El mundo es azotado por un virus que en menos de cuatro meses, ha cobrado miles de víctimas, ha puesto media humanidad de cabeza y ha dejado al descubierto la debilidad de los programas de salud en muchos países.
curiosamente el país que ha sido bloqueado por más de sesenta años, es el que está dando la batalla en el combate contra el Coronavirus Covid-19 , pero claro, el arma de este ejército de batas blancas, que además está siendo solicitada su ayuda por países "según del primer mundo" no tiene difusión porque su premisa no es aniquilar ni causar daños colaterales, por el contrario llevan vida y cubren la necesidad de aquellas personas, que en muchas ocasiones no cuentan con un seguro de salud y están completamente desprotegidos por sus gobernantes. Lamentablemente quitarnos la venda de los ojos ha sido una dura realidad, porque para poder darnos cuenta, hemos tenido que leer en las redes sociales y medios de comunicacion, las alarmantes cifras de fallecidos que ha dejado está pandemia y los miles de contagiados que aun quedan y crecen cada día en estos países primer mundistas, que miran por arriba del hombro a países pequeños como los nuestros.
Y ya quisiéramos que hubiera sido sólo eso, lo que nos tocó descubir de la humanidad, tristemente hemos tenido que descubrir los sentimientos más profundos que puede guardar un ser humano. En nuestro pais está comenzando a emerger este fatal virus y como es normal un cúmulo de emociones se han desparramado por toda la población, miedo, angustia, ansiedad, muchas críticas. El gobierno tomó el control de la situación y giró instrucciones expresas, para tratar de contener la propagación del virus, dió recomendaciones y apeló a la solidaridad del buen venezolano, para levantar un muro contra el flagelo que azota al mundo, pero que nuestro país salga lo menos golpeado posible, no se trata de una nueva crisis provocada, no es un error político, no es una falla del sistema, no es una nueva sanción contra nuestro país. Es un virus que no tiene tinte político, no tiene color ni religión, no ve entre pobres ricos y clase media, ¿A quién culpamos? ¿Al hombre, a la naturaleza, al ambiente contaminado? ¿A quién? Lo único que sabemos es que sólo nosotros, podemos evitar que se siga propagando.¿Y que ha pasado en nuestro país? salió a flote en muchos la misería humana, inmediatamente las grandes farmacias y expendios de medicamentos pusieron inaccesible el precio de las mascarillas, alcoholes y desinfectantes para mantener la higiene y prevención del virus, los vendedores de frutas y alimentos incrementaron los precios de los mismos, limones y naranjas,como productos de lujo, aprovechándose del desconcierto y la alarma que ocasionó el descubrimiento del virus en nuestro país, claro nuestro pueblo consciente y curtido en la lucha, comenzó a inventarse sus propios tapabocas y el gobierno ha hecho campañas de concientización, enseñando como hacer un tapabocas y a fabricar su propio antibacterial, costureras de la patria y de buena voluntad, han ofrecido sus servicios gratuitos para la fabricación de mascarillas y distribuirlas en la población. Solidaridad y humanismo a flor de piel.
Por otro lado tenemos a un grupo de oposición para quienes ya es muy tarde, un virus peor ha hecho presa de ellos, y es el odio y el desprecio, ni en momentos como estos en que debemos dejar la ideologia y las posiciones políticas de lado, logran hacer nada ni por ellos ni por nadie,las críticas, las ofensas y esos sentimientos oscuros han aflorado en estos seres que han dejado de sentir sensibilidad por nada que no sean sus intereses . Sin olvidar al líder que los dirige, él haciendo apología de un poder que no tiene, sólo dice incoherencias, habla de los países que lo apoyan y a quienes les pedirá ayuda y sucede que justo estos países son los más afectados por el Coronavirus y no lo pueden controlar. Si Juan Guaidó gobernará este país ¿Estaría preparado para enfrentar está situación? la respuesta es no, y no es cuestión de ser chavista u opositor, es cuestión de poner al frente los intereses que él tiene, y creánme durante todo este año que él ha estado instalado en su gobierno imaginario , el pueblo no ha sido su opción, nos dicen que ha recibido dinero pero no sabemos para qué, sale hablando ante medios nacionales e internacionales, pero todos sabemos que no le habla al pueblo venezolano, que lo hace para seguir su campaña internacional de hacerles creer a los países que todavía lo apoyan que es alguien aquí, pero mentira es un ciudadano común con guardaespaldas pagados con el dinero que le otorga el gobierno de EEUU, y bueno otra cosa que lo diferencia del venezolano de a pie que lucha por su país, es el daño que le ha causado a su patria, esos son sus únicos méritos. Pero si en estos momentos vierámos un poco de humanismo en él y de solidaridad diríamos: Si, vale la pena darle un voto de confianza, quiere ayudar, pero mentira, está utilizando el momento para hacer campaña internacional, porque nacional nunca pudo ni podrá. Pero nuevamente nosotros ¡Venceremos! Sabemos que hay cosas en la naturaleza con la que no podemos luchar, pero este virus con la ayuda, la conciencia y la solidaridad de todos los venezolanos de buena voluntad lo podemos controlar.
Mientras tanto sigamos las instrucciones, acatemos las normas, no nos dejemos arrollar por el miedo, porque el miedo nos vuelve vulnerables a nivel físico y psicológico , y esa es una puerta que no debemos dejarle abierta al Coronavirus.