El majunchismo no es nuevo en este país eso lo sabemos, tampoco son nuevos los actores y mucho menos sus estrategias, así que sobre advertencia no hay engaños. El majunchismo viene con todo el peso y la malignidad de sus estrategias sin escrúpulos. Los candidatos de la derecha irán armados a los barrios chavistas, andan buscando un muerto para que, luego con la ayuda de sus “amigos” dueños de medios, sus voceros puedan difundir medias verdades y grandes mentiras, acusando a Chávez de ser el culpable. Volverán la quema de cauchos, la desaparición de alimentos, las invasiones, las protestas por cualquier cosa, todo en el marco del plan GM7O (Guarimba Majunche 7 de octubre) del oposicionismo. Se vestirán de rojo mientras saquean a sus amigotes de los supermercados, gritarán consignas engañosas a favor del poder popular, se pondrán boina de vez en cuando y todo como parte del guión majunche que tiene como objetivo central calentar el ambiente, embochinchar la calle antes de las elecciones de octubre de este año.
Ellos se saben perdidos. Tienen conocimiento estadístico de la derrota que les propinará Chávez. Lo dicen sus propias encuestadoras. Recientemente Hinterlaces revelaba hasta un 66% de apoyo a Chávez, por eso ellos aplicarán el plan de la desestabilización para intentar crear nuevamente una matriz internacional que ponga en tela de juicio la madurez y la transparencia democrática de la revolución venezolana. Pongamos en práctica la misión Cámara en mano…vamos a grabarlos, vamos a desenmascararlos. Los violentos son ellos, vamos pues a dejarlos nuevamente en evidencia, cada uno de nosotras y nosotros debemos ser guerrilla comunicacional. Desmontemos la guarimba majunche, pero eso sí, con menos discurso y más hechos. Cámara en mano pues.
Si ya conocemos el plan del majunchismo, debemos poner a funcionar el nuestro y su accionar debe ser una especie de engranaje perfecto. Unidad revolucionaria será la respuesta de los hombres y mujeres de Venezuela hacia el plan GM 7O del oposicionismo. Esa unidad revolucionaria sólo puede garantizarla Chávez a través de su carisma, su poder de convocatoria y su llamado. Chávez vivirá y vencerá, pero no sólo el Chávez físico, que derrumbará como lo está haciendo, cualquier obstáculo, sino el Chávez conciencia colectiva que ya está sembrado en todas y todos nosotros.
La hora del chavismo radical…
Ante esta coyuntura que se extenderá durante todo el año, con sus matices y particularidades, nosotros debemos tener claro que para los revolucionarios no es hora de diferencias ni de apetencias. Es momento del desprendimiento y de alzar las banderas de nuestros ideales revolucionarios. Hoy más que nunca debemos declararnos y actuar como chavistas radicales, revolucionarios radicales, socialistas radicales, claro, si de verdad lo somos.
Recordemos que la construcción del socialismo es la única salida contra el sometimiento del capitalismo. Por eso hoy más que nunca debemos ser y actuar como los anticapitalistas, antiimperialistas y bolivarianos que somos. Pero a la par debemos rescatar los principios de igualdad, unidad, humanismo y patriotismo, contra el comportamiento agresor y desmedido de los anti patria promotores de la desestabilización majunche.
Su norte es el norte, por eso valiéndonos también de nuestra premisa internacionalista, cada una y cada uno de nosotros debe ser portavoz de lo que realmente ocurre en Venezuela, una patria donde la salud está garantizada para todos, donde los enfermos de cáncer tienen atención gratuita y de calidad como responsabilidad del Estado, donde el pobre tiene derecho y opción real a una casa, donde se ha democratizado el acceso a la educación universitaria y donde los trabajadores están por restituir con su presidente obrerista, sus más justas reivindicaciones, entre ellas la retroactividad de sus prestaciones sociales, esas mismas que fueron eliminadas por la burguesía dominante en tiempos de la IV República.
Atender al pobre, servir de escalera al humilde, ceder en nuestras ambiciones personales, demostrar solidaridad con nuestros hermanos y hermanas, dar la vida si es necesario por la patria, eso es ser radicalmente chavista. Hoy en este momento de la historia, cuando nos jugamos el todo por el todo, el futuro y la posibilidad de seguir haciendo historia, sin que me tiemble el pulso ni la voz, yo me declaro radicalmente chavista, radicalmente socialista.
Dejen quieto lo que está quieto…
A la oposición un mensajito y es bueno que escuchen consejo para que puedan llegar a viejos. Dejen quieto lo que está quieto. No se metan con los logros del pueblo. Ya nadie se come los cuentos de Globovisión o de sus hermanos menores Venenovisión y otros. El poder de la comunicación está en nosotros, ellos perdieron su oportunidad, pues le vendieron el alma al Diablo y Satán ganó. Dejen quieto lo que está quieto porque jugar con candela a veces quema. En este pueblo hay un nivel de conciencia que los opositores no han logrado descifrar y que algunos chavistas a veces desvirtuamos y etiquetamos como pasión o frenesí. Ese nivel de amor desenfrenado es la muralla necesaria para contener cualquier acción saboteadora que ponga en peligro lo alcanzado.
Hay que estar en los zapatos de quien hasta ayer no tenía nada, no albergaba esperanzas y hoy ha obtenido una vivienda gracias al esfuerzo revolucionario o ha sido beneficiario de las políticas de salud de este gobierno para saber cuán grande es el frenesí, cuán fuerte su nivel de conciencia y cuán grande su compromiso.
El cáncer y sus lecturas…
Algunos miserables, orientados sólo por su odio a Chávez, han dicho que el cáncer es un castigo. Yo le pido a Dios que los perdone. Definitivamente no saben lo que dicen. El sabio más grande del humanismo, la entrega y el sacrificio, Mahatma Gandhi comentaba que su voz interior le ordenaba seguir combatiendo contra el mundo entero, aunque se encontrara solo. “Me dice que no tema a este mundo sino que avance llevando en mí nada más que el temor a Dios”, a los miserables que han hablado del cáncer como un castigo les mandamos bendiciones porque van a necesitarlas. Mientras nosotros los que creemos en la vida y el poder supremo del Dios creador, seguimos avanzando, levantando vuelo como el cóndor, sin cazar moscas ni detenernos ante las provocaciones de los miserables.
Y para que lo sepan, aún hay quienes creemos en la consigna Patria, socialismo o muerte, porque sin lugar a dudas, entregar nuestras conquistas, ceder a las presiones del capitalismo, obviar los avances que hemos obtenido en revolución sería la muerte simbólica del futuro. Viviremos y venceremos para fortalecer nuestros proyectos de justicia social, amor y dignificación. Con Chávez todo, sin Chávez nada, con Dios y en Dios todo, sin él nada.
(*)Vocera del frente de comunicadores y comunicadoras socialistas
natachainatti@gmail.com