En la escuela nos enseñaron por siempre que las rayas en el territorio Esequibo de nuestro mapa venezolano significaba "zona en reclamación", con el tiempo lo fueron desapareciendo visualmente para robarlo poco a poco, incluso en algunos centros educativos, pero, nunca es tarde si se toman las acciones correctas a tiempo. En la coyuntura de la geopolítica actual y el comportamiento mediático, reaccionó la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), como parte del Estado Venezolano para exigir la difusión correcta de nuestro mapa territorial, el cual, con el anti-venezolanismo puesto en práctica interna y externamente, viene siendo cercenado de manera visual en diferentes medios de comunicación, esto, como parte de la guerra de cuarta generación que apunta de manera recia contra Venezuela.
Desde hace un tiempo, ciudadanos de a pie venimos exigiendo al Estado Venezolano corregir este irrespeto y así podríamos colocar algunos ejemplos de cómo se realiza esta práctica , en ese sentido, uno de los más evidentes, lo realiza el canal internacional de noticias CNN, que no sólo cercena el Esequibo de nuestro mapa, sino que corta también parte de la Guajira, esto lo hacen igualmente otros canales de televisión "so pretexto" informativo de algún hecho ocurrido desde Venezuela. Este atentado visual, es parte del plan de la media luna territorial que vienen promoviendo los apátridas y "pitiyanquis" arropados en sus mentes neo-coloniales. Históricamente a Venezuela le arrebataron territorio por situaciones similares, solo que el tiempo, el avance tecnológico y la conciencia nacionalista presente alertan para alzar su voz.
Haciendo un repaso al pasado encontramos algunas acciones ocurridas con nuestro Esequibo:
Entre 1835 y 1841, Robert Schomburgk, delimita por cuenta inglesa la supuesta frontera fijando postes de demarcación en las bocas de los ríos Amacuro y Barima, por lo que hubo una enérgica protesta de Venezuela exigiendo explicaciones sobre la línea Schomburgk, a la que respondió el representante diplomático británico Daniel Florencio O’Leary (antiguo edecán de Bolívar y prócer de la independencia colombiana) en que la postura de Schomburgk era provisional, sujeta a revisión de las partes. En los años sucesivos fueron reiteradas las protestas venezolanas en la marcación de esos postes. Los ingleses trataron siempre de penetrar el territorio venezolano incluso hasta el río Orinoco.
El 25 de enero de 1899 se instala un tribunal arbitral en París, Francia (integrado por dos norteamericanos, dos ingleses y un ruso), como abogado de Venezuela, figuró el expresidente de EE.UU. Benjamin Harrinson. En octubre de ese año se dicta el laudo que le otorgó a Gran Bretaña 159.500 kilómetros cuadrados de territorio venezolano, y casi incluyen al Orinoco (el mayor reservorio petrolero en la actualidad de Venezuela). Luego del fallecimiento de uno de "los defensores" de Venezuela en 1948, fue encontrado entre sus papeles un documento, que revelaba la negociación secreta que provocó la sentencia despojadora. Este documento dio el argumento de declarar irrito el laudo y continuar con la reclamación. En 1962 se plantea la vigencia de la reclamación venezolana sobre el territorio Esequibo. En 1966 se firma el acuerdo de Ginebra, entre Venezuela, Gran Bretaña y la República Cooperativa de Guyana, en el que las dos últimas reconocen la reclamación territorial de Venezuela. La vía diplomática actual, es el camino para recuperar nuestro Esequibo en tiempos en que los apátridas apuestan a la guerra.
