En las escrituras del Santo Evangelio podemos apreciar las acciones escritas y publicadas por la Iglesia Católica sobre las acciones vida y palabras del hijo de Dios, actualmente en Venezuela con indignación vemos cómo la Conferencia Episcopal Venezolana, no practica la palabra de Jesús, no hace el trabajo social de lo que se supone es la religión que debería de mostrar a través de los actos obras que se acerquen al pueblo, en vez de fortalecer los 10 mandamientos de la Ley de Dios y condenar los 7 pecados capitales.
La acción de la directiva de la Iglesia Católica no debe extrañarnos, cuándo estudiamos un poco y nos damos cuenta que a través de la historia la Iglesia en su estructura sólo le ha importado el poder y no los pobres. Muchos han banalizado las prácticas de la Inquisición, donde asesinaban con justificación de una única religión a todo lo que sería contrario a la prédica de Jesucristo.
El Dr. Pedro Vicente Sosa Llanos (+12/09/2011), historiador, abogado y con doctorado en Ciencias Políticas de la UCV, en su escrito de “La Inquisición en Venezuela”, nos relata brevemente los orígenes y significado de tan abominable hecho protagonizado nada menos que por el Papa Lucio II creada en el año 1184 y por los Obispos el cual menciona “Sobre los obispos de cada región se impone la obligación de mantener la fe e informar directamente al Papa acerca de las personas sospechosas de herejía”.Herejía: consistía en la creencia o doctrina contraria a los dogmas de fe establecidos por una religión, esto significaba un grave delito que era castigado con tortura y hasta justificaba el asesinato.
El 5to mandamiento de la Ley de Dios reza NO MATARÁS, ¿Cómo justificaba la iglesia católica éstos hechos?, haciendo lo contrario de los designios, se asesinaron millones de personas en nombre de Dios, será cuestionable la credibilidad de una organización que debería de trabajar para la paz, pero en vez de ello encontramos acciones de dominación, justificación en cuanto al trato y acción en contra de los pueblos. Se pudo abolir finalmente la inquisición, después de siglos de práctica el 17 de julio de 1834, notificada a través de La Gaceta de Madrid.
Las acciones y palabras de Jesús son sin duda, lo que hace seguir con amor y acto de fe a la Iglesia, eso ha hecho que su imagen fuera utilizada para atraer y dominar masas, sobre todo a los pobres quienes son y han sido mayoría en el mundo entero, aquel que cree en él y teme al olvido de Dios practica sus designios.
Las declaraciones del Cardenal Jorge Urosa Savino, dadas al periodista Carlos Croes no están lejos de lo que la Iglesia Católica sigue practicando por mantenerse al lado del un sector que se autodenomina “Sociedad Civil” quienes manejaban el país a su antojo y la Industria Petrolera, la cuál no financiaba ni ayudaba a ningún sector, sólo trabajaba para autosustentarse, pero cómo actualmente es la principal inversora de las misiones y programas sociales del país es duramente atacada, situación que la directiva de la Conferencia Episcopal no toma como logro, no es ni siquiera mencionada, por el contrario muestra un enorme racismo político al atacar fervientemente al Chavismo es decir a la mayoría del pueblo venezolano.
El Cardenal no reconoce el trabajo que se realiza a favor de los más desposeídos, su lenguaje hacia los terroristas -son los títeres de un grupo que desea consolidar un nuevo golpe de estado- es de defensa cuando afirma “no se puede dejar que los cuerpos de seguridad arremetan contra los ciudadanos”, ¿Ciudadanos? El Cardenal le dice ciudadanos a quienes queman y destruyen el bien público, hospitales, universidades, guardería, que en cualquier país del mundo es logro poder obtener y sumar instituciones, aquí se trata como normal, como basura los logros del pueblo.
Es una burla que nos quiera hacer creer que porque un sector trata de violentar la constitución, diciendo que vivimos en un régimen dictatorial para activar y justificarse en el Art. 350 de la Constitución. Mientra no es condenado por ellos las situaciones desagradables que viven las personas afectadas por éstos grupos, los ciudadanos construyen, los terroristas destruyen y es lo que vemos a diario de éste sector que cree tener inmunidad por denominarse estudiantes. Sr. Cardenal los verdaderos estudiantes proponen, trabajan por un mejor país, no se le puede denominar estudiante a quien destruye a la sociedad.
Además que la Iglesia no trabaja por la paz, tampoco trabaja para sumar feligreses, no incentiva el respeto de los ciudadanos, el amor al prójimo ni los designios de Jesús. Podemos sumar al olvido de las prácticas en pro de los pueblos que la Semana Santa es tomada cómo una semana más de comercio, ni siquiera en eso le han tomado la palabra a Nuestro Señor Jesucristo “Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones”.—Isaías; 56, 7 , Jesús condenó a los mercaderes de los templos: Pero ustedes han hecho de ella una cueva de ladrones”—Jeremías; 7, 11
¿Porqué el Vaticano teniendo dinero y riquezas incalculables no invierte y ayuda a los pobres del mundo? ¿Por qué la Iglesia Católica no se despoja de los lujos y sale a combatir los verdaderos problemas sociales del mundo?
La autora es: Licda.
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