Como se tiene previsto el próximo 10 de enero, será juramentado el presidente Nicolás Maduro, para el nuevo periodo constitucional en la sede del Palacio Federal Legislativo, sede de la Asamblea Nacional; que marcará el inicio de un nuevo periodo de seis años del 2025 al 2031. Ante este acto, hoy la revolución bolivariana, es el centro de atención en el mundo, por lo más oscuro y recalcitrante del fascismo internacional, a través de una andanada de las mas inimaginables acusaciones, sanciones y bloqueos, si obviar el envió de mercenarios y paramilitares para socavar las bases institucionales del Estado venezolano; por ahí el ministro Diosdado Cabello, informó de la detención de 125 mercenarios, oriundos de las más disimiles nacionalidades prestos a cometer actos terroristas; así como la incautación de más de 400 fusiles. Existen sectores de la ultraderecha, fascista y golpista, que no descansan en poner en práctica acciones criminales contra la revolución bolivariana y el pueblo venezolano. Estas amenazas en estos momentos tienen nombre y apellido. El prófugo de la justicia, que anda por el mundo, gritando a los cuatro vientos y junto a enemigos jurados de este proceso que se juramentará el 10 de enero; de la mano de la señora María Corina Machado; acompañado de una corte ex presidentes, que en su mayoría tienen un prontuario de padre y señor mío; que serán detenidos y declarados como invasores. También hacen antesala a gobiernos fascistas del hemisferio, pidiendo a gritos la intervención militar y arrodillándose a presidentes de la peor estirpe como fieles peones pidiendo sanciones y desconociendo nuestras instituciones. Argentina fue el primer país escogido. Una invitación, que había sido previamente preparada por el vampiro Ledesma, se convirtió en un revés; solo un reducido grupo de tarifados de Milei, asistieron al balcón de la Casa Rosada para saludar al prófugo edmundito y a su anfitrión Milei. Quien señaló: "que Maduro va a caer tarde o temprano; con esta declaración puso en dudas la juramentación del prófugo y que se sentía muy honrado porque Edumundo le había hecho entrega de las fulanas actas. Las veces que la Fiscalía Nacional de la República se las pidió nunca las presento; ahora aparece presentando dizque los "comprobantes de las actas" a un gobierno extranjero. En este orden, se entrevisto con otro que tiene los días contados por entregar la primera magistratura, el presidente de Uruguay Luis Lacalle Pou. Fue una entrevista, en el más absoluto silencio, ninguno de los dos soltó prenda. Todo se quedó en el reducto de las cuatro paredes. Con el presidente de Paraguay tuvo un videoconferencia con su presidente Santiago Peña; de donde salió una declaración, donde reconocía al prófugo como el presidente electo. El presidente Maduro, ante esta manifestación dio por terminadas las relaciones diplomáticas con ese país. Así de sencillo. El siguiente periplo de estas desentonadas visitas es nada menos que con el presidente Joe Biden, que también le falta horas para entregar el mandato. Lo que llamó la atención en este encuentro, fue que no hubo ninguna foto, ni ninguna imagen que patentice el encuentro. Luego edmundito, salió del encuentro solito. Biden lo había dejado solo. Las malas lenguas dicen ahora, que el personaje ideal para esa entrevista era Donald Trump. Pero al parecer en ninguna de sus apariciones públicas le ha tirado una florecita; Al contrario Trump ha dado señales de acercamiento con el gobierno del presidente Maduro. Entre otras de las visitas que tiene contemplado el prófugo de la justicia estan Panamá y República Dominicana, quien se hará acompañar de varios ex presidentes del Grupo Idea (Iniciativa Democrática de España y las Américas). A medida que pasan las horas y se acerca el 10 de enero, se presenta para este dúo un panorama nada prometedor.
Luis Roa
