Hay que tener mucha desfachatez para referirse, como se refiere la MUD sobre el asunto del Magnicidio. Este acto terrorista es tomado a la ligera y con sorna por la oposición venezolana. Esa conducta también la aplicaron en el periodo del Presidente Chávez. En estos días escuche a unos dirigentes de la MUD, que alegremente dicen, que para ser acusados de “algo”, ese “algo” debe suceder, sino, son acusaciones falsas. Es decir, debemos esperar el magnicidio para poder decir quienes estaban detrás de él. Más irresponsable y burlesco imposible. Venezuela yace en la más grande reserva energética del mundo. Ese petróleo, nos da ventajas comparativas sobre otros países del orbe. Desde tiempos remotos, el gran policía del mundo ha puesto sus ojos en tan apreciable riqueza. Por la casa blanca han pasado muchos presidentes que nunca ocultaron sus apetencias de controlar los designios de Venezuela y así, manejar sus riquezas. Todos, casi sin excepción, se les agrandaron los ojos y las agallas, desde que reventó el primer pozo por allá en el Táchira. De hecho los gobiernos títeres que pasaron por Miraflores, sucumbieron a los halagos y otorgaron concesiones leoninas para su explotación.
El lomito se iba para la gran nación del norte, y aquí solo quedaba un pequeño sector burgués regodeándose con el dinero del usufructo yanqui. La gran mayoría de los venezolanos, lamiéndose sus heridas otorgadas por la pobreza y la miseria. Desde que llego Hugo Chávez y el concepto de Revolución Bolivariana, la cosa cambio. Desde el norte no gusto estos cambios. Por eso, pensar en la tesis del magnicidio como propuesta terrorista para defenestrar un proceso revolucionario, puede estar en lo correcto. Como decía el filósofo..” Piensa mal y acertaras”. Las últimas pruebas contra altos dirigentes de la MUD, que hacen vida aquí en el país, y otros en el extranjero, son argumentos, de que se está tramando algo. Que es lo sano, que las mismas personas que están siendo acusadas por algo tan delicado como es el magnicidio, se pongan a derecho y aclaren su situación. La técnica de huir hacia adelante y gritar “Al ladrón, Al Ladrón”.. Cuando es el ladrón quien grita, no es recomendable.
Venezuela, es un jugoso manjar, para el gran gendarme del mundo como lo es EEUU. Sus socios, hacen el juego, y apoyan acciones, en detrimento de los pueblos del mundo, que por alguna razón, están en la mira de los halcones. No he de extrañar, que las diversas manifestaciones terroristas de los últimos tiempos en Venezuela, obedece a una estrategia. Debilitar a la Revolución Bolivariana, es punto ganado para los EEUU, y su empeño en manejar nuestros recursos energéticos. Existen países vecinos y otros no tan vecinos que ayudan a ganar esos puntos.. ¿Qué puede hacer el país ante tamaña confabulación?, bueno; montar una ofensiva en todos los espacios, nacionales e internacionales. Cuando hablamos “Ofensiva” es utilizando en la practica un término deportivo, que reza; “La mayor defensiva, es una buena ofensiva”. Muy bien por el canciller Elías Jaua Milano, en su peregrinar por varios países y organismos internacionales, hablando sobre nuestras verdades y nuestros peligros. También es importante la aplicación de políticas informativas, en medios del estado y en las redes sociales divulgando la verdad verdadera.
La derecha reaccionaria, después de las denuncias formuladas por el sistema de inteligencia nacional ha reculado. No con esto quiere decir que, se ha esfumado por completo la estrategia terrorista. Mientras exista una gota de petróleo en nuestro subsuelo, siempre existirán lacayos y cipayos internos y externos comprometidos con el germen del terrorismo en contra de nuestro bello país. Hoy vemos a muchos delincuentes metidos a políticos, desgarrándose las vestiduras en procura de hacer ver su inocencia. Solo advertimos que la impunidad, es un factor determinante para borrar la justicia de cualquier país. Por eso, todo el peso de la ley debe ser aplicado a los terroristas que han tratado de profanar nuestro suelo. Las leyes deben ser aplicadas con máximo rigor, y así estaremos creando un precedente para el futuro.
Con impunidad no hay justicia, y sin justicia no existe Paz… Venceremos
