Todo va andando muy bien, a pesar del asedio imperial y la crisis inducida por los estados unidos a mi patria que ha llevado a la separación de familias enteras, abuelitos y abuelitas con la responsabilidad de crianza de sus nietos y nietas debido a la migración de sus padres, pero todo va tranquilo.
La diatriba política y el revanchismo de quienes pretenden volver a gobernar la patria y quienes están en el poder, pero todo anda normal.
El odio desatado entre el pueblo ignorante capaz de asesinar por el color de la piel, manipulable, vulnerable en contra del pueblo consiente, leal, esperanzado, que sueña con una patria distinta y dibujada con hechos por un líder que le arrebató el corazón a punto de inclusión, y todo sigue andando bien.
Una superinflación que desborona el sueldo del obrero y lo pulveriza convirtiéndolo en un kg de harina, pero ahí vamos llevándola y un mercado que te llega a la casa y que ayuda bastante a remediar la situación a muy bajo costo, ahí seguimos.
Ropavejeros vendiendo artículos y ropa usada en buen estado y otras no muy buenas, pero siempre hay quien la compre, la viveza criolla, todo el mundo vende todo a todos sin importar a quien o que, poco o nulo control sanitario, pero aun así buscamos el alimento más barato solo para sobrevivir.
Nuevos conocimientos adquiridos a destiempo o quizás reservado para estos tiempos de crisis, producción artesanal de pan, dulces y hasta agricultura urbana, caramba cuanta creatividad y empeño.
El mundo digital, billetera, pago móvil, transferencias, criptoactivo, biopago, wallet, carnet de la patria, como hemos aprendido hasta de tecnología.
Falta de medicinas, y las que hay están a precios inalcanzables, pero no importa, también de eso sabemos, y curamos con algún brebaje, compresa, o guarapo natural, ahí vamos mejorando.
Bajos precios del petróleo, pero eso no importa, somos un país con real, a pesar de todo mantenemos el saludo, la firmeza de la patria soñada.
La bota yanqui convertida en papel moneda verde anda campante y sonante pisoteando el Bolívar, pero a pesar de todo seguimos aguantando callados, atentos ante la amenaza permanente de invasión militar, y muchos hasta dispuestos a defenderla a costa de lo que sea, pero feliz y orgullosos de vivir estos tiempos.
Viendo de cerca y a lo lejos golpes de estado, pueblos enteros masacrados, alevosía, miradas cómplices y manos ensangrentadas, y paremos de contar.
Pero algo más fuerte comienza a sonar por el mundo, un virus hasta ahora desconocido que empieza a matar seres humanos, pero aun así sonreímos y hasta hacemos bromas al respecto, optimistas y esperanzados que a nosotros no llegaría, pero también te atreviste Covid-19, hoy has llegado a mi patria para aterrorizar a grandes y pequeños, obedientes y esperanzados como somos nos sentimos optimistas y pensamos y hasta decimos que todo pasará pronto, aquí estamos temerosos, cautelosos, obedientes, pero dispuestos a seguir las reglas del juego y a seguir soñando, ojala te vayas pronto, causando el más mínimo daño ojala y aproveches de llevarte contigo cuanta plaga ha pasado por mi patria en los últimos cinco años, como el odio, xenofobia y todo aquel que ha osado asecharnos, para que regresen nuestros hijos, hermanos, sobrinos, nietos, amigos a rencontrarse con la familia y a la patria de la que nunca debieron irse y recomencemos, y reconstruyamos todo lo que han destruido, aquí estamos temerosos pero sonrientes, Covid-19, confiados que te alejaras pandemia ajena, como ajenos son todos los males en esta misiva expresados