Creo definitivamente que entre los políticos y de estos quienes dicen ser analistas, se pueden hallar los tipos más dignos de censura y hasta rechazo. No son nada distintos que esos, que hasta presumen de genios, aunque los hay del mal, agentes de publicidad capaces de decir lo que necesario para lograr sus fines, los del mercenario, para vender sus productos.
Un viejo amigo me contó una vez que en una conversación que tuvo con Renny Ottolina, este le habló del poder de la publicidad. Y de cómo esta, pudiera hasta hacer presidentes. Era un tiempo cuando los políticos y la política, ingenuamente ponían más énfasis en las concentraciones o mítines, el uso de afiches, hasta vallas y el conversar con la gente para convencerla de sus razones. Según él, mi amigo, todavía Eduardo Liendo no había escrito "El mago de la cara de vidrio", o por lo menos no la había publicado, Renny le dijo, desde la televisión, , podemos orientar y hasta disuadir al votante. Si podemos hacerle consumir lo que anunciamos por qué no hacerle votar por quién desde ella nos propongamos.
-"¡Mira!" le dijo Renny, tomando una pequeña botella verde con un líquido también ligeramente verde en su interior, "esta bebida es lo más parecido a un purgante, pero cada vez que la anuncio, las ventas suben al cielo. Cuando quienes la producen creen lograda su meta de controlar el mercado, dejan de anunciarla. No tardan en volver a contratarme para que la anuncie porque el público, al no verla en pantalla y no escuchar lo que de ella decimos, pierde interés y deja de adquirirla".
En buena medida, por aquella convicción y el poder que Renny tenía de llegarle al público, se lanzó como candidato presidencial y al momento de su muerte, estaba muy bien ubicado entre los votantes, aunque si bien es verdad, todavía las encuestadoras no se ocupaban mucho de la política.
Lo cierto es que la publicidad que usa sin medida la mentira, pues su propósito no es hacer a la gente mejor, ni reconocer los valores de esta, se trata de vender ideas e imágenes, indistintamente de quien o que se trate, sino de servir a quién la paga, por eso Renny decía aquello del refresco, ahora está haciendo su juego en la campaña electoral. Por ejemplo, Larisa Acosta, creo así se llama la joven del microprograma "Aun clic", que para ser micro parece como muy largo y hablado al estilo atropellado, comentando la propuesta de Falcón, relacionado con lo de dolarizar la economía, la que por cierto quien esto escribe no comparte, pero tampoco que se deba rebatir con simplismos y mentiras, quizás por aquello que lo importa es la meta alcanzar, que para ella pudiera ser ganar, pero para nosotros es convencer. Dijo ella que de darse lo que Falcón propone, que los usuarios debamos pagar los servicios con el dólar, obligaría a buscarlo y comprarlo a quien lo posea según la tasa paralela. Usó otra expresión que ahora no recuerdo, pero fue algo parecido a eso o que significa lo mismo. Con lo que sugirió que entonces, los servicios nos costarían un ojo de la cara, mucho más que la astronómica cifra que ahora cuesta un pollo. Falcón y cualquier otro candidato, con o sin dolarizar la economía, subirá el precio de los servicios; eso es inexorable. La gasolina también subirá, como que las empresas petroleras extranjeras, empezando por la gringa Chevrón, aumentarán su poder en el negocio petrolero venezolano. Pero decir mentiras y poco inteligentes también es dañino.
Pero la gente de Falcón también anda desatada metiendo mentiras, como que al dolarizar la economía todo se nos pondrá al alcance de la mano. Algo como que una hada madrina agitara su varita de virtud y hará que le economía tome su equilibrio por arte de magia y esta estría en convertir al dólar en la moneda de cambio en la operaciones internas en el mercado nacional.
Quienes en la oposición están por el golpe de Estado, la invasión, derogación de la constitución vigente y la creación de un estado de violencia que haga todo realizable y por supuesto les estorba la candidatura de Falcón y todas las candidaturas, porque la salida electoral les estorba, andan diciendo mentiras de todo calibre. Debe quedar claro que, hay un sector opositor, el más radical, que no es que no quiera elecciones en las condiciones de ahora, que en verdad no son las mejores para la oposición, pero si fue posible las alcanzase si ella hubiese estado interesada, pero simplemente que no les conviene elección ni salida legal alguna. Sabe que aun ganándole a Maduro, que pudo ser tan fácil como pegarle un tiro al suelo, sin cambiar al CNE, el acceso al poder no le es suficiente para satisfacer las demandas, exigencias y ambiciones de sus promotores, el gobierno y capital de los EEUU. Por esto no quieren elecciones, ni apoyan a Falcón. Por ahora, lo que les interesa, si no pueden producir un cambio violento antes del 20 de mayo, es que se produzca una abstención descomunal que justifique sus planes ilegales y violentos. Por eso, todo que lo dicen sus voceros, como que en Venezuela hay una dictadura, cuando en verdad más bien parece que aquí prevalece el dejar hacer, la incompetencia, la debilidad estatal y hasta como indiferencia de este frente a tantas cosas; o que el CNE es de por sí tramposo, como también lo es todo el sistema electoral, y hasta que Falcón es un candidato del gobierno, algo así como una comparsa o forma parte de una comedia, son puras mentiras que periodistas, diarios, televisoras, dicen sin pudor alguno ni respeto por sí mismo.
La candidatura de Falcón, como las otras, no es más que el resultado de la realidad del cuadro político venezolano. La oposición nunca ha sido un universo unido, primero porque eso no es posible en el mundo real. Y esto es válido también para la izquierda y eso que se suele llamar el chavismo. En Chávez, hoy se justifican muchas tendencias. La candidatura de Reinaldo Quijada, en cierto modo se justifica en el descontento, como él mismo lo admite, que existe dentro de ese universo con respecto al gobierno. Hay otros grupos que no se han identificado con candidatura alguna, que dicen ser los auténticos exponentes del legado de Chávez. Y al margen de lo que uno crea, eso es una auténtica expresión de la realidad.
En el bando opositor ha habido desde hace años posiciones encontradas con respecto a la forma de lucha por asumir. Hace muy poco, el propio Ramos Allup, aseguró que ellos, la gente de AD, iría a la contienda electoral sin duda alguna. Tal como lo fueron a las de gobernadores, cuyos resultados obedecieron a la abstención de sus militantes por la prédica constante contra el CNE y la opción electoral. Pero luego se retractó por razones distintas a las que alega y a sabiendas que sería cuesta arriba convencer tan pronto a su electorado de la conveniencia de votar. Pues cuando trata de justificarse miente. Por eso, muchos de sus compañeros ahora se han inscrito para apoyar candidaturas presidenciales como la de Falcón y a las elecciones municipales y legislativas regionales.
El recurso de la mentira, contrario al proceder de la gente de buena fe, la religión, ciencia, los políticos que se respetan así mismo y a su gente, se usa contra la salida electoral ,porque, como ya dijimos, prefieren la opción ilegal para lograr a corto plazo lo que quieren, hasta disponer de la vida de los contrarios a quienes odian. Y una de las mentiras que enarbolan, que hasta infantil es, porque cuando el odio abunda no necesita mucho racionamiento y sensatez, es presentar al potencial votante, sobre todo aquel que pudiera hacerlo por Falcón, como si este es un simple agente o monigote puesto por Maduro.
Pero lo más triste de todo es que uno lea cosas donde gente que uno presume recta e inteligente, caiga en ese juego. Y nos interesamos en hablar de esto, porque estamos muy claros que la peor de las posiciones que puede asumir el venezolano ahora el 20 de mayo, es no votar. Abstenerse, aun cuando es verdad que pareciera que ninguno de los candidatos nos ofrece ninguna garantía de mejora o ideas para salir de esta crisis, es ayudar a servirle la mesa o abrirle las compuertas a las fuerzas enemigas del país, su tradición e historia e interesadas en herirnos sensiblemente y hasta acabarnos como nación, para hacer caída y mesa limpia. Y para preparar este escenario la mentira es la primer arma.