.
Lo peor es que continúa las insinuaciones y los llamados sistemáticos de anarquía disfrazado de ovejita y eso es grave aunque todo se le revertirá. Porque a los conspiradores se les revertió el Golpe del 11 y 12 de Abril, el sabotaje petrolero y todas las manifestaciones que implicaron violencia en contra de Chávez y su Gobierno revolucionario.
Ni siquiera piensan que pueblo les ha dado otra oportunidad con una votación significativa ¡nada! no reflexionan, y en lugar de aprovecharla la echan al tobo de la basura. Les importa un pepino la democracia y el bienestar de la gente con tal de recuperar sus intereses y sus privilegios.
Cochino pollero no pierdo el vicio. Capriles es y será siempre un violento.
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@AlberMoran
