¿Cómo te explico, pitiyankee?

Coño, de verdad: cómo te explico que te metas por la senda democrática. Como te hago entender que más nunca volverán. A cual santo debo apelar en mis plegarias, para que se dé el milagro de que lleguen a unas elecciones con dignidad y sin güiros bajo el brazo. Cuando serán merecedores de ser llamados adversarios políticos y no “petit yankees”, cipayos, lacayos, vende patrias o traidores.

La oquedad moral que tienen es inmensa; el egoísmo anula sus voluntades y solo los estimula el dinero, la apariencia, el qué dirán, las cámaras, las encuestas y el status quo. Todo ello, logrado a pulso, pero a pulso de pillaje, truhanería, caminos verdes, indolencia y el más arrastrado deshonor: la traición de la Patria.

Cómo te explico que cuando salivas porque un grupo de viles habla de “volar” al Líder Comandante, estás saboreando tu propio epitafio. Cómo rayos te conmino a que reconozcas en este tipo de aventuras, el camino de tu propia destrucción. Apenas te daría tiempo a reír, mucho menos a probar un “güisquicito”. El huracán Ike sería una brisita ante la legítima y bendita furia popular que caería sobre ti.

¿Acaso no recuerdas, infeliz, cuanto te cagaste al ver al Vergatarísimo Pueblo rodeándote en Miraflores? ¿No te acuerdas como aguantamos rodilla en tierra el paro patronal y el sabotaje petrolero? ¿Te sientes guapo y apoyao por la IV Flota nadando en tu retrete craneal?

Cómo hago pa´ que entiendas que cuando vengan los marines, te van a caer a tiros así le peles las nalgas o te “vuelvas agüita” con ellos ¡Estúpido maricón! Te crees audaz porque amenazas con guarimbas y trancas, con desabastecimiento y especulación, con ollas y manipulación mediática, con manitos blancas y pimpinas. Pero eres un redomado cobarde que con toda seguridad querrá estar a buen resguardo cuando haya que expulsar a los yankees si osan venir. No tienes con qué (te faltan bolas).

Dime cómo te desintoxico el alma del opio mediático de cual eres adicto. Dime como te arranco pa´ siempre esa falta de honor, esa falta de amor por la Patria. Cómo hago para que no te sigas estrellando contra nuestra octava estrella en el tricolor.

Cómo te explico FEDETRÁCALA, banqueros que desbancan al Pueblo, empresarios agiotistas y toda tu pila de asociados, que deben ayudar al Pueblo a progresar, no a joderlo, por que al final los primeros perjudicados son ustedes mismos. Ustedes no están acostumbrados a pasar vainas.

Cómo hacemos con Cloacavisión y demás medios requetegolpistas, impunes y reincidentes, para que dejen de utilizar el espacio radio eléctrico del Pueblo para engendrar patrañas, intrigas y calumnias.

Cómo te explico, Dietrich, que la violencia no tiene distingos y que sus causas son las mismas desde que el mundo es mundo. Bébete encapillado tu vinagre epistemológico. Saludos a Baduel.

Cómo le explico, General Trigo, que las mieses de su conciencia ha sido segadas por el imperio yankee y que ha perdido esta batalla sin echar un tiro. Al indio Aymara Presidente Morales, le sobra raza y apellido para defender la Patria Boliviana sin su estorbo.

Cómo te explico, yankee inmundo, que mi sangre Guariqueña hará honor al himno de mi estado…”Si huellas mi Patria guerrero invasor”.

De una cosa si estoy seguro…falta de pedagogía no es.



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Placido Delgado


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