Nuevamente los venezolanos han concurrido a votar para elegir los diputados al nuevo período de la Asamblea Nacional (AN), en una jornada de grandes movilizaciones, con un pueblo organizado y respetuoso de sus colas o filas, demostrando una gran nivel de civismo, ya que en Venezuela el sufragio no es obligatorio. Con un sistema de votación automatizado, de gran confiabilidad y con un 56 por ciento auditable, lo que da garantía de un blindaje al derecho del votante. Estas apreciaciones han sido aceptadas por todos los partidos y movimientos participantes, de la misma manera por los invitados internacionales, lo que ha calificado este proceso como transparente, en el que no existieron denuncias de irregularidades, además felicitando a los funcionarios del Consejo Nacional Electoral CNE y a los militares encargados del Plan República.
El resultado de esta elección legislativa que aportó un saldo de 98 diputados nacionales all Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), contra 65 diputados de la oposición, agrupados en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), lo que significa un 60% para el oficialismo y un 40% para la oposición. En la elección de diputados al Parlamento Latinoamericano (capitulo Venezuela), de 12 diputados 7 pertenecen al PSUV y 5 al MUD, obteniendo una mayoría que apoya el presidente venezolano, en una estructura de carácter internacional y no legislativa.
Esta elección demuestra una vez más el carácter democrático del gobierno venezolano
Muchas intrigas y mentiras se han montado sobre el sistema democrático del gobierno del presidente Chávez. Las ahora 16 elecciones han demostrado una conducta democrática cívica y popular, no se ha comprobado en ninguna de ellas denuncia de fraude o manipulación de votos, hasta los referéndums, todos han sido auditados por los partidos participantes y los invitados internacionales. Pero la amnesia y la manipulación de la oposición, ausentes por propia decisión en la anterior elección parlamentaria, trataron de crear la imagen de que ahora, con su ingreso a la AN, volvía la democracia para garantizar los cambios. Pero se olvidan que los únicos que irrumpieron el cauce legal, con el golpe de estado del 2002 y el paro patronal y petrolero a finales de ese año, generando muertos, detenidos y perdidas multimillonarias a la nación, fueron ellos mismos con sus conspiraciones.
La gran campaña montada en los medios internacionales, actuando como si fueran un partido mas del MUD, acuñaba el fin del modelo chavista, porque vendría el cambio definitivo de sistema. Pero sufrieron una nueva frustración porque el PSUV aun mantiene una mayoría del 60 por ciento. Es que esperaban una nueva Perestroika (fin del modelo socialista). A veces los montajes como el de la revolución naranja o los golpes legales como el de Honduras, dejan claramente establecida la mano negra de la derecha internacional.
Una nueva integración política conforma la Asamblea Nacional
Luego de cinco años de mayoría de los diputados del PSUV con algunas alianzas con los partidos del denominado Polo Patriótico, este se fue desintegrando por la separación de PODEMOS (hoy en la oposición) y la del PPT que conformó una opción alterna, haciendo los últimos meses también de opositor. Esa mayoría permitió al gobierno bolivariano legislar en materia económica, política y social y el avence de importante proyectos, para garantizar un equilibrio y una inversión en el desarrollo del pueblo venezolano, en áreas de educación, salud, seguridad social, pensiones adecuadas al salario mínimo, y redes alimentarias del estado a menor costo que la redes privadas.
A partir de enero del 2012 la nueva composición de la AN cambiará la correlación de fuerzas, lo que genera que el PSUV tendrá dificultad en aprobar sus propuestas de leyes, teniendo que llegar a establecer acuerdos o alianzas con los otros partidos. Para aprobar alguna de estas debe obtener 1 diputado más para llegar a los 99 (tres quintos del total) y para leyes como la Habilitante (de emergencia o especiales donde se autoriza al presidente) se debe alcanzar la suma de 110 votos, lo que determinara un escenario tanto de debate como de encontronazo con la oposición, la cual no podrá organizar una mayoría (con la que no cuenta), para tratar de desarrollar leyes, o aplicar sanciones o interpelaciones ministeriales.
El nuevo escenario demostrará el proyecto de la oposición
Luego de alcanzar una importante representatividad de diputados, la primeras manifestaciones de la oposición fueron de intentar confundir al electorado, al manifestar que ellos tenían mayoría de votos en el país, que debían tener más diputados que el gobierno, tratando de confundir y crear una matriz mediática, de manipulación de escrutinios. Ellos son concientes del sistema de diputados por cada estado, que de acuerdo a su territorio y población tiene derecho a determinada cantidad de diputados, porque este sistema no se inventó por el chavismo, ellos mismos eligieron sus diputados en la primera AN.
También ha sido ejemplo la actitud de ventajismo o prepotencia al pretender asumir el cargo desde ahora, al anunciar que ellos ya eran diputados, yendo contra la constitución y la legislación vigente, que determina el 5 de enero del 2011, como fecha de juramentación de la nueva Asamblea Nacional. ¿Serán estas posturas un anuncio de sus actitudes “pluralistas y democráticas”, con una conducta violenta y revanchista? Al decir del elegido diputado por COPEI Enrique Mendoza, que “ahora vamos por Chávez”, un mensaje con dos lecturas, una ganar la elección del 2012, o sino intentar una maniobra tipo Honduras (2002 Venezuela), incapacidad mental del presidente o vacío de poder. Para la primera opción no tienen los votos (según la tendencia de estas elecciones) y para la otras solo son minoría.
Además es interesante revisar este concepto de mayoría que intenta establecer la oposición, ¿será que la matemática de este sector político estará fallando? Primero 98 diputados contra 65 demuestra una gran diferencia, además sumando todos los votos de los circuitos del PSUV tenemos 5.422.040 votos, mientras que la oposición tiene 5.320.175, una diferencia de más de 100.000 votos. El concepto defendido por ese sector de la existencia de una dictadura en Venezuela, por la ausencia de pluralidad en la AN, (producida por un boicot de esta misma oposición, no fue producto de un capricho o una presión del presidente Chávez) fue una mala política de la oposición, que hoy vuelve para enmendar su ausencia o sumarse a una campaña desestabilizadora.
El otro gran desafío de la oposición es si será capaz de mantener la unidad en la MUP, una suerte de nuevo chiripero, en remembranza a la ultima presidencia de Rafael Caldera, que contribuyo al desbarajuste del último gobierno antes del presidente Chávez, ya que las dificultades para conformar las candidaturas, y el breve resurgimiento de Acción Democrática con 22 diputados, contradicen con la mayoría de Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia alcanzada en la ultimas elecciones de Gobernadores y Alcaldes en el año 2008. Muchos quisieran ver una oposición responsable, con una actitud democrática, en la búsqueda de acuerdos políticos, no con una oposición instigadora y generadora de odio en sus seguidores, creando un miedo a la vida en Venezuela, a los valores nacionales e impulsando la presencia de los EEUU, en los problemas internos de los venezolanos.
El PSUV mantiene una mayoría de diputados pero no alcanza una mayoría calificada
Los objetivos trazados por el PSUV de alcanzar la mayoría calificada para blindar el proceso revolucionario, no se pudieron alcanzar pese a los esfuerzos de sus militantes y los cuadros políticos regionales y nacionales. Sí se logró consolidar al partido como la principal fuerza política del país, al obtener 98 diputados y 5.422.040 de votos. Para la mayoría de los militantes de esta organización, que esperaron hasta las 2 de la mañana del 27 de septiembre el resultado, éste no era el esperado. Festejaron pero con la pregunta ¿que pasó, dónde se trancó nuestra campaña? Recién se comienzan a realizar los análisis y reflexiones sobre lo sucedido, algunos intentan comparar estos hechos con la única derrota en 15 actos eleccionarios, que fue el plebiscito de la Reforma electoral del 2006, donde por una minima diferencia la oposición aplicaba el No a esta instancia constitucional
Nuevamente el mapa electoral sufre variantes y no condicen con los últimos resultados. Algunos estados con mayoría del PSUV, Gobernador y Alcalde el Estado Anzoátegui, solo alcanzó un diputado contra 7 de la oposición, sin embargo en el Distrito Capital de Caracas el PSUV se alzaba con 7 diputados frente a 3 opositores, pese haber perdido la Alcaldía Mayor de la capital en el 2008. Si bien el PSUV logró ganar en 18 de 24 estados, no logró alcanzar la mayoría calificada, que serian los 110 diputados. Las cifras alcanzadas por el gobierno bolivariano, han mostrado una tendencia en estos 11 años, donde se conforma una banda del 53 al 60 por ciento del electorado, mientras la oposición mantiene un 40 a un 43 por ciento, no mostrando ambas tendencias saltos cualitativos, mostrando siempre una mayoría hacia el presidente Chávez y el PSUV:
De un electorado casi encuadrado en 11 años entre el 55 y 60% de chavistas y un 43 a 45% oposición, al caracterizar la variables electorales que en cada elección, se muestran regiones que cambian de postura política de una manera diametralmente opuesta. Al abocarnos a desarrollar este trabajo nos propusimos hacer un pantallazo de la recientes elecciones en Venezuela, para en una nueva entrega tratar de profundizar este fenómeno y poder enfocar estos temas de una manera mas documentada al intercambiar ideas con actores políticos y sociales, y de esa manera llevar al lector una idea mas acabada y no caer en el subjetivismo,
diegojolivera@gmail.com