El ultraje cometido por la oposición golpista en el mundo (hay muchas, con el mismo objetivo) no tiene precedente en esta etapa necesaria de conversación del planeta y solo es comprensible, cuando se acepta que una parte de la generación se descompuso a tal extremo, que perdió la dirección de principios que debería tener una especie que se transformo en delincuentes.
No es fácil aceptarlo, menos cuando estás afectado directamente y siendo un ser conciente con la necesidad de valores promedio; vivimos confundidos entre conductas delincuenciales, aceptadas como normal; porque los que tienen ingerencia para el orden; se han desordenado de tal forma que se confunden y no hay manera de hacerlos volver a la sindéresis.
La dirección que tenemos de ilegalidad, rompe cualquier parámetro y se notan más los que se deformaron, que lo que hacen intentos por que no se pierda todo.
Están dadas las condiciones, para aceptar por necesidad y también por omisión; ante cualquier situación se delinque con normalidad; con maramucias tan evidentes que hasta los inocente se dan cuenta que la forma en que te roban es aprobada por todos y se hace enseñanza a una generación que va creciendo viendo cómo se deterioran los valores de una PATRIA.
La muestra que aquí no hay intención de corregir nada, es lo que está pasando en las bombas de gasolina, en plena vía pública en la cara de todos: aunque cada una tiene un modus operandi y no en todas afecta de la misma forma.
Imagino que los que tienen soluciones de referencias y recomendaciones, no asisten a esos lugares; tienen quien lo haga por ellos: por lo tanto no ven todas las maramucia acumuladas que están en la componenda y ante tus ojos te atracan y a todos los que pasan por tu lado y nadie dice nada: son cómplices y están inmune en la soledad de su cápsula movil, viendo lo que le permite la distancia que es bastante, mientras pasa el tiempo y llegas al centro de llenado: después de haber visto todo y atado a tu volante sin decir nada; ves donde se confunde el delincuente con la autoridad y por conveniencia política le dan nombre de colectivo; es la forma que tienen para desacreditar las luchas populares; así como lo han hecho con el comunismo, los circulos Bolivarianos y cualquier símbolo de unidad que pueda intentar la alta política en la PATRIA.
Es tan alarmante el grado de descomposición, que ya es aceptado y se extiende hasta otros áreas como si fuera una realidad que no tiene regreso y estamos destinados a qué de ahora en adelante se mantendrá en descomposición a menos que una reacción de conciencia se encuentre con la necesidad de cambiar ahora o dejar que los delincuentes se aprovechen de nuestra apatía y se roben el futuro de una PATRIA que pudo ser y se quedó en el intento de los que lograron más sin hacer nada, que los que intentaron todo y la alienación los condenó a una LUCHA que será por siempre. PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.