La campaña desplegada por un sector de la oposición para que los venezolanos no se animaran a participar en el referéndum del 3D, terminó por desarmarlos, porque nadie les hizo caso. Fue su espada de Damocles.
Luego de las torpes escenas montadas en torno a las primarias que resultaron un fiasco completo, donde incluso ellos mismos, como SUMATE, destacaron que había sido un fraude, voltearon una parte de las baterías, nuevamente contra el gobierno, sin argumentos, o con argumentos muy vacíos, sin inteligencia, sin estrategias, para destacar que el referéndum convocado por el gobierno nacional, en realidad era una estrategia para distraer a la opinión pública de los verdaderos problemas del país.
Pero incluso, hubo dirigentes renombrados como Henrique Capriles, el único candidato presidencial de ellos, que destacó que no votaría en el referéndum. En realidad, está claro que necesitan asesores, tanto políticos como de imagen, que les hagan entender que sus palabras pueden ser una torpeza, en temas tan sensibles y complejos como este del Esequibo.
Y como la torpeza no se detienen, no tenían un Plan B para continuar su campaña de desprestigio, por lo que la mudez es lo que `predomina en predios de la oposición en estos. “Donde ronca tigre, no hay burro con reumatismo”, dice el refrán criollo. María Corina, quien, al parecer, ya de como un hecho de que no será candidato presidencial, prefiere irse para su casa nuevamente, hasta que sople mejor el viento.
Pero todo indica que el viento no soplará por mucho tiempo a favor de la oposición, tanto en este como en otros temas. Dice la CEPAL que Venezuela crecerá con muy buenas perspectivas para el año entrante. El precio del petróleo continúa siendo una balanza peligrosa, pero Venezuela siempre estará adentro.
Y, por si fuera poco, la Corte Internacional de Justicia, acaba de excluir a Inglaterra de las discusiones sobre el tema Esequibo; pero, además, destaca que solo Venezuela y Guyana discutirán sobre el Laudo Arbitral de París de 1899. Quiere decir que es otra ganancia para el país, y que, si bien la batalla es demasiado difícil, hoy día, más venezolanos tienen claro el problema, y más juristas tienen dudas sobre las decisiones anteriores, cuando Venezuela ni siquiera tuvo un representante propio, sino que Inglaterra nombró uno para que la defendiera. “Zamuro cuidando carne” reza otro refrán popular.
No hay duda de que los argumentos de Venezuela son contundentes, y van a ser muy difíciles de rebatir por parte de Guyana, por lo que, como alternativa, es muy probable que se reviva la política del Big Stick, tan usada en la década pasada, a fin de permitir que las trasnacionales, mantengan su explotación petrolera. Me preocupa aún más, la base militar que se podría instalar con características nucleares. Eso si suena aterrorizante.
