No es volando los pertrechos de guerra, como hizo Ricaurte en San Mateo, como se va a salvar la V República. No es utilizando armas convencionales como se va a combatir en una "guerra no convencional". No es actuando pueblo y ejercito separados como los patriotas podemos enfrentar a los enemigos internos y externos que nos atacan.
En una guerra económica se combate con acciones económicas. Una guerra psicológica con mensajes y actos dirigidos a poner en evidencia las mentiras e imponer la verdad. Las guerras de IV Generación se libran en los campos del ciberespacio, pero los combates se materializan en el diario vivir de los ciudadanos de a pie que constituyen las mayorías nacionales.
Hechas las disquisiciones en los dos anteriores párrafos, entramos a justificar el titular de este artículo, con el cual aspiramos dejar en los que lo lean, una propuesta de acción para enfrentar la guerra económica que sufrimos la gran mayoría del pueblo venezolano y que han generado las medidas de emergencia que ha tomado el gobierno nacional para enfrentarla.
Si partimos del hecho, previsto en nuestra carta constitucional, que considera a la Alimentación, a la Educación y a la Salud como derechos fundamentales que El Estado debe asegurar a todos los ciudadanos venezolanos y si consideramos que estamos viviendo un proceso revolucionario para concretar esos postulados, donde un pueblo armado en unión cívico-militar debe garantizarlos; entonces podemos justificar las acciones de guerra económica que a continuación proponemos:
1.-Los combates se libraran en las Escuelas Públicas y Privadas de todo el territorio nacional, donde todas las familia de cada estudiante inscrito, recibirán los pertrechos alimenticios mínimos de subsistencia para combatir a los enemigos Hambre y Pobreza que enfrentan nuestros patriotas.
2.- Cada 15 días y utilizando las mismas logísticas de los exitosos operativos electorales que la población ya conoce, las FANB tomarán las escuelas del país y en conjunto con las estructuras organizadas del Poder Popular, como son los CLAPS, distribuirán a los representantes de cada estudiante, según el núcleo familiar, la cantidad de alimentos básicos necesarios e indispensables para mantener la vida, a precios que en su totalidad no comprometa más del 50% de los ingresos que el núcleo familiar perciba. Considerar el Salario Mínimo Mensual como referencia para colocar los precios.
3.-Los alimentos a distribuir serán los que provean los CLAPS, las empresas productivas o importadoras de alimentos financiadas por el Estado, y el 70% de los producidos por las empresas privadas que reciban algún tipo de subsidio por parte del Estado. Serán los efectivos de las FANB y en sus transportes donde se trasladaran los alimentos a las Escuelas.
4.-A excepción de lo recaudado por los alimentos colocados por los CLAPS, las cantidades de dinero producidas por las ventas, será responsabilidad de las FANB que estas lleguen a manos de los proveedores de los productos, según las facturas emitidas al momento de habérselas entregados.
5.-Los alimentos que, por la razón que sea, no puedan ser distribuidos en el lapso previsto en el operativo de distribución (sugerimos que sea fijo en todo el país) quedaran en manos de los CLAPS, quienes deberán responder por ellos y por la recaudación del dinero según su costo)
6.-Toda persona o institución que trate o logre comercializar los alimentos, a precios superiores a los fijados en los operativos quincenales, serán considerados como enemigos y/o delincuentes y como tales serán tratados por las instituciones del Estado.
7.-Los combates aquí descritos serán mantenidos hasta el total cese de las hostilidades contra la patria, los enemigos acepten la capitulación y firmen un armisticio.
Solicito a las personas que lean esto, hacer aportes para enriquecer su contenido, de manera tal que podamos convertirlo en un proyecto que presentemos al gobierno nacional para su implementación. Enviar a mi correo: