"Las especies son como ladrillos en la construcción de un edificio. Podemos perder una o dos docenas de ladrillos sin que la casa se tambalee. Pero si desaparece el 20% de las especies, la estructura entera se desestabiliza y se derrumba. Así funciona un ecosistema".
Donald Falk
(Ecólogo de la Universidad de Arizona, EE.UU.)
Sería el norteamericano Edward O. Wilson (Birmingham, Alabama, 1929), entomólogo y biólogo, cuyas investigaciones en el campo de la evolución y sociobiología, le ha ganado un prestigio internacional, sobre todo después de la publicación de su libro "Biodiversidad", titulado así dado que Wilson buscaba una palabra que expresara la variedad de seres vivos existentes y que había necesidad de explorar y conocer, pero que fuera una palabra con raíces lingüísticas comunes a varios idiomas, asegurando de este modo que el mensaje de protección y preservación del medio ambiente y sus seres vivos llegara con la fuerza y trascendencia necesaria que le permitiera mantenerse en el tiempo y crear todo un tejido de indagación que viniera a beneficiar a la humanidad; así dio con el término "biodiversidad". Sobre este término hay innumerables apreciaciones y puntos de vista, pero uno que ha sido reconocido por el Convenio de Naciones Unidas sobre Conservación y Uso Sostenible de la Diversidad Biológica, en 1992, que pertenece precisamente a Wilson, quizás sea uno de los que mejor definen la biodiversidad: "La biodiversidad es variabilidad de organismos vivos de cualquier origen, incluidos, entre otras cosas, los ecosistemas terrestres, marinos y otros ecosistemas acuáticos, y los complejos ecológicos de los que forman parte; comprende la diversidad dentro de cada especie, entre las especies y de los ecosistemas".
En este sentido la creación de un Programa de Doctorado en Biodiversidad, constituye, ante la fuerza del sentido y dirección que representa la biodiversidad como área de estudio y conocimiento, una oferta académica para docentes e investigadores, que viene a garantizar la sustentabilidad de procesos de indagación enmarcados en la descripción, interpretación, comprensión y valoración de la diversidad de especies de plantas, animales, hongos y microorganismos que viven en un espacio determinado, a su variabilidad genética, a los ecosistemas de los cuales forman parte estas especies y a los paisajes o regiones en donde se ubican los ecosistemas, invitando a la comunidad científica a ver la salvación del planeta como un objetivo fundamental en las nuevas experiencias de investigación del mundo Universitario global.
Ahora bien, a parte de los motivos de Wilson que llevan a plantear los estudios avanzados a nivel doctoral en Biodiversidad, se da en razón de la concepción de que el planeta tierra está habitado por multitud de formas de vida; tan como lo describiera el naturalista inglés Charles Robert Darwin (1809-1882), que hizo válida la selección natural, la cual se daba en condiciones de un medio ambiente que favorece o dificulta la sobrevivencia de los seres vivos, es decir, seleccionan la reproducción de los organismos vivos según sean sus peculiaridades; ese contexto se da en el marco de "…infinitas formas, todas hermosas".
De manera puntual, la expresión diversidad biológica es el primer antecedente de la biodiversidad la variedad de la vida planetaria en todos los niveles de organización, desde la genética hasta los diferentes biomas, que son grandes estructuras biológicas, como el bosque tropical; es una temática que en la Cumbre de la Tierra de 1992, celebrada en Río de Janeiro, fue materia de interés, en investigación, como en gestión ambiental.
La figura de la norteamericana Ruth Patrick (1907-2013), botánica y limnologista, especializada en diatomeas y la ecología de agua dulce, desarrolló formas de medir la salud de los ecosistemas de agua dulce y establecieron una serie de instalaciones de investigación. Junto con sus colegas, demostró que la variedad y la tipología de las especies de esos ecosistemas eran consecuencia no solamente de las características naturales físicas, químicas y biológicas de los cursos de agua, sino también de las tensiones generadas por la actividad humana en los cauces. Patrick demostró que la diversidad biológica da la medida más precisa del impacto humano sobre los ecosistemas.
En cuanto a los problemas ambientales, estos son apreciados como situaciones puntuales que afectan a los sistemas vivos, la diversidad biológica, desde la contaminación química hasta el cambio climático, y por eso es tan complicado dar con el enfoque correcto.
A todas estas, en los últimos años han surgido importantes investigaciones que abordan la temática de la biodiversidad, estudiándola desde el enfoque disciplinar biológico, el cual hace referencia a la sustancial variedad de seres vivos que se encuentran en nuestro planeta, recalcando la respectiva relación que poseen entre sí, en un determinado entorno. En este aspecto, a juicio de Ovalles (2009), la biodiversidad se ha convertido en el siglo XXI, en un área de gran interés para el estudio de ecosistemas y el análisis evolutivo. Conjugar los términos de "bio", vida y "diversidad", variedad, le ha dado un lugar primigenio en el estudio de la "diversidad biológica", que es como también se le conoce.
Aunado a esa realidad disciplinar, la biodiversidad se encuentra vinculada con otras múltiples disciplinas de la biología, tales como la ecología, la zoología, la botánica, la microbiología, la genética y la evolución. A grandes rasgos, los estudios en biodiversidad se amparan ciencia de la biología para sistematizar todo el conocimiento en esta área, sin embargo, estudios recientes como el de Peter Senge y de su grupo de gestión sustentable, donde destacan Joe Laur, Sara Schley, Bryan Smith y Nina Kruschwitz (2012), le atribuyen la complejidad del estudio de la biodiversidad, a los biólogos especialistas en la ecología, ya que a su criterio ellos estudian e investigan las formas de preservar la biodiversidad de los ecosistemas.
Sin embargo, el equipo académico de la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (UNELLEZ), visualiza que la biodiversidad debe tener un enfoque inter y multidisciplinar, no circunscribiéndola a una sola disciplina su enfoque o perspectiva, sino ampliándola y vinculándola con otras áreas del conocimiento como las ciencias sociales y las ciencias de la educación.
En este sentido, el Programa Doctoral en Biodiversidad, parte del punto de vista de Dorado Nájera (2010), sobre que la biodiversidad no es algo ajeno a los seres humanos, por lo cual desde el interés indagativo de los seres humanos debe partir una serie de estrategias y aspectos de interés que permitan integrar la rica diversidad de la vida y se generen estrategias y acciones que la protejan y cuiden para evitar su extinción. La biodiversidad está en la base de los bienes y servicios que los ecosistemas proporcionan, sirve de sustento a la vida, garantiza el bienestar de los seres humanos, y permite desarrollar una serie de valores que modelan a una persona ideas para la supervivencia de la civilización planetaria. En la biodiversidad "…está la base de casi la mitad de la economía mundial, y las medidas encaminadas a su conservación y restauración se perfilan ya como algunas de las actividades que más se desarrollarán y que más empleo crearán en el futuro…"
A todas estas, desde el plano curricular, el Programa Doctoral en Biodiversidad se propone sea agrupado en tres niveles diferenciados pero relacionados: 1.- La diversidad ecológica. Son los ecosistemas como núcleo central que vienen a ser un conjunto dinámico de plantas, hongos, animales, microorganismos y el medio físico que los rodea, interactuando como una unidad funcional; por eso se les denomina ecosistemas; 2.- La diversidad de especies. Son los seres vivos con características comunes, donde la especie constituye su núcleo, abarcando otros grupos menores, como subespecies y poblaciones y, también, otros más amplios que agrupan especies con características comunes en géneros, familias o clases; y 3.- La diversidad genética. Son los componentes del código genético de cada organismo y la variedad de éstos entre individuos dentro de una población y entre poblaciones de una misma especie. Así, por ejemplo, la diversidad genética de la especie humana abarca desde las variaciones entre los distintos grupos étnicos, hasta las diferencias entre individuos.
El Doctorado en Biodiversidad, abordaría la temática de manera problematizadora, reflexiva, crítica, social y transformadora de la realidad en el contexto venezolano, latinoamericano, continental, hemisférico y mundial. Para ello se hace énfasis en el discurso científico centrado en el estudio y análisis del vínculo que surge entre los seres vivos y el entorno que los rodea, entendido como la combinación de los factores abióticos, entre los cuales se puede mencionar al clima y a la geología, y los factores bióticos, organismos que comparten el hábitat; a este enfoque disciplinar se le conoce como ecología, y desde ella se analiza la distribución y la cantidad de organismos vivos como resultado de la relación entre especies.
Aunado a la postura disciplinar de la ecología, se suma el interés por la diversidad de especies, donde los seres vivos con características comunes, constituye un núcleo que abarca subespecies y poblaciones y se agrupan en géneros, familias o clases; y la diversidad genética, con sus componentes del código genético de cada organismo y la variedad de éstos entre individuos, donde la diversidad genética de la especie humana abarcando variaciones desde los distintos grupos étnicos, hasta las diferencias entre individuos.
La importancia de estudiar la biodiversidad está implícita en quinto gran objetivo histórico del denominado Plan de la Patria, 2013-2019 (Ley del Segundo Plan Socialista de Desarrollo Económico y Social, 2013), el cual plantea la preservar la vida en el planeta y salvar a la especie humana, partiendo de un modelo económico productivo ecosocialista, "…basado en una relación armónica entre el hombre y la naturaleza, que garantice el uso y aprovechamiento racional y óptimo de los recursos naturales, respetando los procesos y ciclos de la naturaleza" (pág. 109).
Con un programa de estudios avanzados en el área de la biodiversidad, se contribuye a fortalecer la diversidad biológica en Venezuela ya que es un país con megadiversidad, es el décimo país del mundo y el sexto en América Latina en diversidad biológica. Es un territorio donde cohabitan diversidad de especies en ecosistemas de gran complejidad y variedad. Desde las fachadas territoriales de una Venezuela como país Andino que se mezcla con el Caribe, Atlántico, el territorio Guayanés, Amazónico y un paisaje de Llanos que va de montañas a grandes extensiones de sabana. Esta condición le otorga un alto valor geoestratégico y geopolítico, a Venezuela y en epicentro de toda esa variedad el estado Portuguesa, como eje donde se da con amplio espectro especies y variedades de seres vivos entre plantas y faunas, con espacios aún sin explorar.
Un Doctorado en Biodiversidad, vendría a fortalecer la diversidad cultural, la cual surge como consecuentemente a su geografía, convirtiendo las bondades del país en una vitrina de alta diversidad sociocultural, traducida a través de un abanico de opciones y modalidades para dar contenido sociopolítico al desarrollo sustentable, endógeno y socialista.
La ordenación del territorio, a todas estas, es otra de las ventajas comparativas contenidas en el territorio nacional y que vienen a darle fortaleza a los estudios avanzados en biodiversidad, reflejando una estrategia clara, desagregada y articulada orgánicamente, mediante un instrumento jurídico nuevo que contenga la nueva estrategia política para la distribución espacial del desarrollo, tal como lo establece el Artículo 128 de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela (CNRBV, 1999).
En consecuencia, el Doctorado en Biodiversidad debería establecerse para promover la identidad nacional como una sola Nación pluricultural, multiétnica y biodiversa, que articula todos los ámbitos geográficos de la gran región latinoamericana y caribeña; y por tanto, juega un rol geoestratégico preponderante para la construcción de un nuevo orden mundial y el equilibrio del planeta.
Es un Doctorado que viene a establecer y a fundar objetivos estratégicos y generales caracterizados por: generar investigaciones orientadas a crear un nuevo modelo de desarrollo nacional, sobre la base de la biodiversidad y las ventajas comparativas que significa ser el décimo país del mundo y el sexto en América Latina en diversidad biológica: una síntesis de todos los ecosistemas presentes en la Región Latinoamericana; impulsar opciones de desarrollo sustentable con base en las fachadas de nuestro territorio nacional: Andina, Caribe, Atlántica, Guayanesa, Amazónica y Llanera, fortaleciendo su alto valor geoestratégico y geopolítico; fortalecer la diversidad cultural derivada de la geografía, nacional, como un gran abanico de opciones y modalidades que dan contenido sociopolítico al desarrollo sustentable, endógeno y socialista, apuntalan el poder popular y la construcción del Estado Comunal; y desarrollar investigaciones acerca de la política de ordenación del territorio atendiendo a las realidades ecológicas, geográficas, poblacionales, sociales, culturales económicas y políticas de acuerdo con las premisas del desarrollo sustentable.
Desde esta realidad, el Doctorado en Biodiversidad vendría a consolidar el objetivo nacional del Plan de la Patria 5.1., que establece: "Construir e impulsar el modelo económico productivo eco-socialista, basado en una relación armónica entre el hombre y la naturaleza, que garantice el uso y aprovechamiento racional, óptimo y sostenible de los recursos naturales, respetando los procesos y ciclos de la naturaleza" (Ley del Segundo Plan Socialista de Desarrollo Económico y Social, 2013, pág. 111).
A grandes rasgos, el Doctorado en Biodiversidad, en el plano académico relativo a los beneficios que traerá a la UNELLEZ, como institución Universitaria enmarcada en el desarrollo científico de los estudios que brinden sustentabilidad y cuidado a la diversidad biológica en el país, se puede puntualizar que permitiría ampliar las líneas de investigación en el marco del modelo productivo eco-socialista, dando cumplimiento al mandato del texto constitucional que utiliza el término sustentable para fortalecer la indagación científica en lo ecológico y en razón del valor social de la producción, propiciando el abordaje a los procesos y ciclos de la naturaleza, en perspectiva a un equilibro ecológico que los sustente e indague en razón del impacto ambiental y la sensibilidad ambiental bajo el principio de la resiliencia.
Un Doctorado en Biodiversidad, hará posible contar con productos investigativos que contribuyan a impulsar un modelo productivo sustentable, endógeno y socialista basado en una relación armónica entre los seres humanos y la madre tierra, que garantice un ambiente sano seguro y ecológicamente equilibrado, la razón social colectiva en el uso y aprovechamiento de los recursos naturales y el principio de resiliencia de los ecosistemas.
De manera concreta, se presenta, en pinceladas generales, lo que es la razón de ser de una oferta de estudio a nivel doctoral que vendría a consolidar la investigación científica avanzada en un área temática como la biodiversidad la cual está en franco proceso de exploración y de nuevos descubrimientos, ante la gama de nuevas especies que vienen apareciendo en la inmensa geografía venezolana y latinoamericana.
Basta revisar la enciclopedia virtual Wikipedia.org, para encontrar que "…Venezuela es uno de los diecisiete países megadiversos en el mundo…". El país alberga dos áreas que son muy altas en biodiversidad: Andes Tropicales, Islas en el Mar Caribe con ricos ecosistemas marinos, el jaguar, como animal que habita gran parte del territorio venezolano, el tucán grande o tucán toco, una especie exótica y de una conducta muy particular en el desenvolvimiento de sus períodos de apareamiento, los periquitos en la Gran Sabana, estado Bolívar, el Parque nacional Canaima en el estado Bolívar, el cual figura como uno de los parques nacionales más grandes del mundo, en fin, importantes espacios de la geografía nacional que reclama investigadores científicos avanzados en esta área.
Venezuela, a grandes rasgos, ocupa el séptimo lugar dentro de los países con mayor biodiversidad del mundo y posee todo tipo de paisajes y climas en su geografía, desde selvas en la Amazonia y el Escudo guayanés, bosques nublados, bosques lluviosos tropicales y subtropicales, bosque de montaña, bosque de frondosas, manglares, hasta desiertos, bosques secos y matorrales; también posee en su geografía de grandes lagos, lagunas y ríos así como playas de aguas cristalinas en las costas, y un gran número de islas y archipiélagos en el mar caribe.
Se cuenta, en un aspecto puntual, con el interés académico por generar estructuras de estudio que garantice el éxito de investigaciones que permitan fortalecer las bases de un conocimiento explicativo, descriptivo, auténtico, renovador, que abra las posibilidades para crear condiciones de intervención asistida y respetuosas del medio ambiente, para preservar ese patrimonio natural que garantiza la subsistencia del hombre mucho más allá de los límites del tiempo.