La historia se repite cada cierto tiempo. La teoría de Monroe, “América para los Americanos”...(gringos), madre de la OEA, distante de la realidad y el pensamiento de los pueblos latinoamericanos, arraigada en el neocolonialismo y pensamiento antibolivariano panamericanista que alertó el propio Bolívar: “Los EEUU parecen destinados por la providencia a plagar la América de miseria en nombre de la libertad”, intensifican espacios y vocerías para aplicar lo que en los 60 se llamó “macartismo”, teoría repudiable ideada por el Senador gringo Eugene Mc Carthy, para convertir en persecución y cacería de “brujas” a sectores de izquierda y visión progresista patriótica de América Latina.
A partir del gobierno de Obama después de Bush hijo, al parecer, lo único que ha cambiado en el gobierno de EEUU, ha sido el color de piel de sus cancilleres y presidentes (marrón por blanco y blanca por marrona es decir, Obama por Bush y Hilary por Condolezza), sin embargo, la política colonialista, interventora, golpista y amenazante sigue siendo igual y quizás en camino a ser peor...La reunión de la OEA con los cancilleres en Lima-Perú, ratifica la puesta en agenda de EEUU sobre países latinoamericanos tristemente en posiciones lacayas. Tomando en cuenta el rechazo casi total del mundo en el ataque terrorista de Israel contra una flotilla de ayuda humanitaria para el pueblo palestino, Ecuador propuso un pronunciamiento de la OEA contra este hecho y México, a través de su canciller, rechazó ésta propuesta inmediatamente acompañada por Canadá y EEUU (aliado de Israel).
Si analizamos los cambios acelerados por la política gringa en Latinoamérica, hay hechos que demuestran la presencia interventora de EEUU. Durante las elecciones de México, se cuestionó el “supuesto” triunfo de Calderón sobre la izquierda mejicana, el regreso al poder del derechista pro-gringo Alan García (compadre de Carlos Andrés Pérez) en unas elecciones de Perú cuestionadas sobre Olanta Humalla, golpe de estado “chimbo-legal” en Honduras, la traición del progresismo en El Salvador, el amedrentamiento contra el Presidente Álvaro Colom de Guatemala por acercarse a Venezuela, el impulso de un nuevo gobierno derechista en Panamá luego de un presidente moderado como Torrijos, el retorno de la derecha y “pinochetismo” en Chile, el intervensionismo militar en Haití con el pretexto de ayuda humanitaria luego del terremoto, rodeando al mismo tiempo a la República Dominicana y el evidente lacayismo con EEUU de Álvaro Uribe en nombre del pueblo colombiano (convirtiéndose en el Israel latinoamericano) al permitir 7 bases militares gringas en territorio de Colombia, al mismo tiempo de impulsar al diabólico Santos, como su posible sustituto en unas elecciones “extrañas” de conteo récord.
La agenda puesta en la mesa de la OEA impuso tres temas: el regreso de Honduras a la OEA, la preocupación por la carrera armamentista en Latinoamérica y la activación de la carta interamericana a países “corruptos” y violadores de derechos humanos (propuesta por 13 diputados republicanos de EEUU para aplicarla a Venezuela). Causa duda que se hayan silenciado temas como las leyes aplicadas contra emigrantes latinos en EEUU, la extradición a Venezuela del terrorista confeso Luis Posada Carriles, las bases militares en Colombia, el retorno de Zelaya a Honduras o la presencia militar gringa en Haití, entre otros puntos importantes. Luego de la reunión de la OEA en Perú, Hilary Clinton realizará su periplo viajero por Latinoamérica para tratar de seguir imponiendo la agenda de media luna con tendencia a luna llena gringa...
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