14.9millones de personas votaron el 14 de abril en 39.018 mesas. Un promedio de 384 votos por mesa. Maduro ganó por 230mil votos. Si estos votos se hubiesen robado, no se hubiesen podido robar en una sola mesa, eso es obvio, entonces calculemos, ¿cuantas mesas hay que manipular para robar 230mil votos?. Supongamos que en una mesa en la que Maduro no iba a sacar ni un voto de pronto aparece con todos los votos para él.
En ese caso divides 230mil entre 384 y obtienes 599 mesas en las que Maduro debe aparecer con el 100% de los votos. Como hubo un 80% de participación y en todas las mesas votó gente real, resulta imposible meterle 384 votos falsos a una mesa. Hay que pensar en algo más conservador.
Supongamos que se metieron 20 votos en varias mesas hasta lograr 230mil votos adicionales por Maduro. En ese caso 11500 mesas deberían presentar inconsistencias entre las papeletas y las actas. Ahora imagina que 11.500 de 39.018 mesas son inconsistentes. Eso quiere decir que casi 1 de cada 3 mesas es inconsistente. Si tomaras una muestra aleatoria del 10%, es decir 3.900 mesas, cerca de 1300 mesas deberían presentar problemas.
Pero se auditaron 54% de las mesas escogidas al azar y ni una, repito, NI UNA presentó inconsistencias, entonces ¿Que hace creer a estos caprichosos malcriados que puede haber inconsistencias en el 46% restante?
Con todo y eso el CNE aprobó pasar los próximos 30 días fajado contando 400 cajas diarias para no encontrar nada porque los caprichosos no saben nada de estadística.
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