La importancia de su re-nacionalización ahora, es una medida que supera una estatización de gobiernos “representativos”, y acentúa el carácter soberano y antiimperialista de nuestro proyecto político. Su entrega al sector privado transnacional se debió a una serie de componendas en las que participaron “empresarios” y “dirigentes” de los sindicatos y partidos políticos tradicionales.
Un artículo de opinión exponía de manera tajante: El proletariado Sidorista no han conquistado una victoria sindical: ha ganado un desafió político de gran proyección…(1); es importante medir bien lo que implica, en vista de una posición que busca ganar más terreno en este debate: El gobierno tiene el compromiso de cumplir con las demandas que reivindicó la dirigencia sindical de SIDOR durante el conflicto de las negociaciones del contrato colectivo.
Ahora, a reflexionar las siguientes inquietudes:
1. ¿En cuánto se debe diferenciar una negociación de una convención colectiva entre una empresa estratégica con dirección transnacional y una bajo la dirección del gobierno bolivariano? (que con sus contradicciones, supera por mucho la concepción y dinámica estatal de otros gobiernos aliados del continente, sin hablar de los neoliberales)
2. ¿Es lo mismo luchar por arrancarle una tajada de las ganancias que acumulan ilegítimamente para sí los representantes de la clase económica dominante, que las que se reservan en el tesoro nacional para ser redistribuidas en beneficio del pueblo venezolano y de los pueblos del continente, como sucede?
Las acciones de l@s trabajador@s en SIDOR, podrían y deben impulsar la recomposición del mapa político organizativo de su clase. Hay que probar al resto del movimiento popular su compromiso revolucionario, asumiendo tareas concretas y reivindicaciones necesarias en el marco de la lucha Nacional, Antiimperialista y Anticapitalista.
En la lucha política (que supera, sin obviar, las reivindicaciones laborales) las metas no van a ser cedidas a la clase trabajadora en medio de profundas confrontaciones, se conquistan, al igual que el papel protagónico en la Revolución. Para tal fin, sus demandas estarán amarradas con la unidad de los trabajadore@s y con una plataforma política que esté en correspondencia estratégica con el avance del proyecto bolivariano. Plataforma que tiene una guía en la Propuesta de Reforma Constitucional (PRC)
Hay que tener presente que la firma de una negociación colectiva de PDVSA a finales del año pasado (con significativos incentivos sociales y económicos, incorporación de elementos políticos en el marco de la PRC y más incluyente) significó poco para movilizar a los trabajador@s petroler@s a favor de una Carta Magna reformada que daba un rumbo socialista a la lucha obrera en Venezuela. Se percibió el poco interés mostrado por una buena parte este sector, demostrado en la votación, sobre los avances en acordados en el contrato y su afirmación de aprobarse la Reforma (lo dice alguien que estuvo en distintas áreas de PDVSA promoviendo talleres sobre CCT y PRC). Hubo quienes asumiendo un papel protagónico al recuperar la industria en el sabotaje petrolero, subvaloraron o llegaron a descalificar a la PRC.
Para los camaradas de SIDOR y del resto de la clase obrera, aprendamos las lecciones del pasado, sepamos diferenciar cuales reclamos expresan una incidencia económica, social o política; y coloquemos a la Patria por encima de una empresa, y a nuestra identidad con el pueblo por encima de “solidaridades automáticas” con trabajadores que nos estén llevando al despeñadero.
(1) La Nacionalización de SIDOR y el papel de los trabajadores en la Revolución Bolivariana. Aporrea. Francisco Marín. 14-04-08
Trabajador petrolero
Vocero Suplente del PSUV
cilibertoo@pdvsa.com
