Por fin, y tenia que ser en revolución, un gobierno como el que tenemos, sin ataduras con el capital que en la mayoría de los países ve limitadas sus actuaciones porque no tiene libertad de acción. compromisos que se originan en financiamientos poco transparentes, ha optado por hacer lo que a gritos pedía el pueblo, en defensa de sus intereses que han venido siendo atacados de manera inclemente, precisamente por quienes son los que en base a ganancias ilimitadas a través de la usura, la especulación, el perverso uso de las divisas que el Estado les entrega, son financistas de una derecha irracional y sui generis que encima de ser beneficiarios de lo que comerciantes inescrupulosos le roban a pueblo, pretenden acusar al gobierno de todos los males que afectan la economía con una inflación inducida y por lo tanto irreal.
En este país ya estamos acostumbrados a que la vergonzosa oposición que tenemos, se oponga a todo lo que haga el gobierno, así sea enfrentar a delincuentes, quienes como hemos visto están impunemente haciendo de las suyas, especulando de manera exagerada y por esa vía contribuyendo a la distorsión económica del país.
La medida oficial que puso en evidencia ante el país la existencia de mafias, todas fichas oposicionistas, como en los casos de tiendas de electrodomésticos, en la capital de la República y en algunas otras ciudades, es algo que se repite en todo el país y en todos los rubros de artículos llámense alimentos, medicinas repuestos, vestuario, ferretería, y todo lo que por necesidad las personas tengan que adquirir para su actividad vital.
Aquí en la frontera la situación es peor, porque debido a la diferencia cambiaria con Colombia, cuando con un peso se puede compra cinco veces más que lo que se compra con un bolívar, por ejemplo una nevera cuyo precio 4.500,oo bolívares, incluida una ganancia justa y lógica es exhibida por 40.000,oo para un colombiano es una ganga, entonces vemos abarrotados lo comercios de electrodomésticos con compradores que vienen del vecino país, lo cual hace que los residentes en el Táchira, se vean obligados a someterse a precios extremadamente usureros, si tienen que adquirir por necesidad algún artefacto eléctrico.
Pero es que además por lo general quienes vienen a comprar desde Colombia lo hacen es para revender en su país con una ganancia muy substancial, ello sucede en todos los rubros y las acciones emprendidas por el gobierno contra el contrabando de extracción pareciera no surten efecto porque el desabastecimiento sigue intacto, los rubros escasean y todo ello con seguridad, especialmente aquí se va a reflejar en los resultados de 08 de diciembre, es duro admitirlo, pero es lo que desde ya reflejan las encuestas, apenas a menos de un mes para el evento electoral.
Hasta que no se desmonten las poderosísimas mafias que aquí operan desde siempre y con mayor fuerza desde la llegada de la revolución porque son bloques delincuenciales, aupados y apoyados por la derecha colombiana y venezolana, a pesar de estar conscientes que al hacerlo le están dando vida al paramilitarismo, cuyo fundador bien sabemos es uno de los asesores más importantes de la derecha venezolana,
Ello hace que aquí la lucha tenga que orientarse de manera diferente, con preeminencia de la inteligencia pero sin descartar el uso de la fuerza pues la lucha es contra experimentados criminales bien entrenados y especializados en matar, como la vía mas fácil para lograr sus fines, con esa gente la derecha apátrida que aquí tenemos í se entiende perfectamente, de ello debe estar consciente nuestra fuerza armada y aceptar que lamentablemente, las dificultades e ingredientes que en nuestras fronteras hace que el problema sea más complejo que en le resto del país, tiene que ver con la infiltración que las mafias han logrado en sectores oficiales, sin ética ni conciencia patria que les lleva a venderle al enemigo cual Judas lo que les requieran para contribuir al desangramiento de nuestra economía y por esa vía perjudicar las buenas intenciones, obstruir los planes de la Revolución en la búsqueda de la mayor suma de felicidad para el pueblo,.
