Son preocupantes las informaciones que se susurran en el seno de los y las trabajadoras de PDVSA de la Costa Oriental del Lago. Todas estas conversaciones en voz baja dan cuenta de cómo las altas autoridades de PDVSA en el área operacional y gerencial son indolentes e insensibles y tienen tremendo desorden, ¿será intencional? ¿Será porque está en puertas un proceso electoral a favor del proceso revolucionario? Ya en Bachaquero, Tía Juana y quizás en otros lugares de la franja lacustre están evidenciados los sabotajes.
No esperemos que ocurra un hecho lamentable, puesto que en la zona petrolera se dan complejas actividades petroleras y actos de tamaña irresponsabilidad podrían poner en peligro las vidas de numerosas personas que habitan en estas localidades cuyo subsuelo posee grandes venas petrolíferas a distintas profundidades y los costos humanos y materiales serían incalculables.
El exhorto a las autoridades de PDVSA, a los organismos de seguridad, a los propios trabajadores y trabajadoras para que sean capaces de contrarrestar estas acciones desestabilizadoras, el llamado es también a las familias de los y las trabajadoras, a las comunidades organizadas a velar por su industria petrolera, al PSUV de esta extensa porción lacustre. Para nadie es un secreto que gracias a la industria petrolera es que se está llevando al pueblo las oportunidades y los beneficios que produce nuestra principal riqueza energética mineral del país.
Entre muchos aspectos veamos lo que logré captar de tan complejas actividades petroleras: de determinado departamento dan autorización para realizar un trabajo específico ya sea en el Lago o en tierra y que forma la pauta de trabajo del día o para varios días y semanas. Apenas comienzan los trabajadores a cumplir la orientación después de haber trasladado todos los implementos y herramientas, radian, sin conocerse quien o quienes instruyen, que hay suspender la labor orientada. Una vez suspendida la operación, de otro departamento reclaman a los trabajadores por haber suspendido sus funciones.
También hay recurrentes fallas eléctricas en Bachaquero que afectan a 17 equipos de gas y este gas es el que es enviado a El Tablazo y al Complejo Refinador de Paraguaná. Existe baja presión gasífera por falta de mantenimiento, hay equipos que debieron haberle hecho mantenimiento hace cuatro años y aún es fecha que nada de mantenimiento preventivo ni correctivo. Dañarse algún equipo, es paralizarse fase importante y vital del proceso de la industria petrolera, eso representaría un retraso de 4 años en las operaciones actuales.
Los y las trabajadoras preocupados por su seguridad y estabilidad laboral deducen que no hay lugar a dudas de que esto es sabotaje y que no tiene ninguna otra explicación. Si así está ocurriendo con el sistema eléctrico no es descartable que en la Costa Oriental del Lago esté ocurriendo lo que está ocurriendo y que despierta suspicacia.
La respuesta es de Seguridad de Estado y a altos niveles gubernamentales para poner en su santo lugar a los y las quintas columnas.
(*)Profesor y Periodista.
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