Junto a los trabajadores, indígenas y sectores populares bolivianos
¡Movilización para aplastar la conspiración oligárquico- imperialista en Bolivia!
Los trabajadores, campesinos, originarios y pueblo boliviano acaban de protagonizar una impresionante movilización masiva para enfrentar la conspiración oligárquico imperialista que apunta a dividir Bolivia para quedarse con sus más importantes recursos naturales.
En la propia Santa Cruz la movilización impidió que se hiciera el fraudulento referéndum de la oligarquía en muchos distritos. En Montero, segunda ciudad del departamento, el 60% no votó. Algo similar ocurrió en Camiri. En San Julián y Yap acani prácticamente se impidió el referéndum. Los vecinos movilizados capturaron las ánforas o urnas electorales y descubrieron que, sin que nadie votara, ya estaban llenas de votos por el SI, revelando así el grosero fraude. En el inmenso barrio Plan 3000 de Santa Cruz los pobladores enfrentaron a los fascistas de la Juventud Cruceñista y la represión policial que causó heridos y un muerto.
En el resto del país hubo marchas gigantescas y combativas. En El Alto un cabildo de centenares de millares de trabajadores, campesinos, estudiantes y gremiales pidió la renuncia del prefecto José Luis Paredes, por ser cómplice de los oligarcas cruceños. Además se exigió la expropiación de las empresas de los oligarcas. En Oruro la movilización fue encabezada por mineros y estudiantes y el dirigente de la COD (Central Obrera Departamental) Jaime Solar es afirmó que "vamos a ir a la revolución si es preciso por defender la unidad del país" y que están "listos a trasladarse a Santa Cruz para aniquilar a las logias oligárquicas". En Potosí se reunieron decenas de miles de campesinos. En Cochabamba fue la movilización de obreros y campesinos más grande de su historia, en una amplia avenida, abarcó 70 cuadras y 500.000 personas que exigieron la revocación del mandato del prefecto derechista de ese Departamento Manfred Reyes Villa.
Esta movilización inmensa logró que el referéndum oligárquico fuera un fracaso que solo intentan disimular con cifras falsas y proclamando por la mayor parte de los medios de comunicación en sus manos un supuesto triunfo con un 82%, ocultando una abstención mayor al 40% del electorado y un fraude masivo.
El autonomismo de los oligarcas es contra el proceso revolucionario
Con ayuda del imperialismo, intentan disfrazar su referéndum autonomista de "democrático". Pero, no tiene nada de democrático el autonomismo de los oligarcas. Quieren hacer autónomos al menos 4 departamentos de los 9 que componen Bolivia, no para que el pueblo pueda decidir mejor sobre sus autoridades locales, sino para quedarse con los recursos naturales. Los 4 departamentos: Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando, llamados "la Media Luna" por su forma geográfica, concentran las mejores tierras y los hidrocarburos. Y los jefes autonomistas, comenzando por el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas; y por el presidente del Comité Cívico, Branco Marinkovic, son terratenientes. El fascista Marinkovic, hijo de un fascista croata, es el mayor terrateniente del país. Se calcula que su familia posee 300.000 hectáre as entregadas por centavos por las dictaduras, además de fábricas de aceite. Representan a 100 clanes oligárquicos que poseen 25 millones de hectáreas, el 80% de la tierra fértil del país. Eso es lo que defienden con la "autonomía". Por eso el estatuto autonómico de Santa Cruz dice que la potestad sobre las tierras y sobre los hidrocarburos y otros minerales corresponde a las autoridades del Departamento. O sea, a ellos. Entonces la principal función del estatuto autonómico es impedir que avancen las nacionalizaciones de los recursos básicos y la reforma agraria.
Los "autonomistas" de la Media Luna no aceptan los reclamos de autonomía de los pueblos indígenas que si tiene profundas razones históricas, ya que han sido despojados de sus tierras ancestrales desde hace 500 años. Por eso la "autonomía" de los oligarcas c ruceños no tiene nada que ver con otros reclamos autonómicos legítimos de pueblos oprimidos de otros lugares del mundo, como por ejemplo del País Vasco en España o del Tibet en China.
Por eso también desconocen la nueva Constitución, aprobada por mayoría absoluta de la Asamblea Constituyente en diciembre de 2007, que otorga autonomías a los Departamentos, pero también a los 36 territorios indígenas (entre ellos, los guaraníes que están en la principal zona gasífera y reclaman crear el 10 Departamento), establece que la propiedad de los hidrocarburos es del Estado Nacional, y afirma que se hará una reforma agraria en base a las tierras "que no tengan una función económico social" y a latifundios que sobrepasen las 10.000 hectáreas.
Más nacionalizaciones
El 1º de mayo Evo Morales anunció la nacionalización del 100% de la telefónica ENTEL y mayor control accionario de las petroleras. Lo de las petroleras lo hizo en el marco de su política de empresas mixtas y llegando a un acuerdo amistoso con Repsol. Sin embargo, estas nacionalizaciones, aunque limitadas, son pasos adelante. Y hay que señalar que, como lo ocurrido en Venezuela con Sidor, es un triunfo obrero y popular. Los movimientos sociales vienen reclamando con fuerza profundizar las nacionalizaciones. Así lo hicieron los mineros de Huanuni, la COB de Oruro, la Fejuve (Federación de Juntas Vecinales) de El Alto e incluso de la CSUTCB (Central Sindical Campesina) que tiene dirigentes del MAS y que reclamó nacionalizar también las grandes empresas productoras de aceite. El pueblo de Camiri, que precisamente está en el Departamento de Santa Cruz, realizó hace un mes y medio una huelga gen eral exigiendo la nacionalización total de las petroleras.
No es pactando ni conversando con ellos como se puede derrotar la conspiración oligárquico imperialista.
El presidente Evo Morales denunció la ingerencia directa de la embajada norteamericana. Por su parte, el jefe de la Iglesia, cardenal Terrazas, apoyó públicamente el plebiscito oligárquico. Tenemos unidos entonces al imperialismo y a la Iglesia en apoyo a la conspiración.
Las radios "demócratas" y "autonomistas" de Santa Cruz y los dirigentes en sus discursos, hablan contra "los coyas, engendros de llamas", un indignante discurso racista, que va acompañado de hechos: apaleamientos a personas por el solo hecho de tener aspecto indígena (indignante siempre, pero, además ¡en un país en que el 60% es indígena!).< /p>
Sin embargo Evo Morales siempre llama a conciliar con ellos. Durante todo el período previo al referendo separatista, impulsado por la oligarquía santacruceña, el gobierno de Evo Morales se limitó a minimizar la importancia de dicho referendo con argumentos legalistas, y a buscar la intervención de la OEA para posibilitar el diálogo con la oligarquía. Con el argumento de "evitar enfrentamientos" el gobierno frenó públicamente las movilizaciones. A las Federaciones del Trópico, de los cocaleros, que querían marchar a Santa Cruz con 20.000 campesinos organizados, les dijo que no lo hicieran. También intentó frenar las movilizaciones en la propia Santa Cruz.
Por eso Evo Morales, en su discurso del domingo 4 a la noche señaló su "admiración por esas movilizaciones espontáneas en defensa de la legalidad y por l a igualdad entre los bolivianos". Efectivamente fueron movilizaciones totalmente independientes del gobierno, y en muchos casos sobrepasando a los propios dirigentes de las organizaciones sociales.
Y ahora, después de lo que el propio Evo Morales dice que fue un fracaso del referéndum, y de la enorme movilización popular que dice "admirar", vuelve a llamar a los prefectos oligarcas a negociar para llegar a un acuerdo.
Esta política del gobierno de Evo Morales responde a la concepción del "capitalismo andino", según la cual habría sectores capitalistas nacionales que podrían acordar con el gobierno para hacer un país independiente. Pero la realidad demuestra en forma contundente que esto no es así. La conciliación con ellos fue lo que les permitió fortalecerse, levantar cabeza, hasta permitirles hacer este referéndum. Pero, además quieren seguir adelante con los otros 3 departamentos, Tarija, Pando y Beni, e incluso, luego con Cochabamba y Chuquisaca.
¡Basta de conciliación! ¡Aplastar a la oligarquía!
Pese a su derrota parcial, la conspiración sigue adelante. Y el peligro más grande es que el gobierno de Evo Morales concilia con ellos y les permite seguir con sus planes. Los hechos mostraron que la lucha no es de regiones, ni de etnias. Es lucha de clases. La burguesía, la iglesia, el imperialismo y la oligarquía terrateniente se unieron para intentar derrotar al proceso revolucionario. Ellos le declararon la guerra a las mayorías populares de Bolivia. Ellos demostraron que no se detienen ante nada y que sus medios son el fraude, la mentira y la violencia.
No es conversando como puede derrotárselos. Y s i el gobierno negocia con ellos estarán en peligro todas las conquistas populares y el mismo proceso revolucionario que vive Bolivia.
Pero la inmensa movilización del 4 de mayo en la que se impuso el frente único obrero y campesino y popular para enfrentar a la sedición oligárquica, mostró la fuerza inmensa del pueblo. La COB, la CSUTCB, las Fejuve, las Federaciones del Trópico (cocaleros), la CIDOB y CONOMAQ indígenas, tienen que unir sus fuerzas para organizar la autodefensa, continuar la movilización hasta aplastar la sedición oligárquica e imponer los reclamos del pueblo oprimido. Exigir al gobierno todos los medios materiales a los sindicatos obreros y campesinos, las radios, la TV, los medios de autodefensa, para aplastar a la sedición oligárquica.
Hay que echar a Manfred Reyes Villa en el Departamento de Cochabamba. Y, como lo señala la COB de Oruro, llegó la hora de aplicar a pleno la "agenda de octubre", los reclamos de la insurrección popular de octubre del 2003 que derrocó a Sánchez de Losada: quitarles en todo el país las tierras a los oligarcas, incluyendo a los de Santa Cruz, de completar las nacionalizaciones al 100% de control y propiedad de la empresa estatal YPFB y también de imponer un salario mínimo acorde con la canasta familiar.
La batalla de Bolivia es crucial para todos los trabajadores y oprimidos latinoamericanos. Los "autonomistas" cruceños, al igual que Uribe en Colombia, son instrumentos directos del imperialismo para intentar someter a los pueblos latinoamericanos que se levantan contra el imperio. La OEA y la mayoría de los gobiernos latinoamericanos, especialmente Lula, Kirchner, Bachelet, etc, operan también para hacer poner de rodillas a Bolivia para que se someta a los designios imperiales y siga proveyendo gas barato. Por eso, hay que repudiar cualquier intervención de la OEA, ministerio de colonias de Estados Unidos, como bien la calificó el Che.
Son los trabajadores y pueblos latinoamericanos los que tienen que dar todo el apoyo al pueblo boliviano. Llamamos especialmente a los gobiernos que se proclaman antiimperialistas, como Cuba, Chávez de Venezuela y Correa de Ecuador a ofrecer solidaridad material a las organizaciones obreras y populares bolivianas para que puedan defenderse de la agresión fascista.
Llamamos a todas los sindicatos, organizaciones campesinas y populares a difundir lo que ocurre en Bolivia y movilizar en solidaridad con el pueblo boliviano.¡Viva la lucha obrera, indígena y popular boliviana!
¡Aplastar a la conspiración oligárquico imperialista!
8 de mayo del 2008
Unidad Internacional de Trabajadores (Cuarta Internacional)