José Vicente Rangel en el programa del pasado 23 de marzo hizo una similitud muy acertada entre la acción desestabilizadora de un grupo fascista llamado “patria y libertad” antes del golpe de Estado fascista en Chile en 1973 y el de “Voluntad Popular” grupo fascista local que pretende realizar lo mismo en nuestro país.
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En realidad son muchos los parecidos entre ambas situaciones. Claro, ambas fueron preparadas por el Departamento de Estado.
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Al igual que aquí, antes del Golpe de Estado en Chile se produjo un desabastecimiento brutal de los artículos de primera necesidad, los cuales, por cierto aparecieron al día siguiente del asesinato de Allende.
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Al igual que aquí, los fascistas asesinaron a militares antes del golpe para presionar a las Fuerzas Armadas, como al General René Schneider.
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Al igual que aquí los medios, como el Mercurio, envenenaron al pueblo sembraron el odio y la mentira.
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Al igual que aquí, hubo personas de pensamiento democrático que apoyaron los planes fascistas para enfrentar el peligro del “comunismo”, y que luego bajo la dictadura de Pinochet pagaron caro ese apoyo, como el jefe del partido socialcristiano chileno que fue asesinado por la dictadura.
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Al igual que aquí, el Departamento de Estado organizó y promovió el Golpe de Estado, tal como se evidenció en los documentos recientemente desclasificados de la Casa Blanca.
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Al igual que aquí, los estalinistas bajo la batuta ideológica de Marta Harnecker trataron de imponer sus estúpidas tesis tales como la que sostiene que “la clase media es enemiga de los procesos de cambios” o la que afirma que todo intento por tener una mejor calidad de vida es “consumismo” o “prejuicio pequeño-burgués”.
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Entiendo que esto sucedió hace 41 años por lo que la casi totalidad de los venezolanos menores de 60 años desconocen estos hechos, pero lo que es imperdonable es que miserables gusanos que andan en dos patas como los vende patrias de Teodoro Petkoff, Pompeyo Márquez, Américo Martin, Gabriel Puerta Aponte y otros de esa calaña, a pesar de conocer en profundidad lo sucedido en Chile, incluso teorizado sobre ello, aparezcan hoy defendiendo descaradamente al fascismo criollo.
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En lo personal, cuando recibo un correo de uno de estos cagatintas del fascismo y conozco o sospecho que tiene más de 60 años lo envío directo al basurero.
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DIFERENCIAS SUSTANCIALES
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Sin embargo, a pesar de tener el Golpe de Estado un guion parecido, la misma realidad ha impuesto diferencias significativas:
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En primer lugar, y como aspecto fundamental hay que destacar que después de las amargas y dolorosas experiencias de las dictaduras militares en el continente, como las de Pinochet, Videla, Stroessner, Somoza, etc. la democracia se ha implantado en América Latina en forma definitiva, y la región rechaza categóricamente cualquier intento por eliminarla.
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Asimismo, el poder omnipresente de Estados Unidos en la región va en franco declive y hoy no es ni la sombra de lo que fue en décadas atrás y que permitió el ascenso y mantenimiento de esos gobiernos asesinos.
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En lo interno, si bien los medios fascistas como El Nazional y El Universal pretenden sembrar de odio y de mentiras al país, lo impiden sus escuálidos tirajes y su poca difusión, aunado a la existencia de un bien cimentado sistema de Medios Públicos.
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También ha minimizado el impacto de los intentos de desestabilización económica la creación por parte del genio de Chávez, quien previendo que en Venezuela se repitiese lo de Chile, creó un sistema público de producción, almacenamiento y distribución de alimentos, que de alguna manera ha funcionado a pesar de la infinita incapacidad de sus actuales administradores.
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Otro aspecto que impide el éxito de la guerra económica del fascismo es el dominio por parte del Estado de la principal y casi única fuente de divisas del país.
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Un aspecto que fue determinante en Chile y que aquí no parece darse es el apoyo de la Fuerza Armada a un golpe fascista. Sus orígenes sociales son diferentes. En Chile la oficialidad proviene de las clases dominantes, en Venezuela del corazón del pueblo.
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En Venezuela el estalinismo nunca progresó bajo Chávez, quien dejaba que hablasen todas las estupideces que quisieran pero él seguía con el proyecto que había diseñado. Cuestión que parece haber cambiado después de su lamentable muerte, ya que hemos visto como esas absurdas e imbéciles tesis parecen estar determinando aspectos importantes de la acción del Estado, en particular lo referente a la economía, en el manejo de los productos de consumo y en la distorsión de la Misión vivienda.
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Ojalá Maduro rectifique a tiempo. En Chile Allende cayó por culpa del estalinismo, porque si bien el golpe lo armó Estados Unidos, quienes crearon las condiciones para el mismo fueron los estalinistas y sus estúpidas tesis.
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De todas formas pienso que los dirigentes del proceso deberían ahondar más en el estudio de la experiencia chilena, tanto para conocer la estrategia del Departamento de Estado como para diseñar acciones para contrarrestarla. Recomiendo leer y estudiar el libro “Dialéctica de una derrota” de Carlos Altamirano, a la sazón Secretario General del Partido Socialista Chileno, el partido de Allende.
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También creo que es imprescindible dar a conocer al pueblo venezolano la historia de ese golpe, pero no con esos aburridos documentales narrados en off con voz de velorio sino con campañas publicitarias ágiles y convincentes que lleguen a la mayoría del país.
