El Doctor Andrés Giussepe, presidente de la Asociación Civil Víctimas de la Guerra Económica y Coordinador Nacional del Movimiento de Profesionales de Venezuela (MPV), insiste, el Ministerio de Finanzas en coordinación con el BCV y la Asamblea Nacional (todos chavistas) deben buscar estrategias de reingeniería financiera para crear e inyectar dinero a la economía para pagar pasivos laborales y aumentos de salarios para el sector público y privado en los términos que establecen los Art. 80, 91 y 92 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Porque desde una perspectiva Postkeynesiana, el dinero es el componente esencial del sistema económico. Es un *flujo endógeno* que se genera dentro de él y es necesario para la puesta en marcha de la producción (factor capital + factor laboral).Valga decir, no sólo son necesarios los empresarios estimulados con créditos y dólares para importar bienes intermedios y finales con fines productivos y comerciales (80%), también son necesarios los trabajadores estimulados y con capacidad de compra de los bienes que los empresarios ofertan en los mercados.
En ese sentido, el dinero es fundamental para estimular la demanda agregada interna (Consumo + Inversión + Gasto Público), mejorar el empleo y del nivel de producción. Su creación e inyección no depende del stock de activos financieros, riquezas en propiedad de los ricos o de reservas internacionales como lo sugiere la teoría monetarista neoclásica y neoliberal (respaldo en términos de composición de cartera).
El mejor empleo del dinero en tiempo de crisis, déficit fiscal y depresión como la que vive la Venezuela actual, limitada técnica y financieramente por bloqueos y Medidas Coercitivas Unilaterales (MCU) imperiales, es aumentar las "remuneraciones de los empleados y obreros" a un ritmo mayor que los "excedentes de capital" (empresarios) y el cobro de impuestos indirectos (Gobierno). Es una política económica con tendencia socialista y no capitalista, aunque al final se estimula la producción en el sistema imperante que es el capitalismo.
Asimismo, para que el Gobierno actual salga de su estatus de incumplidor Constitucional de los derechos laborales que mantiene desde el año 2014, cuando comenzó a decretar salarios por debajo de la canasta básica (Art. 91) y pensiones y jubilaciones por debajo del "salario mínimo vital" (Art. 80), recomendamos mejorar la creatividad para diseñar y ejecutar instrumentos financieros y crediticios junto al sistema bancario interno. De tal forma, se aumentaría la liquidez monetaria y haría un uso efectivo del circulante para reactivar la producción, mantener el nivel del salario mínimo vital, que al final, es garantizar una mejor calidad de vida de la población.
Una protección que debe venir acompañada de acciones que reactiven la producción de bienes y servicios nacionales, favoreciendo su consumo y no la demanda de divisas, que aumente el empleo productivo público y privado, hasta llevar a la estabilidad económica en el mediano plazo. Pero sea como sea, el BCV debe volver a calcular y publicar el valor de la canasta básica y el Gabinete Economico pagar el salario mínimo vital Constitucional.
Recordemos, que el "salario mínimo vital" es un derecho económico en forma de ingreso conferido por la Constitución a todos los trabajadores, pensionados y jubilados de forma individual, que debe garantizarse y cumplirse de manera incondicional, es decir, INDISTINTAMENTE del bloqueo, MCU, la corrupción pública o limitaciones técnicas de organismos públicas.
